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lunes, noviembre 25, 2024

La historia de una alumna que aprobó sin «saber nada» es una historia para pensar

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En la gestión anterior, inculcaron a los docentes que aprueben a los alumnos como sea. Elevar números de estudiantes aprobados fue necesario para justificar la política educativa so pena de que venga el Supervisor, el Ministerio, y si es posible la Justicia, si no se bajaba el porcentaje de desaprobados. La historia siguiente plantea que se le tome al alumno lo que «sabe». Es discutible. De ser así, ningún estudiante debe presentarse habiendo estudiado los contenidos, simplemente, baste que traiga conocimientos previos relacionados a la asignatura en cuestión. Y se lo acredite no por lo que debe saber.

Una historia ocurrida en la ciudad de Mar del Plata y compartida en un blog recorrió las redes y llegó a ser nota del diario La Nación.

Se trata de una docente que contó la historia de una alumna a la que aprobó pese a que la chica asumió que “no sabía nada”.

Lucía Gorricho relató que la estudiante necesitaba aprobar un examen para pasar de año pero que como no había sido su alumna decidió “preguntarle a ella los temas que habían visto en geografía el año anterior; pero no se acordaba ninguno”.

El relato de la docente continúa así:

“Con piel morena y voz muy bajita, me dijo que no había podido estudiar porque no tenía libro ni carpeta. Entonces le dije que yo tenía toda la voluntad de aprobarla pero que era fundamental que escribiera algo que justificara la nota.

A pesar de mi insistencia no supo decir nada en relación a los contenidos de la planificación anual y entonces le pregunté:

¿De las frutillas sabés algo?

Abrió los ojos enormes.

Si, me dijo.

Entonces sobre la hoja de carpeta que ella misma me dio escribí:

Evaluación de Geografía

Fecha: 07/04/16

Año: 2º

Estudiante: G.C

1) Describir una actividad económica

y ella preguntó:

¿Puedo escribir también sobre Bolivia? Porque yo soy Boliviana.

Si claro, le dije. Entonces agregué:

2) Mencionar los aspectos más importantes del algún país latinoamericano.

A las dos horas me entregó 3 hojas escritas de ambos lados con letra clara y prolija.

Hacía tiempo que no corregía una evaluación con tanto entusiasmo. Todo el relato de esta nena de 14 años aportó sin duda, a mi formación como geógrafa y como docente. Comparto el desarrollo de la evaluación porque creo que no pueden quedar estos contenidos sólo en mí.

Corregí las faltas de ortografía y agregué algunos signos de puntuación para facilitar la lectura.

1)

En la frutilla trabajan aproximadamente 200 personas que cosechan la fruta, limpian el campo, sacan las hojas, sacan la maleza, tienen que carpir. Ahora pagan más que antes aún mejor, pagan todo lo que hacen si carpean, limpian la cunita, etc. Algunos niños trabajan ahí aproximadamente de la edad de 13 años para arriba y algunas embarazadas también pero no hacen tanto esfuerzo o si no, no trabajan. Eso depende de ellas. A veces lo hacen para ayudar a sus maridos. Algunos de ahí, bueno casi todos, son juntados.

Casi todos los bolivianos trabajan en el campo y siempre llegan cansados y que no le toman importancia a los hijos que nunca le preguntan nada qué cómo estás o algún problema en la escuela.

Las frutilla se cosecha en cunitas en un carrito y un balde. El balde es para descartable y la cunita es para armar caja. Eso se llama embalada. A mí me gusta embalar y armar cajas y claro a la frutilla se le pone esa cosa rara en las plantas. Las riegan con un tubo que está debajo del plástico. Lo ponen los tractores.

Las cajas con frutilla y las cunitas con frutilla descartable se lo lleva un tractor que viene a las 12:15 o cerca aproximadamente y a la tarde también.

Los bolivianos pueden soportar más el campo que los argentinos porque los bolivianos tienen el trabajo más pesado y los argentinos están en las oficinas o será porque ellos si pudieron estudiar? Yo pregunto en mi casa porque no estudian porque no hay tiempo es la misma respuesta que me dan todos los días.

Ya que la frutilla es una empresa a nosotros nos dan techo, agua potable, luz menos gas. Pero claro a veces nos quitan un poco de plata para ayudar en las pagas. Para que los padres se vayan tranquilos a trabajar hay una guardería que los cuidan. Ahí les dan desayuno, comida y merienda y hay reuniones para levantar la basura. Porque además de levantar la basura de su casa, tienen que levantar la basura del patio o del suelo del baño y sino están presentes, tienen que pagar 5 pesos por cada día que falten.

También hay donaciones que mandan o traen en camiones y se le dejan a una señora que se llama Graciela y parece que ella se queda con las ropas de las cosas bonitas que llegan y lo descartable lo dejan en una carretilla para que la gente lo use.

2)

Bolivia me encanta porque la primera vez que fui me encantó. Cuando es de noche todas las luces se encienden de todos colores y yo escucho tambores y cosas así como una banda porque mi casa está en una montaña. Me acuerdo cuando fui a la cancha. La cancha es una cosa que llega casi a la terminal. Hay tiendas de comida, ropa, bebidas y cosas de mercadería. A mí me gustó donde venden caña de azúcar.

En Bolivia hay montañas chicas y en la escuela les dan uniformes. Sabía que en el jardín de niños estudian las lineas, los cuadrados, triángulos y números?

La gente del campo vive en casas de barro y paja y lo único que comen es chuño y mate y cuando es cumpleaños de alguien de la familia comen seco que significa arroz con papa y ensalada y carne seca y queso de vaca y de desayuno arroz con leche y buñuelo. Todo eso lo cocinan en una clase de horno a la parrilla y yo me sé el nombre pero no sé cómo se escribe.

La gente, más bien las mujeres, tienen que ir con ropa lavada desde su casa hasta que llegan a un río caminando y la ropa la llevan en un aguayo en la espalda. Más o menos lo que tienen que caminar es desde aquí hasta Sulema para enjuagar la ropa.

Alguna vez comió tostado? Se hace con habas. Las hacés secar al sol hasta que estén más secas. Después tenés que poner en una olla sal y después poner las habas secas y tostarlas hasta que revienten. Mi abuela las hacía. Sabe que mi abuela tiene ochentaialgo y fue al doctor y le dijo que estaba muy fuerte ella? Vive en el campo y solamente dos veces la vi.

La aprobé. La abracé cuando se fue. Le pedí permiso para compartir su texto en internet y le dije que escribiera todo lo que pudiera porque escribir hace bien y porque siempre hay cosas importantes para contar. Con un 4 (cuatro) pasó de año y por eso no estará en mi aula durante este ciclo lectivo, pero espero cruzármela en los pasillos o en el patio y preguntarle:

¿Cómo fue tu día de ayer? ¿Lo querés contar en un papel?

– La Voz

2 COMENTARIOS

  1. La historia de una alumna que aprobó sin «saber nada» es una historia para pensar
    “La aprobé. La abracé cuando se fue…”- Lucía Gorrich

    No comparto el gesto de la profesora, no me parece “una genia”, ni una forma de educación popular, ni una docente ejemplar y cuantos elogios más expresados por las redes sociales. Me niego aplaudir la estafa al conocimiento y más cuando se ejecuta contra los estudiantes de los sectores populares, los más carentes de todo capital material y simbólico, ya que ellos son merecedores del respeto primordial a través de recibir el mejor y más elevado conocimiento escolar. Aprobar a una alumna “sin saber nada”, en nada la ayuda, solo en acrecentar su opresión laboral y académica futura. Además, se suma el dejo de fatalismo racial que tiñe su texto, destaca: “Con piel morena y voz muy bajita”…” Abrió los ojos enormes.” no se acordaba ninguno…” no había podido estudiar porque no tenía libro ni carpeta…” no supo decir nada en relación a los contenidos de la planificación anual”… Corregí las faltas de ortografía y agregué algunos signos de puntuación para facilitar la lectura.”Se refiere a la alumna por sus rasgos físicos y sus carencias materiales e intelectuales y el manejo de un “código lingüístico restringido”. (Bernstein)

    Por otro lado, esta lamentable experiencia pedagógica de la profesora que aprobó a la estudiante “sin saber nada”, se enmarca en la política educativa de estos años largos pasados. Ella destaca: El director me anticipó que el nivel académico no era bueno pero que era una alumna que se esforzaba mucho para estar en la escuela.”La gestión educativa anterior bajó líneas directas e indirectas para aprobar a los alumnos como sea, para bajar los porcentajes de desaprobados. Desde el Plan de Mejora Institucional (PMI), la reformulación de metodologías estrategias de aprendizajes, observaciones de supervisores de exámenes, actas mediantes y cuántas otras historias de presión vividas por los docentes para aprobar a los alumnos y justificar el nivel secundario obligatorio e inclusivo. Los saberes escolares del nivel secundario están devaluados y reducidos a los NAP (núcleos de aprendizajes prioritarios) y habilidades cognitivas. Este proceso de deterioro comenzó con la Ley Federal de Educación que reemplazó y vació a las asignaturas de contenidos. En esta línea continuamos, por el momento no se avizoran cambios en el horizonte de la calidad educativa.

    Por último, el texto de la profesora me llevó a pensar en la propuesta pedagógica de Phillipe Meirieu, quien visitó a la Argentina y dictó una conferencia en el contexto de la celebración de los 30 de democracia,”La opción de educar y la responsabilidad pedagógica” .Dice:”La escuela transmite saberes, pero la escuela democrática transmite no cualquier saber y no de cualquier manera. No transmite solo los saberes según lo que Paulo Freire llamaba “sistema bancario” para aprobar un examen y pasar al nivel superior, sino que transmite saberes que permiten a la vez, inscribirse en una historia y proyectarse en un futuro. Son saberes emancipadores y esa capacidad emancipadora de los saberes es una manera de volver a poner al saber en el centro de la escuela. Y para eso necesitan tener delante, adultos que a su vez se emanciparon mediante el conocimiento. Es de esa manera como vamos a volver a abrir el camino del conocimiento, y como vamos a hacer que los saberes escolares no sean solamente utilidades escolares sino herramientas de formación de los ciudadanos.” También sostiene que la evaluación debe hacer progresar el conocimiento del alumno, “es el derecho a la perfección.” El derecho mayor, el de poder aprender, y se logra a través de la evaluación. El adulto debe exigir la perfección más que evaluar la mediocridad de sus alumnos. Realmente allí hace su trabajo de educador.

    “Entonces le dije que yo tenía toda la voluntad de aprobarla pero que era fundamental que escribiera algo que justificara la nota…La aprobé. La abracé cuando se fue…”Triste y desgraciada opción pedagógica de la profesora .
    Prof. A.B.


    Phillipe Meirieu, La opción de educar y la responsabilidad pedagógica”-Texto enviado por el Ministerio de Educación de la Nación a las escuelas para Jornadas Institucionales.-

  2. La historia de una alumna que aprobó sin «saber nada» es una historia para pensar
    Es para pensar quien opina y escribe esta nota de Salta 21. Lo que hizo esa docente es algo muy dificil de hacer: contextualizar. No se trata, al menos asi lo deja ver la situacion, de un caso de una alumna imbecil o atorranta, sino mas bien de una chica de escasos recursos, extranjera, con una vida dificil, que aporto una vision diferente sobre lo que si sabe y conoce, que configura una mirada mas sobre la Geografia. El gesto de la docente le suma muchos puntos a esa alumna, inconmesurable puntaje que le servira por el resto de la vida.

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