El gobierno de Salta no quiere controles ni protocolos por Ley.
“Somos culpables de nuestros errores y faltas, pero nuestro mayor delito es abandonar a los NIÑOS…No podemos contestar mañana, su nombre es hoy». (Gabriela Mistral)
Cuando se lee el Protocolo para la Atención Integral de Personas Víctimas de Violaciones Sexuales en los portales digitales de Presidencia de la Nación y otros Ministerios, el más perceptivo observador termina dándose cuenta que en el Gobierno Provincial, instalaron una mala copia (Como tantas otras) del sistema, prescindiendo de las particularidades, cultura e idiosincrasia de los salteños y nativos de esta región.
Una ley de prevención de esta naturaleza, aprobada por ambas cámaras legislativas y que merezca El VETO TOTAL del gobernador, nada más que por el Informe y Dictamen de un ignoto Secretario Legal de SAMSÓN (Sin Dalila visible), con elementales consideraciones fácticas y de escaso peso jurídico que no resisten el menor análisis, es subestimar la inteligencia y criterio de todos los legisladores provinciales como del resto de los salteños en general.
Pese a la legislación vigente (Ley 26364 –Ley 26061 que sustituye a la antigua ley de Patronato de Menores de 1919 o Ley AGOTE, como primera ley de la Minoridad en América Latina) en la materia, en la Argentina y Salta en particular, no existen estadísticas confiables sobre estos siniestros y aberrantes hechos que se suceden cotidianamente. Esta problemática compleja, enquistada en América Latina y el resto del mundo como los delitos sexuales en contra de niños, adolescentes y mujeres, debe y puede tener una visión más abarcativa y de conjunto, por parte del Estado Provincial a través de su transitorio gobernante Juan Urtubey, partiendo de la premisa que el concepto familia es sinónimo de PROTECCIÓN, AFECTO Y CUIDADO.
No hacerlo, es contravenir por OMISIÓN lo dispuesto en Convenios y Tratados Internacionales a los cuales se halla adherida la Argentina. (Ej.: Convención Internacional de los Derechos del Niño).
No habrá jamás prevención eficiente y eficaz por parte de un estado, que pretenda aplicar un glosario de normativas dispersas e inarmónicas entre sí, extraídas de otro contexto social, sin contar con un protocolo preciso y fijado por una ley específica. Esta ley fue vetada en su totalidad, con lo que la Provincia vuelve a sumergirse en la época de las cavernas, el horror y la barbarie, donde un Grupo de diez familias manejan a su antojo y arbitrio, el poder político y económico, signando en el oscurantismo más abyecto el destino de más un millón doscientos mil salteños.
QUE LA HISTORIA Y LA JUSTICIA HUMANA JUZGUE SUS CONDUCTAS.
– El autor es Periodista (De la Asoc.de Periodistas de Salta) – Analista Político