La primera reunión paritaria bonaerense no tuvo resultados y pasó a cuarto intermedio para el 18. Pese a tener de dónde sacar los fondos, Scioli sigue negando un plus salarial a fin de año como sí se da en 10 provincias y varios municipios bonaerenses. También se niega a recomponer el salario de este año ante una inflación que supera el 40% y un ‘aumento’ en cuotas pactado en marzo que llegó al 25,6% real, anualizado. Lejos del 30-35% del que hablan…
Pese a los trascendidos de un “fuerte aumento en enero y febrero…”, no hubo oferta. Apenas si hablaron de una suba a cuenta del 7% en enero, pero condicionada a un «acuerdo de paz social», es decir, ni paros ni reclamos. Además de dejar abierta la suba final para definirla en febrero/marzo según lo que pacten CTERA y los gremios docentes de la CGT Caló con Cristina. Y dejaron entrever que, si no hubiera acuerdo, sacarían por decreto ese primer tramo del 7%.
Más que una paritaria es una puesta en escena, pensada para la campaña presidencial. Lo que trascendió preocupa. Pero en vez de informar en asambleas y plenarios para resolver sobre estas negociaciones, lo que se debe pedir y las medidas para lograrlo, la Celeste y el FGDB, siguen especulando. Saludan el inicio de la paritaria 2015 y se niegan a retomar la lucha por el salario de este año como pide la base y exigimos las Seccionales disidentes de SUTEBA.
Baradel lo dijo claro: «hay que esperar a la semana próxima y que el gobierno no desperdicie esta oportunidad». Y aseguró a la agencia Télam que «no hay una inflación del 40% aunque tampoco del 24%», sino que sería del 30%. No lo dijo, pero ¿será ese la suba que pedirán…?
¡Podemos lograr nuestros reclamos! Si con sólo ‘amagar’ con el paro nacional, Cristina debió eximir al aguinaldo del impuesto a las ganancias; en vez de levantarlo, deberían convocar a esa lucha nacional. Así podríamos arrancar nuestras demandas. Pero la complicidad de la CGT Caló, la de Moyano y la CTA de Yasky es un freno.
La Jornada Nacional con movilización a Plaza de Mayo con la CTA Autónoma y el paro de la CTA Bonaerense del jueves 18, son una instancia contra el ajuste. Para reclamar el bono de fin de año, una recomposición salarial ya, un básico en el 2015 de 8 a 9 mil pesos que supere la inflación real, sin cláusulas de paz social ni aumentos en cuotas.
Las Seccionales disidentes debemos ser parte el 18, en unidad con estatales y la CTA, en vez de insistir con medidas aisladas como la pasada ‘marcha’, luego del feriado largo, de apenas 200 activistas. Movidas así, sin preparación ni consulta a la base y en soledad, no fortalecen.
Es preciso hacer asambleas de escuela para votar la medida del 18 y su continuidad. Exigir asambleas en cada seccional, en especial donde está la Celeste para que SUTEBA y CTERA también convoquen. Y definir el mandato al Plenario de Delegados de los SUTEBA disidentes el 17 (en Escobar, 10hs) que incluya el “no inicio” y un plan de acción.
Hay plata. Si en vez de pagar la fraudulenta deuda externa, subsidiar a la enseñanza privada y poner impuestos al salario, se destinan esos recursos a la escuela pública y al salario docente. Y se ponen impuestos progresivos a los que más tienen. Para terminar con los privilegios de la vieja política y de la burocracia aliada a los gobiernos del ajuste, debemos poner en pie una Nueva Izquierda como planteamos desde el MST con la fórmula Bodart-Ripoll 2015. ¡Sumáte!
– Alternativa docente