Asombro y emoción, dos expresiones que se repitieron entre los asistentes a la presentación de la marca CUM en el Centro Cultural América el viernes 14 de junio. Y es que los artesanos de 16 comunidades de los Valles Calchaquíes vieron allí plasmar sus sueños más sentidos: primero, generar su propia marca de productos, la marca CUM, y después, presentarlos ante la sociedad salteña, en un desfile y exposición de sus trabajos únicos en su género. El numeroso público presente acompañó con palabras de elogio esta presentación, donde todos tuvieron oportunidad de comprobar la alta calidad del trabajo.
A sala llena se realizó la presentación de la marca CUM, desarrollada a través de la exposición de su colección de indumentaria, artículos y accesorios para el hogar. La muestra estuvo acompañada de una galería fotográfica realizada por Alejandro Chaskielberg, ganador del Lion d’Or 2011 en Francia.
La colección presentada el pasado viernes incluye toda una línea de sastrería experimental, en la que se pone en valor los tejidos planos artesanales característicos del Valle. Un espacio especial se destinó en la muestra de la línea de productos para el hogar: cubrecamas, almohadones, alfombras que se realizan en base a diseños exclusivos totalmente hechos a mano.
Pero el broche de oro de esta jornada fue el desfile del trabajo textil de la marca. En una asombrosa presentación, una a una fueron desfilando las prendas de la marca CUM, realizadas a partir de fibras naturales, con diseños que fusionan técnicas de producción artesanal con líneas modernas.
Para los generadores de todo este trabajo, es un orgullo ver que pudo concretarse el fruto de tanto esfuerzo compartido. Para Paula Olaizola, jefa de la Agencia de Extensión Rural Seclantás,del INTA, en este evento “se logró transmitir que tenemos calidad, solidaridad y soberanía sobre los productos que la gente hace”. Sin ocultar su emoción, enfatiza el espíritu compartido por todos, y asegura: “es una sensación indescriptible poder ver a los miembros de esta organización emocionados de mostrar sus productos en la ciudad de Salta, que parece un lugar inaccesible para los artesanos, hoy lo estamos viendo accesible entre todas las instituciones que compartimos este sueño”.
Los campesinos con sello propio
La marca CUM fue generada a partir de un trabajo compartido por parte de productores y artesanos de Molinos, el INTA en Seclantás y los municipios intervinientes. Allí, familias enclavadas entre los cerros de los Valles Calchaquíes vienen trabajando en la producción de finas prendas a base de lana de oveja y llama y artículos para el hogar, entre otros. Organizados hace un tiempo bajo el nombre de Comunidades Unidas de Molinos (CUM), desde un principio visualizaron la idea de canalizar la producción en un solo sentido, para generar circuitos de comercialización que generen fuentes de ingresos sustentables. Con esta idea como base, comenzaron a trabajar para materializarla.
Santos Velasquez, productor de Tomuco y uno de los referentes de la CUM enfatiza la idea del crecimiento a partir del esfuerzo compartido. “Venimos perfeccionando nuestro trabajo hace un tiempo” comenta, “a través de distintas capacitaciones y mostrando nuestros productos en ferias regionales. Esto nos permitió observar qué es lo que gusta y lo que no, para poder crecer con nuestros diseños”.
En este sentido, el aporte del INTA en todo el proceso no es menor. El director del INTA Centro Regional Salta-Jujuy, Ing. Mario De Simone explica que el trabajo del instituto “pasa por dos ejes: uno, a partir de la organización de las comunidades bajo un mismo ideal, concretando el sueño de la marca propia, y el otro con el trabajo técnico de contribuir con tecnología de diseño no simple de llevar adelante, pues implica respetar la identidad cultural de la zona”.
Para el ing. De Simone “este trabajo excepcional está marcando un rumbo ,porque implica darle valor agregado al trabajo que los artesanos realizan, respetando su identidad cultural permitiendo acceder a mercados local y de otras partes del país y el exterior”, un ejemplo digno de imitar en otras zonas.
Tantos años de esfuerzo dieron sus frutos. La marca CUM es hoy una realidad que planea seguir adelante dando grandes pasos. Para ello, los organizadores lanzaron además la página web que planea organizar la demanda y los circuitos de comercialización. Además, continuar las actividades de perfeccionamiento y creación de nuevos productos.
– Comunicaciones INTA
