Karina Jelinek le confesó a la revista Caras que está separada de su marido, Leonardo Fariña. El matrimonio ya venía en baja, y la gota que rebalsó el vaso fue la denuncia por lavado de dinero que lanzó Jorge Lanata desde Periodismo para Todos.
“A Leo lo amo, pero estamos separados, tengo que aprender a poner distancia”, dijo la morocha a la publicación de Perfil. “En su momento voy a hablar, son cosas que más que a un medio tengo que contárselas a un psicólogo. Hace dos semanas cancelé todos mis trabajos porque estaba muy mal. Lloré mucho, me cansé de tener los ojitos colorados, recién ahora, después de 17 días, empiezo a retomar mis trabajos como corresponde, porque también tengo que hacer mi vida”, explicó.
Y el “hacer mi vida” parece que involucra otra persona. Al menos, así lo deslizó Rodrigo Lussich en Hola Chiche, quien delató que la modelo estaría “marcada de cerca” por un abogado maduro con presencia en los medios y fuertes vínculos profesionales con Jelinek, que no forma parte del mundo del espectáculo.
“No me siento sola, tengo a mi hermana, Violeta, que se vino de Córdoba para estar a mi lado. Y todas mis amigas y amigos no dejan de venir a visitarme”, indicó Karina a Caras. ¿Será este misterioso abogado algo más que un “amigo”?
Todo parece indicar que sí. Se trata ni más ni menos que del abogado de La Plata, Fernando Burlando, con quien Karina ya ha mantenido relaciones clandestinas en su soltería, aun cuando el letrado salía con la modelito oriunda de Rojas, Mariquena García Cornejo, quien se hacía pasar por la prima de Jésica Cirio para promocionarse.
Parece que a Karina le gustan los hombres de La Plata, ya que su ahora ex marido, Leo Fariña, es oriundo también de la ciudad de las Diagonales.
– Nova Show