Aborígenes Quilmes descendientes del pueblo diaguita-calchaquí, reclaman por su derechos sobre las tierras que habitaron hace centurias, incluída la ciudad sagrada llamada “Ruinas de Quilmes”, que es hoy un centro turístico explotado por empresarios.
Los aborígenes tal como lo indica su nombre,son los hombres nacidos en estas tierras y habitan desde antes que llegaran los españoles a «conquistarlas».
Sus culturas son una valiosa reserva de sabiduría para toda la humanidad. Ellos contemplan los fenómenos naturales, veneran a la pacha o madre tierra y a los astros como dioses que en conjunto forman su cosmovision universal, sabiduría que se viene transmitiendo oralmente de generación en generación.
Los gobiernos han venido desplazando a estas etnias con el pretexto de fomentar proyectos llamados “turismos étnicos”, y que es una de las formas de erradicar sus culturas.
Si lo que se pretende es conocerlos, de esta manera es imposible; debido a que sus códigos sólo se transmiten de boca de sus propios protagonistas. Uno los conoce cuando se comparte por lo menos un tiempo de sus vidas dentro de sus comunidades, comiendo con ellos, saliendo a traer el sustento de cada día para vivir; y sobre todo tratando de comunicarnos con ellos de igual a igual que es el respeto que le debemos a los pueblos originarios.
«Alguno creyó que el árbol aborigen estaba muerto… lo hacharon, pero este tronco tiene raíces fuertes, y aquí estamos nosotros, que somos sus brotes». Ernesto Quillo, aborigen argentino.
A escasos kilómetros del pueblo vallisto tucumano Amaicha del Valle, se encuentran » Las Ruinas de Quilmes», considerado el mayor asentamiento humano antes de la llegada de los conquistadores a la Argentina, que durante más de 100 años resistió la ocupación española.
La historia de los quilmes es trágica. Por su heroica resistencia pagaron un precio muy alto: fueron deportados en masa hacia Buenos Aires, a una zona ubicada al sur de la actual capital del país, que tomó justamente su nombre del pueblo diaguita calchaquí
La comunidad quilme sufrió una represalia drástica y cruel que siglos después pondría en práctica José Stalin: la deportación y desarraigo para los pueblos que resisten el sojuzgamiento totalitario.
Sabiduría ancestral
Las culturas de los primigenios habitantes de la Argentina están bien presentes en sus artes y pueden enseñarnos demasiado sobre la esencia propia de la vida. Por ejemplo, la conexión que tienen con el universo, que es su principal tesoro, legado que es un mensaje claro para la humanidad entera en tanto enseña a respetar el medio ambiente, a no destruirlo ni abusar con fines egoístas de aquello que es de todos y sirve para la continuidad del milagro de la vida. Ellos aceptan con humilde gratificación lo que la naturaleza les da y crean el equilibrio exacto que necesita este planeta.
Por ello es que el pedido de los aborígenes de la etnia Quilmes a los gobiernos de Tucumán y de la Nación para que se le reconozcan sus derechos sobre las tierras que habitan hace centurias es justo y es de interés no sólo de ellos sino de la comunidad argentina y la del Noa en particular.
Integrantes de esta etnia surgida de los Diaguitas-Calchaquíes que sobrevive en condiciones difíciles en una reserva ubicada en el límite entre Salta y Tucumán denunciaron a Salta 21 que son víctimas de amenazas, que pretenden sojuzgarlos y desplazarlos para beneficio de poderosos latifundios.
Se supone que las ruinas son restos civilizaciones pasadas. Pero los Quilmes están vivos y luchan por lo que creen que es suyo.
Un aborigen desterrado
Sergio Condorí es un joven quilme que ahora vive en las tierras donde nacieron sus ancestros. Sergio nos cuenta que tuvo que irse de esas tierras cuando era pequeño, para -entre otras cosas-educarse formalmente en las escuelas de Tucumán, ahora tras su regreso al seno de su comunidad cuenta a Salta 21 que los gobiernos de turno los reubican todo el tiempo, debido a presiones de políticas que ellos no entienden muy bien. Les expropian terrenos de a poco con el pretexto de reservarlas, pero por otro lado empresarios explotan esas tierras con emprendimientos turísticos privados
Condorí denuncia que las famosas Ruinas de Quilmes son un ejemplo de esa política que favorece latifundios y agrede a las comunidades ancestrales. Además nos cuenta que un terrateniente que se dice actual dueño de parte de las tierras reclamadas una vez quemó a un aborigen hace unos años por oponerse a dejar una parte de su supuesto territorio.
«Los que en aquella tierra viven dicen que en la tierra adentro hay unas sierras de donde sacan infinitísimo oro»- Sebastian Cabotto-1544
Existen leyes que amparan al aborigen, por ejemplo la ley 23.302 de Política Indígena y Apoyo a las Comunidades Aborígenes , que habla entre otras cosas de la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos y también de la participación (que no es lo mismo que integración o incorporación) en el proceso «socioeconómico y cultural de la Nación, respetando sus propios valores y modalidades». (*)
Los pueblos originarios del Norte Argentino están siendo conducidos al exterminio. Ello porque los aborígenes que habitaban el Gran Chaco son cazadores y recolectores. Y nuestra civilización destruye el ecosistema al que ellos estaban armónicamente integrados. Sus tierras son alambradas y sus ríos contaminados. Se arrasan selvas, montes y bosques para sembrar soja y las comunidades ancestrales son arrojadas a la indigencia, la marginación y la aculturación.
Hasta ahora sólo se los ha venido castigando por tener ideas y costumbres diferentes, como en los tiempos de los conquistadores que en el afán de apropiarse de sus tierras y principalmente sus metales preciosos los engañaron imponiéndoles religiones y creencias que distan demasiado de sus culturas y no respetan la subjetividad de sus comunidades, base fundamental de los pueblos originarios para ser libres e independientes.
*Foto de una aborigen chaqueña en un estado extremo de desnutrición.
Fuente consultada: Instituto Nacional contra la Discriminación,la Xenofobia y el Racismo (INADI)
El regreso de los quilmes
me impacto esta noticia ya que en la preparatoria lo estamos estudiando y la verdad que me quede intrigada por lo sucedido
yo soy descendiente de franceses y romanos; mi novio descendiente de los quilmes y mi familia esta en contra de todo lo que tenga que ver con la injusticia
en mi opinión, esto debería parar ya que en el la imagen de una pobre anciana flaca por falta de nutrición por los consumos mal usados
me parece barbaro que hagan EL REGRESO DE QUILMES ya que luchan por sus derechos y su vida
no quiero ser malinterpretada pero esto es una barbaridad de hacer tanto escandalo por tan solo que paso algo en el pasado
El regreso de los quilmes
no puede ser que sean tan cabeza dura. la gente se esta muriendo, luchando a la misma vez para poder sobrevivir
por ejemplo en la imagen de la mujer pobre flaca por falta de nutrición por los injustos consumos que hacen todos
yo dejo mi opinión porque cada uno tiene derecho a opinar
El regreso de los quilmes
Soy descendiente de aborigenes, de lo cual me siento orgulloso, recuerdo cuando mis mayores me contaban que sus abuelos le trasmitieron que pertenecian a un pueblo ue fue llevado muy lejos y nunca mas supieron. Y un hombre perteneciente a ese pueblo. pudoescapar y dirigiendose alsur de lo que es Catamarca, fundó una familia. Despues de muchos años, de esa familia, una de sus hijas se casó con emigrantes de Europa y dió lugar al mestisaje. pero con mi apellido italiano, no me olvido de mi hermoso origen. No se si ese pueblo qe mis mayores me contaron, era el pueblo Quilmes, yo quisiera que así lo sea, pero me siento alagado de saber que mis antepasados fueron nativos de estas tierras y que lucharon hasta sus ultimos días para defenderla. Hoy con mi título de abogado creo que continuaré con esa lucha para que sea reivindicado, este pueblo, al cual le debo que lo mejor de mi como humano, me corresponde por su herencia. S.F.T.
El regreso de los quilmes
respondiendo a la carta escrita por esta persona, no cabe duda que su acendencia es quilmes, puesto que respondo por mis hijos y esposo que decienden de ellos tambien. yo soy española, decendiente de inmigrantes europeos, y mi esposo nacido en bs. as., al casarnos decidimos como luna de miel viajar a tucuman, al pueblo natal de mi suegro. por mi parte, al conocer los origenes de mi esposo quize recibir, como es tradicion en su raza, la bendicion de su abuela, como nuevo miembro de la familia. ella era, decendiente directa de un grupo de indios quilmes que lograron escapar escondiedose en cuevas o huyendo por un tunel que atravesaba la montaña hasta el otro lado, ese tunel todavia no lo han descubierto. asi lograron no ser capturados. despues de muchos años fueron regresando a la region donde vivian y se fueron instalando donde podian. la abuela de mi esposo nacio en un caserio, muy arriba en la montaña, llamado pichao en cuyo lugar se conservan vestigios y ruinas de las chozas que construyeron algunos de esos indios cuando volvieron a reinstalarse en el lugar. ya mas grande se mudo a vivir mas abajo en un poblado pequeño que se llama colalao del valle, y tan solo es de unas cien casas mas o menos, y queda a unos 15 km. de distancia de las ruinas de los quilmes, que, para mi mayor emocion, tuve la suerte de conocer, escalar, y sentir la magia que todavia conserva.
El regreso de los quilmes – El Tiempo llegó…
Los Pueblos Indígenas han quedado a la zaga del resto de la población y esto ocurre en todo Latino América. Representan aproximadamente el 10% de la población LatinoAméricana y para los representantes o autoridades de cada frontera, solo forman parte de su discurso de campaña, lo que no significa que auspicien el abanico de su desarrollo humano.
Tal cual en la epoca de los «colonizadores», hoy por hoy, se sigue sometiendo los Pueblos originarios a barbaridades «colonizadoras», ya bajo el nombre de capitalismo. Sin embargo, el Pueblo Quilmes es uno de los Pueblos que más resistencia puso a la usurpación española y hoy con nuevos nombres y fronteras, la lucha continúa.
Imagínense ustedes, están en su casa, en sus campos, suyos…desde siempre, por que la Pacha se los proveyó; y un mal día, aparece por el valle una manada de «caballeros» para arrebatarle todo lo que es suyo, desnaturalizarlos de lo propio, sus tierras, su clima, su habitat, su cultura, su espiritualidad, sus ceremonias sagradas con la finalidad de imponer «otra» que unos cuantos dijeron que era mejor.
A quien le parece justo? Terratenientes. Ustedes venían y hasta donde sus ojos les permitía ver, sus ojos humanos, sus ojos físicos; se tomaban la atribución de «robar» esas tierras y someter a su gente, explotarlos; como hasta el día de hoy, en menor medida y disfrazado, sigue sucediendo.
Esto no puede seguir pasando, no en la Era del Pachakuti. El Tiempo llegó.