Noveno Aniversario del Salón Auditórium, de su refuncionalización y crecimiento cultural. La Parodi dialoga con Salta 21, radiante, feliz, dispuesta, inteligente y optimista. Su teatro tiene el mismo ímpetu de su directora, y que ha hecho camino al andar.
El teatro es Infinito
¿Considerás a Teatro Infinito como un sello cultural en Salta dentro de lo que es teatro independiente?
– Una propone… y las circunstancias, te llevan y te traen… No creás que todo comienza representando un plan organizado a largo plazo. Desde un principio, mi intención fue que la Fiesta Aniversario del Auditórium se convirtiera en un clásico; y cada año jugaba combinando el número de años, con la característica y/o temática de cada temporada: así fue inclusive hasta el séptimo año, en que se denominó 70 Veces 7, y como es un número cabalístico, quise que fuera a lo grande e invité, por primera vez, a grupos del NOA; en el Octavo se denominó Teatro Infinito – por la asociación de la cinta de Moebius con el número 8 – y luego, en la organización y proyecto de este Noveno Aniversario, pensé que acuñar como marca Teatro Infinito para identificarlo definitivamente con el Aniversario, sumaba. Y sí, definitivamente se convertirá en un sello cultural dentro de la actividad del teatro independiente de la región. Este es el tercer año, que obtengo importante colaboración de la Secretaría de Cultura de la provincia y del Instituto Nacional del Teatro. Además, la prensa en todos los medios de comunicación, me apoya incondicionalmente.
¿Qué balance podrías hacer, Ana, del encuentro anterior, en que incluso hubo teatro de otras provincias…?
– Desde el séptimo Aniversario, el encuentro tiene el carácter de regional. El año pasado, contamos con la presencia de Santiago del Estero, Tucumán, Catamarca, Jujuy y Salta.
Fue una amplia muestra de la región, sin embargo, hubo poco público. No puedo asegurar si fue por error de comunicación, falta de publicidad o por razones externas que una nunca llega a comprender aunque lo analice sesudamente. Hay temporadas que fluyen blandamente y otras que hay que «empujar» con mucha fuerza. En este caso, anticipó la dureza de la temporada 2011. Fue dificil, lenta, perezosa en muchos sentidos.
Esto de “hacer a pulmón”, ¿incluye calidad de espectáculos?
– Siempre se trata de ofrecer calidad. Sin embargo, no puedo ser juez y parte, y el momento de la selección es sumamente complicado. Cuando hay muchas inscripciones la tarea se vuelve…. como te puedo decir … «verdugueante» (risas). Invito compañeros a que me ayuden, mirando los videos, especialmente los de otras provincias… porque las obras de Salta, las veo casi todas personalmente, me gustaría incluirlos a todos, pero a veces no se puede por cuestiones de tiempo, y de costos… Me incomoda muchísimo tener que dejar algunas propuestas fuera de la selección… pero tampoco se puede hacer encuentros infiniiiiiitos… (risas) … Quien te dice… tal vez para el Décimo sea mensual, ¿por qué no?
¿Has notado que asiste un público nuevo?
– A veces sí… según las obras… después de 9 años, aún hay gente que no conoce el Nuevo Auditórium – por llamarlo de alguna manera- creo que juega en contra la vieja imagen mental que tienen acerca del espacio, hay personas que se quedaron con la imagen decadente y se asombran cuando entran, y ven los progresos y cambios, no sólo en estructura edilicia y confort, sino también en equipamiento. En esto tengo que agradecer la permanente asistencia del Instituto Nacional del Teatro. Volviendo al público, vi mucha gente «nueva» el año pasado, cuando traje a Edda Díaz.
¿Comenzaste con algo chiquitito y después tuviste un proyecto enorme en tus manos?
– Si (con énfasis), claro que sí, pero no sólo con el Aniversario o el Infinito… desde un comienzo, en aquellos duros años 2003, 2004… 
nunca pensé que la re-funcionalización del Auditórium iba a tomar vuelo, ni fue tampoco algo planeado. Se vivía el día a día, había mucha incertidumbre… cambios de gobiernos, cambios de funcionarios… En ese entonces, pensar en el 9º aniversario, era una utopía difícil de imaginar. Por eso repito: «Una propone…» y las circunstancias, te llevan y te traen. Eso sí, una vez que carretean y toman vuelo, defiendo la continuidad y crecimiento de mis «bebés»… (risas)
¿Te sentís gestora de cultura?
– Absolutamente. Cultura y espectáculos, que son primos hermanos o mellizos siameses… Actualmente estoy trabajando en un proyecto para desarrollo de la actividad teatral para jóvenes en los barrios, como prevención de la delincuencia y opción válida para ocupar manos, mentes y espíiritus … creo firmemente en que los objetivos y metas en la vida de la gente, salva vidas y transforma destinos. Estoy armando la Fundación Victoria para respaldar este proyecto, porque los esfuerzos individuales funcionan en forma personalizada, sirven para algun que otro reconocimiento, pero desaparecen con las personas cuando envejecen, se retiran o mueren. En cambio si se institucionalizan siguen funcionando y cumpliendo objetivos con herederos preparados y capacitados… este es otro sueño grande, claro. Pienso: ya estoy mayorcita tengo más de 30 años, ¿quién sigue?… ¿y qué pasará con mis bebés si me retiro o me muero?… ¿quién sostendrá a mi marido, el Señor Auditorium?… (risas)…
¿Qué habrá este año en la cartelera?
– Este año el Infinito trae: La edad de la ciruela (Catamarca), Casa de piedra (Jujuy), Más allá, Teatro de Sombras (Jujuy); Cándida, la candidata de todos (Rosario, Sta. Fe); Margarita y azahares (Paraná) ya ves que va trascendiendo a la región… Y por Salta participan: El partener, Juana soy yo, Contrainteligencia; Caras, caras y más caras; Escuela de Comedia Musical y Me lo contó un pajarito… En el Show Inaugural del día 27 -Día Mundial del Teatro- participa Nagoba, banda de música. También se lanzará un nuevo premio a las artes escénicas producción 2012 – no te cuento nada todavía- y simbólicamente se hará entrega de la primera distinción, es sorpresa, aquí cierro el pico; y está el Taller «Práctica del Teatro en el espacio áulico», que tambien es una joya; el año pasado se dictó una primera instancia y ahora es la segunda parte, pero se dicta de manera tal que los alumnos del año pasado lo pueden seguir, y los nuevos lo comienzan desde cero. El docente es el Lic. Facundo Vega Anchetta, oriundo de Tucumán…
¿Cómo te estás llevando con el trabajo organizativo?
Uuuuuy, bien… ¿alguna vez dije mal?… es enredado… y a mí me gusta tener todo listo un mes antes. Ansiosa, perfeccionista… lo tengo harto al pobre Juani retocando diseños y videos. Por suerte él me responde muy bien; voy, vengo, golpeo puertas, pregunto, me enojo, me río, me aflijo, horas en la PC, mantenimiento y limpieza de la sala, pintura, camarines, hospedaje, comidas, imprenta… un torbellino que termina el 1º de abril… (risas) Y veremos con qué seguimos.
Tu pasión por el teatro incluye actuación, dirección y gestión… ¿Es el lugar de la incomodidad el que más te va…?
– Si te referis a aquel concepto que dice que el artista crea sólo en épocas de conflicto, mmmmmmmm… puede ser. Por supuesto, sería más fácil contar con un sueldo fijo, presupuesto, empleados y un gran despacho de Sra. Directora… (risas) Sin embargo, si tuviera que esperar la ronda burocrática de los permisos y jerarquias, y partidas presupuestarias, tal vez no habría llegado hasta aquí. Esta situación de inseguridad, más que de incomodidad, -diría yo – me lleva a sacar el trasero de la poltrona y a la hora de pelear peleo y trabajo mucho y siempre, porque no hay otra, y a la hora de disfrutar, disfruto… y nunca es suficiente… siempre está el «hubiera podido hacerlo mejor» o «¿por qué no se me ocurrió antes?» …Y «si yo hubiera»… «y de dónde saco este mes para pagar la cuenta de la luz?»… hora de inventar, de crear, de conseguir recursos económicos y humanos, tal vez el secreto es no conformarse nunca… no sé… no hay fórmulas para la pasión.
Teatro Infinito, ¿es un evento conceptual?
– Totalmente. A eso me refiero justamente cuando hablo de la necesidad de trascendencia… el Teatro es Infinito… existió, existe y perdurará mientras haya una comunidad humana pisando la tierra. Pero voy más allá: creo en la necesidad de la secuencia…. aunque siempre sea un permanente «volver a empezar» … aun así es Infinito.
La Parodi es protagonista de sus propios sueños… Hace 9 años comenzaban a hacerse realidad. Hoy, es un niño que va a la escuela de artes… Prepárese a vivir Teatro Infinito. Ella ya está lista. Feliz aniversario!
– Fotos: Isidoro Zang
