25.3 C
Salta
sábado, noviembre 23, 2024

Brujas, prostitutas y computadoras

Notas más leídas

El cambio en Salta es para atrás. Se pretende justificar la represión contra travestis. Mujeres al cadalso, acusadas de brujas. El gobierno quiere imponer la religión en las escuelas. Vamos al Medioevo por la PC y mientras tanto, droga libre…

Definitivamente el cambio en Salta es para atrás. Cualquiera que quiera interpretar la realidad Salteña se sorprenderá con los ejes de discusión de nuestra política. Desde hace semanas no dejamos de debatir contra una gran movida tendiente a justificar la represión contra las travestis y vemos que se iniciaría alguna clase de juicio -no me queda claro el delito- contra abuela, madre e hija por ser brujas. Mujeres al cadalso. Adiós a toda perspectiva de género.

Simultáneamente el gobierno envía un proyecto de ley para imponer la educación religiosa en las escuelas. Tan brutal es el proyecto que hasta la Masonería salio de su silencio y emitió un comunicado. Y mientras todo esto transcurre, la droga sigue circulando en Salta.

Es totalmente válida la posición de los vecinos de Hernando de Lerma pidiendo que se evite el ejercicio de la prostitución en las calles. Sin duda que tal grito de desesperación amerita alguna respuesta inteligente y efectiva. El mantenimiento del sistema imperante, que no logró solucionar el problema en años, no podrá hacerlo de la mano del garrote. Fué realmente sorprendente la posición del gobierno del cambio en la segunda asamblea popular. Atónito pude escuchar el mensaje del Secretario de Seguridad, estableciendo la teoría de dos bandos en guerra: los vecinos y … y … y … no pudo, supo o quiso nombrarlas.

Desde ya, el mensaje fué brutal, e inaceptable en el marco de un gobierno democrático. Una visión maniquea que plantea que una prohibición inexistente se aplique a garrotazos y como acto de guerra. A partir de allí el gobierno repite como un salmo inexactitudes y niega todo intento de cambio de las normas y de la actividad. Solo se aferra a su «brazo armado» como instrumento de cambio.

Es interesante analizar el texto de nuestra ley contravencional: «114: Serán sancionados con arresto de hasta quince (15) días, conmutables con multa equivalente, las personas que ofrecieren o incitaren en la vía pública a practicar actos sexuales, por dinero o cualquier otra retribución que ofreciere.»

Una lectura atinada mostrará que sólo se refiere a quienes ofrecen pagar por sexo. No se si ésto habrá sido debatido cuando se redactó, pero el código coincide con las más modernas legislaciones europeas. Se penaliza al que paga. Por ende, las «prostitutas» no son «contraventoras», sí sus clientes. Ademas lo único que contraviene es la demanda de sexo en la vía pública, no en otros ámbitos: prostíbulos, etc..

Así pues este discurso guerrero no tiene sustento en nuestro Código. Y toda la actividad policial desplegada sería delictuosa y sin fundamento legal.

Es hora de pensar un nuevo sistema para regular la problemática. No tanto con el cambio del Código, sino con la instauración de verdaderos jueces en su aplicación. Un sistema que permita a los vecinos vivir en paz y que permita a las trabajadoras sexuales desarrollar su actividad en un marco de mejoría de sus condiciones de vida.

Es interesante notar que en el debate, algunas posiciones, particularmente desde las visiones religiosas o ideológicas plantearon la prostitución como mal a erradicar. Así un evangelista citó el antiguo testamento (el nuevo quizás hubiese aportado otra visión) y los dirigentes del PO plantearon a la prostitución como un ámbito de explotación propio del capitalismo.

Y esta posición compartida por el Primer Testamento y el Partido Obrero es válida, y sin duda sería muy bueno que nadie tuviera que verse obligado a esta actividad. Pero la cuestión aquí, no es cómo creamos leyes perfectas inaplicables a nuestra sociedad. Las leyes difícilmente alteran las costumbres. La fuente del cambio social no es la ley, sino el cambio de las relaciones de producción y poder en la sociedad; las costumbres; la cultura.

La ley puede cumplir un papel, mediante la regulación de las costumbres existentes, en mejorarle la vida a algunas personas. En este caso a los vecinos de Hernando de Lerma y a las trabajadoras sexuales. No como ejércitos disímiles en pugna. – Es probable que muchas trabajadoras vivan en dicho barrio al igual que muchos clientes.- Sino como miembros de una sociedad compleja con derechos y obligaciones.

Recomiendo un vídeo que se consigue en Internet: «El poder de las pesadillas». Allí se explica como controlar a las sociedades mediante el miedo: «Hay que elegir un enemigo» aunque no sea tal. Si no existe se lo construye. Desde los jefes de seguridad del gobierno se construye un enemigo social: las travestis, las prostitutas.

El camino no es el enfrentamiento, el camino es la discusión racional y el consenso.

Debemos trabajar por instrumentar una verdadera educación sexual en las escuelas, una educación que dé herramientas a las personas para comprender los cambios de la adolescencia y a manejar su sexualidad mediante su voluntad.

Paralelamente en Salta también se dió un debate sobre pornografía en los cybers donde desde algunas usinas se instalaba la imagen del cyber como un neo-prostíbulo adonde nuestros adolescentes tendrían su iniciación sexual virtual.

Es llamativo como se focaliza la atención en el cyber, pero no en las miles de computadoras de hogares salteños donde seguramente circulan las mismas imágenes. Y más allá de esto en los cientos de miles de televisores donde se distribuyen imágenes de alto contenido erótico, profesionales y creadas con el fin de excitar sexualmente. Claro los cybers son los lugares donde se puede democratizar internet y las sociedades del conocimiento.

Es interesante notar que mientras se instala la idea del cyber como algo negativo, desde el gobierno se prepara un plan que se denominaría «la PC Salteña», que de salteña solo tendría el pagador. Y que consistiría en un forma de promoción para que grandes multinacionales como HP y Microsoft instalen en los hogares salteños computadoras.

La idea de disminuir la brecha digital es buena, ahora, es ¿necesario obligar a todos los interesados a adquirir licencias y productos de estas empresas? Como todo lo que parece hacer nuestro gobierno, el vaso nunca queda lleno. Aquí el concepto de «Igualdad ante la ley», que para algunos funcionarios de este gobierno sería denominado «neutralidad tecnológica» sería olvidado y reemplazado por el apoyo a las Multinacionales, tanto desde estos planes como desde la Escuela de la Administración Pública. Esperemos los anuncios oficiales, hay tiempo de recapacitar.

Así, en Salta debatimos simultáneamente sobre las zonas rojas reales y las digitales. Debatimos sobre brujas y computadoras. Mientras tanto, no aparecen planes que nos permitan sacar de la exclusión a miles de Salteños ya que invertimos en licencias de Microsoft; no aparece ninguna medida efectiva contra las drogas, ya que nuestra policía persigue a «las prostitutas». Todo se reduce al asistencialismo y los subsidios, que no son negativos, pero que son insuficientes. No ofrecen una salida. No establecen derechos.

El cambio, bien gracias. Nos introducimos al medioevo mediante las pantallas de mi PC Salteña. ¿Preparará nuestro gobierno cursos virtuales sobre las distintas religiones? Sería bueno. Salir a la calle es demasiado peligroso. Salem no esta lejos. Galileo se ríe desde una esquina, sólo porque ya está muerto. El poder de las pesadillas. El retrocambio avanza.

Diego Saravia

Diego.Saravia@gmail.com

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -spot_img

Últimos Artículos