Los zafreros Hugo Castillo y Angel Vargas murieron en la ruta 50 cuando se trasladaban a su trabajo. Iban en un precario carro tirado por un tractor. La tragedia ocurrió mientras los responsables del ingenio San Martín del Tabacal se niegan a negociar condiciones laborales con el sindicato.
“El cultivo más exigente era la caña de azúcar, el oro dulce de la colonia; cortar la caña, triturarla y reducirla a jarabe, no era labor de gente, sino de bestia, como sostenían los plantadores”, narró Isabel Allende en su novela “La isla bajo el mar”. Es la historia de la dulzura nacida de la amargura.
En el caso de Salta, desde 1918, cuando Robustiano Patrón Costas fundó en el departamento Orán el ingenio San Martín del Tabacal, las condiciones de los trabajadores del azúcar fueron, lentamente, mejorando. Incluso, en un hecho que durante los años conservadores solo podía ser concebido por delirantes, ahora hay negociaciones entre la patronal y los obreros.
Pero en estos días, dos hechos conmueven los números de la megaempresa y los ánimos de los más de dos mil trabajadores: dos obreros murieron y otros seis quedaron heridos luego de que un camión llevara por delante el carro en el que eran trasladados a sus tareas. Esto sucedió precisamente durante la semana que el sindicato azucarero declaró un paro en demanda de mejoras salariales y condiciones laborales.
Tirados en la ruta
Según informó la Policía de Salta, el accidente ocurrió el lunes pasado alrededor de las 7, en la ruta nacional 50, cuando “un tractor con acoplado en el que viajaban 8 peones rurales…, fue colisionado desde atrás por el chofer de un camión marca Mercedes Benz”. El parte policial continúa: “producto del violento impacto, los ocupantes del acoplado salieron despedidos, quedando dispersos sobre la cinta asfáltica, falleciendo en el acto, Castillo y Vargas. Los restantes protagonistas continúan internados afectados con lesiones varias en el Hospital local (Orán)”.
De acuerdo a la información oficial de la empresa, se decretaron tres días de luto, sin actividades laborales, y se suspendió la inauguración de la planta de generación de bioenergía, la cual estaba prevista a ser trasmitida en videoconferencia en ocasión de la visita de la presidenta Cristina Fernández a la localidad de General Güemes. Hasta el momento de redacción de este artículo, pese a los intentos de comunicación con los directivos de San Martín del Tabacal, nadie atendió las consultas.
“Juegan con el dolor”
Distinta fue la actitud de los trabajadores, quienes además de expresar el dolor por las muertes y graves heridas de sus compañeros responsabilizaron a la empresa por la “inseguridad para trabajar”.
Claudio Colque, integrante de la comisión directiva del sindicato azucarero, manifestó a Punto Uno: “no podemos más que repudiar el accionar de la empresa Ingenio y Refinería San Martín del Tabacal , con respecto al trágico accidente, donde fallecieron los dos compañeros, el cuál inclusive podría haber sido peor ya que en el precario carro que proveyó Tabacal para el traslado de los trabajadores no contaba con las mas mínimas condiciones de señalización e hizo oídos sordos a los reiterados reclamos por parte de esta representación gremial”.
“Tabacal Agroindustria no invierte en las mejoras de las condiciones de trabajo, porque no le importa la higiene y seguridad de sus trabajadores, en este caso, mejorar los medios de transporte, donde ya tenemos antecedentes de pérdidas fatales. La vida no tiene precio. Este accidente pudo haberse evitado”, expresó.
“¿Sabe que es lo peor?”, requirió Colque, “ellos juegan con el dolor. El jefe de personal (Juan José Aráoz) nos dijo que si nosotros no levantábamos el paro, ellos levantaban el duelo. Nosotros suspendimos la medida de fuerza, porque esta lucha es precisamente para que tengamos condiciones dignas de trabajo”.
La culpa fue de ellos…
Juan Carlos Amura, director de Relaciones Institucionales de la empresa El Tabacal, deslizó en radio Güemes, de la ciudad de Orán que la responsabilidad del accidente -que causó la muerte de dos trabajadores y lesiones en otros seis- fue de los obreros.
“Los tractoristas tienen expresa orden de circular por la banquina y hasta donde tenemos entendidos, al dirigirse a una tarea de urgencia, el camión fue el que impactó contra el equipo que llevaba a los trabajadores”, manifestó Amura en la emisora.
Claudio Colque, del sindicato, repudió estas expresiones y sostuvo: “hasta en esto se quieren desentender…, los compañeros iban a trabajar, tuvieron un accidente, y todos saben que no se puede andar en la banquina…”
Hacia el trabajo
Según el abogado laboralista Marcos Piorno, “cuando un trabajador se dirige hacia sus labores, o cuando regresa de estas, y le sucede un accidente, el empleador debe hacerse cargo”.
De acuerdo al especialista laboral, “el concepto es `in itinere´, vocablo latín que significa que el trabajador estaba en camino hacia o desde su trabajo.
En derecho laboral, se denomina “accidente in itinere” al que le ocurre al trabajador durante el desplazamiento desde su domicilio hasta su lugar de trabajo, y viceversa. Este accidente se asimila, en cuanto a sus consecuencias legales, a uno acaecido en el lugar de trabajo, por cuanto obedece a la necesidad del trabajador de trasladarse con motivo de su empleo.
– El autor es periodista.
Director de Norte Social
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