“8 mujeres” de Robert Thomas es una comedia que recala en un género particular: la sitcom. Una obra de lujo que combina el talento de 8 muy buenas actrices como Leal, Pons, Mazer, Blanco, Aleman, Villa, Carballo y Villafañe, con la mirada de José María Muscari.
“Gabi, una madre poderosa; Susu, una hija mayor misteriosa; Catalina, una hija menor impune; Agustina, una hermana feroz; Mamy, una abuela imprevisible; Raquel, un ama de llaves sorpresiva; Luisa, una mucama nueva; y Regina, una cuñada histérica”, es la presentación de los personajes de una comedia al palo. De tono humorístico hiperbólico, la intriga nos lleva al punto máximo de ocho prototipos de mujeres repartidos entre estas ocho mujeres con las cuales podemos hacer una. Porque 8 dividido 8… Pero esa particularísima mujer escindida es la mismísima garganta del diablo.
María Leal (Gabi), Norma Pons (Raquel), Emilia Mazer (Luisa), Lucrecia Blanco (Susu), Katja Aleman (Regina), Mónica Villa (Agustina), Sabrina Carballo (Catalina) y Chunchuna Villafañe (Mamy) descubren la vida de cierta clase social rica materialmente pero llena de miserias espirituales. Se trata nada más y nada menos que de la miserabilidad al rojo vivo, especie de descarnada visión que logró engendrar el autor con un humor implacable que supo explotar al máximo Muscari, el director.
Ellas son 8 mujeres terribles, 8 mujeres irreversibles, quienes poseen el irrisorio encanto natural para denigrar a la otra como una puta, prostituta, yegua, ezquizofrénica, lesbiana, fracasada, sola, caballona, trepadora, asesina, cornuda… sin el más mínimo sentido de la culpa. El lenguaje de la obra se caracteriza por decir lo indecible, a boca de jarro, sin remilgos ni eufemismos.
Una María Leal que avasalla, que se lleva puesta la comedia, que posee el carácter para ser la peor o la mejor… esposa, madre… Un papel que merece un notable reconocimiento. Excelente representación de Mónica Villa, la reprimida, la cruel, la envidiosa, la “tapada”, la sorprendente mosquita muerta… Norma Pons, genial; Katja Aleman imponente; Emilia Mazer bella y exquisita; Lucrecia Blanco astuta; Sabrina Carballo, la pálida frescura; y Chunchuna, una señora de las tablas… Todas, llevadas a lo más alto de lo satírico emocional, exhiben grandes interpretaciones.
La intriga se desenvuelve en torno al crimen de un empresario, padre de familia, único hombre de la casa, por lo cual están todas sospechadas. Especie de policial, parodia quizás al género, va por los carriles de la reunión de “pìstas” domésticas para develar el misterio. Pero la ficcionalización de un asesinato conduce a la materialización de un suicidio por el cual no ya una, sino todas, son culpables.
Humor inteligente, sin condescendencias ni timideces, va al fondo de la cuestión femenina más íntima que devela esos misteriosos secretos que universalizan la condición del género. Si alguna vez alguien quiso entrar en los pensamientos de las mujeres… esta obra lo logra. Su exposición también genera su comprensión, su humanidad, su debilidad, sus deseos, sus pasiones ocultas.
El público, en un 90 % mujeres, de a ratos parecía mirarse en un espejo…
María Leal expresó al término de la función: “estamos felices en un teatro casi repleto… Y como estamos en Salta La Linda, esta noche nos sentimos lindas…”
El Teatro del Huerto a sala llena, explotaba en aplausos la noche del jueves 5 de julio.
Una obra de excelente factura artística.
– Fotos tomadas por Salta 21
– Nota relacionada:
La comedia «8 Mujeres» se presenta en Salta con 8 mujeres de lujo
http://www.salta21.com/La-comedia-8-Mujeres-se-presenta.html