Dos enviados especiales de RFI a Malí, Ghislaine Dupont y Claude Verlon, fueron asesinados en Kidal (norte), confirmó este 2 de noviembre la cancillería francesa. ‘Los bárbaros no nos cerrarán el pico’, dijo Marie-Christine Saragosse, Directora General de France Média Monde (grupo de información al que pertenece RFI).
La pareja de enviados especiales de Radio Francia Internacional (RFI) a Malí, la periodista Ghislaine Dupont y el técnico de reportaje Claude Verlon, fueron asesinados este sábado después de haber sido secuestrados por hombres armados en la localidad de Kidal. El presidente François Hollande expresó su “indignación ante este acto odioso”.
Ghislaine Dupont, de 57 años, era una periodista apasionada por su oficio y por el continente africano, el cual cubría desde que entró a RFI en 1986. Claude Verlon, de 55 años, técnico de reportaje en RFI desde 1982, era un veterano hombre de terreno, acostumbrado a misiones difíciles en el mundo entero.
La noticia de su muerte causó consternación en RFI. Marie-Christine Saragosse, la Directora General de France Média Monde (que agrupa a RFI, France 24 y Monte Carlo Doualiya), explicó que Dupont y Verlon estaban investigando en esa localidad de cara a las próximas elecciones legislativas. Los dos eran “muy experimentados” y “estaban dándole la palabra a todos los malienses”, subrayó Saragosse. “En el grupo RFI, France 24 y Monte Carlo Doualiya no bajaremos los brazos. La ira nos dará más ganas de luchar para no permitir que los bárbaros nos cierren el pico”.
Según los primeros testimonios indirectos recogidos en Kidal y Bamako, Dupont y Verlon fueron asesinados tras haber sido secuestrados por cuatro hombres armados que se desplazaban en una camioneta pick-up Toyota. El ataque ocurrió unos 15 kilómetros al este de Kidal, en la carretera que lleva a Tin-Essako.
Los periodistas se hallaban en esa ciudad entrevistando a un responsable del Movimiento Nacional de Liberación de Azawad (MNLA). Era la segunda misión de los periodistas de RFI en esa ciudad, un feudo Tuareg y de los rebeldes de este movimiento y controlado en parte por sus combatientes.
El norte de Malí, ocupado en 2012 por islamistas armados vinculados a Al Qaida después de una nueva rebelión lanzada por el MNLA y un golpe de Estado en Bamako, sigue siendo muy inestable pese a la intervención militar lanzada por Francia en enero para combatir a los yihadistas en la región.
– Radio Miami
