Desde el ministerio de Salud se recomienda reforzar las medidas preventivas para evitar proliferación de infecciones respiratorias. La gripe o influenza es una enfermedad causada por un virus. Desde el mes de abril se vacuna en los hospitales.
Para evitar la proliferación de la enfermedad se instó a la comunidad al comportamiento responsable aplicando medidas que eviten contagiar la gripe. El coordinador de Gestión Epidemiológica, Alberto Gentile recordó que desde el pasado mes de abril la provincia puso a disposición de la comunidad en hospitales y los centros de salud la vacuna antigripal.
Las bajas temperaturas y los cambios bruscos de clima son las principales causas del incremento de personas afectadas por las denominadas IRAs (Infecciones Respiratorias Agudas).
El coordinador de Gestión Epidemiológica, Alberto Gentile, recordó que ante esta situación y como en todas las patologías, la mejor manera de evitar la proliferación de la enfermedad y el contagio es con las medidas de prevención.
“La gripe o influenza, es una enfermedad de las vías respiratorias, causada por virus. Se transmite a través de las gotitas de saliva, secreciones de la nariz que el enfermo envía al aire, con el estornudo, pudiendo éstas ser aspiradas por alguien sano”, explicó Gentile quién indicó que “la gripe tarda entre 24 y 72 horas para manifestarse, es el tiempo de incubación y va desde el momento en que comienzan a aparecer los primeros síntomas hasta que se declara la enfermedad. Una vez sucedido este período la enfermedad se prolonga de dos a siete días”.
Gentile recordó que desde el pasado mes de abril la provincia puso a disposición de la comunidad en hospitales y los centros de salud la vacuna antigripal, para ser aplicada a las personas incluidas en los denominados grupos de riesgo que «deben vacunarse ante la llegada del invierno». Los grupos considerados de mayor riesgo son los mayores de 65 años, los pacientes con asma, insuficiencia cardiaca, diabetes y los niños de 6 a 23 meses.
Recomendaciones especiales para los niños
“Las Infecciones Respiratorias Agudas (bronquiolitis, bronquitis y neumonías) constituyen la causa de la mayoría de las consultas pediátricas y también de las internaciones durante el período invernal”, expresó el doctor Alberto Aleman, integrante del Programa Materno Infantil.
“La agitación al respirar, la tos y una especie de silbido al soltar el aire son los síntomas distintivos de estas enfermedades, que surgen a partir de una serie de virus y se transmiten de un niño a otro por simple contacto, basta con estar cerca en un lugar poco ventilado para que se efectúe el contagio”.
Los síntomas que deben motivar la consulta al centro de salud o al hospital más cercano son: tos, respiración rápida (agitación); silbido en el pecho; hundimiento debajo de las costillas al respirar; irritabilidad; rechazo al alimento o disminución de la ingesta; dificultad para el sueño o descanso; fiebre.
Destacó que si el niño presenta estos síntomas puede tener una neumonía u otra enfermedad grave, por lo que recomendó llevarlo urgente al servicio de salud más cercano.
