A 8 años del asesinato de Carlos Fuentealba, los responsables políticos del crimen siguen impunes, entre ellos, Jorge Omar Sobich, gobernador de Neuquén, quien admitió haber dado la orden de reprimir. Solo el ex cabo primero Darío Poblete fue condenado a prisión perpetua por matar al maestro Fuentealba en el 2007, producto de la presión popular. Aunque luego se lo vio saliendo a pasear de compras por Zapala. Y que, a pesar de su condena, desde mayo de 2008 cobre una pensión porque fue pasado a «retiro» antes de su condena.
En ese marco, el martes próximo en la ciudad de Neuquén, el Tribunal de Impugnación revisará el dictamen de la jueza de Garantías Ana Malvido por el que sobreseyó a los 15 policías y ex funcionarios imputados en la causa conocida como “Fuentealba II”. Esta situación muestra a las claras la impunidad del poder político y económico en la provincia y el país: Los mayores responsables del crimen, gobernantes y funcionarios políticos que dieron las órdenes para la represión que se cobró la vida de Fuentealba, no solo están en libertad, sino que siguen en sus puestos o presentándose como candidato para las futuras elecciones.
El asesinato de Carlos dejó también en claro la crisis del sistema educativo nacional, las luchas docentes en defensa de la Escuela Pública se extendieron y extienden a lo largo de todo el territorio nacional: la precarización de los trabajadores en general y del educador en particular, los niveles de deserción escolar y los problemas de aprendizaje de nuestros jóvenes, forman parte de una misma política educativa que tiende a vaciar la escuela pública, limitándola a un rol asistencialista que garantice los privilegios de corporaciones y poderes existentes.
La figura de Carlos Fuentealba despierta múltiples lecturas en las y los docentes que continuamos esa lucha en diferentes regiones del país, pero al ofrendar su vida, su mandato contiene y a la vez supera, la lucha por las reivindicaciones económicas inmediatas y las vincula en un horizonte estratégico: la lucha en defensa de la escuela pública es parte constitutiva de la lucha por un orden social más justo.
A 8 años: ¡Cárcel a Sobisch y a todos los responsables de su fusilamiento!
Carlos Fuentealba, ¡presente!
– Federacion Docente FND