El inédito paro en la Universidad Católica desnudó una realidad que muchos en Salta desconocían, pero también puso a la luz a un personaje, que por su participación en una de los mayores escándalos de la historia, difícilmente podría relacionarse con la Iglesia Católica.
El Coronel retirado, Manuel Cornejo Torino, se desempeña actualmente como vicerrector Administrativo de la Universidad Católica de Salta, pero además de este alto cargo en la institución, es uno de los imputados en la causa de venta ilegal de armas a Croacia y Ecuador. Su hermano, Juan Carlos, sería uno de los responsables del atentado contra la fabrica militar de Río Tercero, durante la noche del tres de noviembre de 1995, que dejó como resultado: tres muertos y más de 300 heridos.
Junto a Manuel Cornejo Torino están imputados: Emir Yoma, Luis Sarlenga y Diego Palleros, el coronel Edberto González de la Vega, Jorge Cornejo Torino, Antonio Ángel Vicario, Carlos Franke, María Teresa Cuello, Teresa de Canterino, Mauricio Muzi, Julio Sabra, Haroldo Fusari y Carlos Nuñez.
Hasta tanto no se defina definitivamente su situación, no será juzgado en esta tanda el ex presidente Carlos Menem, quien integra otra extensa lista de 36 imputados en la investigación en la que también figura el ex ministro de Defensa Oscar Camilión. Por encima de Cornejo Torino en la Universidad Católica, sólo están, Monseñor Mario Antonio Cargnello, el rector Alfredo Puig y vicerector académico, Gerardo Vides Almonacid, todos ellos al tanto de la situación procesal de Cornejo Torino.
El pasado marzo, Manuel Cornejo Torino, involucró al ex jefe de comercialización de esta fábrica, Haroldo Fusari, y a funcionarios del menemismo en el juicio oral y público por la venta ilegal de 6.500 toneladas de armas a Ecuador y Croacia, que se lleva adelante en Buenos Aires y que comenzó el pasado 6 de octubre del 2008.
Cornejo Torino fue director de fabricaciones militares en 1991, cuando empezó la venta ilegal, y está en la lista de acusados que señala el Tribunal oral federal en lo Penal Económico N°3.
«Si cometí un error, fue confiar en Fusari y en la Comisión Tripartita», dijo el actual vicerrector de la Universidad Católica. Fusari tenía a su cargo la Gerencia de Comercialización de Fabricaciones Militares, y la Comisión Tripartita, integrada por funcionarios del Ministerio de Economía, Defensa y Relaciones Internacionales, que supervisaba las ventas de la fábrica.
Frente a los tribunales de Comodoro Py Cornejo Torino, aseguró que «nunca tuve relación con la exportación de armas. Mi experiencia se contrapone con la de los funcionarios», y agregó que «jamás tuve contacto con alguno de los compradores. De eso se encargaba Fusari».
«Cuando estaba en Fabricaciones me llamó una persona que dijo ser del Ministerio de Defensa y que tenía interesados en la compra. Yo les pasé con la Gerencia de Comercialización y nunca más supe nada».
La venta ilegal consistió en una triangulación de países. Fabricaciones Militares, mediante un decreto, vendía armas a Panamá, pero en realidad iban a Ecuador y Croacia, que eran destinos ilegales.
El punto central de la investigación son los decretos firmados entre 1991 y 1995 que autorizaron las ventas a Panamá, Venezuela y Bolivia, y que terminaron en Ecuador pese a que Argentina era garante de paz entre esa Nación y Perú, que se encontraban en guerra y en Croacia, no obstante la existencia de un embargo dispuesto por las Naciones Unidas.
Juicio y favores
El juicio comenzó el pasado 6 de octubre de 2008 y en Salta, con la excepción de un diario, la noticia paso desapercibida, pero también fue llamativo, que desde el momento en que Cornejo Torino ingreso como autoridad de la Universidad Católica, nunca fue mencionado en las crónicas de El Tribuno, ni en los principales medios de comunicación salteña. Cuando alguna referencia a la causa cobraba estado público, su nombre se diluía dentro de la extensa y notoria lista de implicados. Nunca se lo entrevistó, ni se le pidió explicaciones a la Curia, de ¿Por qué nombró entre sus máximos directivos a un hombre que se encuentra implicado en una de las mayores causas judiciales del país?
El juicio oral y público por el contrabando de armas a Ecuador y Croacia comenzó con la ausencia del ex presidente Carlos Menem, en el primer proceso que tiene a un jefe de Estado electo democráticamente en el banquillo de los acusados.
El ex presidente Carlos Menem argumentó razones de salud para dejar vacío su lugar en el banquillo de los acusados, en el primer día de un juicio que se presume durará nueve meses.
El debate judicial será dirigido por el Tribunal Oral en lo Penal Económico 3 presidido por Luis Imas, Héctor Acuña y Horacio Artabe.
Junto a Menem comenzaron a ser juzgados su ex cuñado y ex asesor presidencial Emir Yoma, su ex ministro de Defensa Oscar Camilion, el ex Jefe de la Fuerza Aérea Juan Paulik, el traficante de armas Diego Palleros, el ex director de seguridad internacional de Cancillería Enrique De La Torre y Mauricio Muzzi (ex director de coordinación empresaria de Cancillería).
Comparten el carácter de procesados Luis Sarlenga, ex interventor de Fabricaciones Militares FM; los ex gerentes Haroldo Fusari y Carlos Núñez y los ex directores Manuel Cornejo Torino, Edberto González de la Vega, Carlos Franke, Antonio Vicario y Julio Sabra, junto Teresa Irañeta de Canterito, ex jefa de abastecimiento.
La nómina de 17 imputados a los que el fiscal Marcelo Gorinsky y los abogados Juan Solari y Carlos Lobos Oroño, querellantes en representación de la Aduana, acusarán por «contrabando agravado por tratarse de material bélico» la completan Jorge Cornejo Torino, ex director fábrica militar de Río Tercero y María Teresa Cueto, ex verificadora de Aduanas.
Cada uno de ellos tuvo su papel preciso en el contrabando de 6500 toneladas de armas (buena parte de ellas del Ejército) que, en tres decretos firmados por Carlos Menem, tenían como destinos falsos Panamá y Venezuela, pero en realidad fueron a Croacia en siete embarques marítimos entre 1991 y 1995 y en tres envíos aéreos ese último año a Ecuador.
Según la investigación, el trayecto de una porción de todo el envío ilegal de armas: la de 25 mil cargas de pólvora que salieron de la Fábrica Militar de Villa María, Córdoba, pasaron por Campana, rumbo al puerto de Buenos Aires para ser cargadas al buque Croata “Line” con destino a Croacia. A eso se sumaron 6250 bultos y proyectiles que partieron de Río Tercero y Río Cuarto. Las actas de FM decían que la pólvora había sido incinerada, pero la investigación que originalmente tuvo el juez de Bell Ville Edgardo Filippi mostró que había sido transportada en 107 camiones y 112 contenedores. A Cueto se la acusa de no haber verificado qué había dentro de los contendores. La intervención de Sarlenga, Vicario y González de la Vega fue clave para consumar los envíos y las exportaciones.
Una denuncia
La causa por la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia fue abierta en marzo de 1995 por una denuncia del abogado Ricardo Monner Sans en el juzgado federal de Jorge Urso y la fiscalía de Carlos Stornelli, éste último, el mismo que investiga el caso Skanska.
El caso puso en jaque al menemismo, y la confesión del «arrepentido» Sarlenga en abril de 2001 disparó la causa hacia lo más alto del poder. El mismo ex mandatario estuvo en prisión hasta que la Corte Suprema de Justicia de ese gobierno desarticuló la figura de la asociación ilícita y permitió la excarcelación de Menem y Yoma.
La causa pasó por varios jueces que fueron dilatando el envío a juicio y ahora el Tribunal Oral que deberá juzgar apuró todos los trámites de procedimiento para finalmente poner la fecha de comienzo al debate.
Cabe recordar, que Manuel Cornejo Torino fue procesado en el 2001 por el juez en lo penal económico, Julio Speroni, y le dictó la prisión preventiva. La medida, que incluyó un embargo preventivo sobre sus bienes.
Desde tribunales, Cornejo Torino fue enviado detenido al Escuadrón Buenos Aires de la Gendarmería Nacional, donde había otros procesados en la causa: como el ex ministro peronista Ermán González y el coronel retirado Haroldo Fusari.
– En las fotos Manuel Cornejo Torino.
Por fin Menem en el banquillo!!!
Desconozco la implicancia de Cornejo Torino y me parece muy bueno que se realice la investigación. Eso sí:¡Por fin Menem en el banquillo! Ojalá se juzgue como corresponde al gran entregador del patrimonio nacional, y se embarguen sus bienes para que no sean de provecho de sus herederos. Lo que era del estado y fue robado, que regrese al estado (ojalá q no sea para que los sigan robando).
Porqué BALSA no ?
¿Porque MARTIN BALSA no está imputado si las armas que salieron del país eran de Unidades militares? Las piezas de artilleria de 155mm , las de 105mm no eran propiedad de Fabricaciones Militares sino del Ejército Argentino. Además hay varios tanques que también llegaron a Croacia y nunca se los mencionó. Para que estas armas salieran de los cuarteles tenían que tener una orden del Jefe del Estado Mayor. Es más FFMM no tenía poder de autoridad sobre el EA. En mi opinión BALSA debería estar imputado. Oscar