Miguel Ángel Calvete, Presidente de Instituto de Estudios de Consumo Masivo (INDECOM) y Director Ejecutivo de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas (FESACH), evaluó favorablemente la medida del Gobierno Nacional pero manifestó que “con eso sólo no alcanza para combatir la inflación porque todavía faltan políticas integrales que se complementen entre todos los sectores para equilibrar realmente los precios y sostenerlos en el tiempo”. Proyectan presentar al Estado iniciativas que proponen la incorporación de góndolas especiales para productos de las pymes, la auditoría online de la facturación para todos los puntos de ventas y el lanzamiento de aplicaciones celulares para que los consumidores denuncien a los comerciantes que se abusen en las subas de precios. De este modo, buscan diferenciarse de los grandes supermercados para visibilizar a los verdaderos distorsionadores de precios.
Según se anunció oficialmente, el nuevo sistema de información de precios consistirá en que las grandes cadenas de supermercados de todo el país deberán informar obligatoriamente los precios de todos sus productos a una página web de actualización inmediata, que cada consumidor podrá consultar desde una computadora o teléfono móvil para utilizar como guía. También se relanzará la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), que utilizará los datos obtenidos para combatir las “prácticas monopólicas” de cada industria.
Si bien el representante del supermercadismo chino celebró la medida porque explicó que “facilitarle la comparación de precios a los consumidores servirá para evitar la especulación y para aumentar la competitividad”, también afirmó que “esa herramienta por sí sola no garantiza nada, porque actualmente los supermercados ya suelen publicar en los diarios los precios de distintos productos, que luego no están en las góndolas o tienen un costo superior”. Planteó también que “la nueva web de control debe hacer hincapié en el monitoreo de precios sobre el portfolio de los 250 productos más vendidos de la canasta básica”.
El titular de INDECOM también adelantó que “las multas deben ser concretas y no caer, como hasta ahora, en un laberinto administrativo que impide su efectivización”, a la vez que reclamó que “la Justicia debe actuar más rápido para evitar lo que ocurrió durante la gestión de Guillermo Moreno al frente de la Secretaría de Comercio Interior, cuando se multó a los supermercados que no cumplieron con los acuerdos de precios, y luego sólo se pudieron cobrar el 11 % de esos castigos económicos”.
Por ello, Calvete consideró que “es necesario generar un nuevo escenario con políticas de consumo complementarias que cuenten con herramientas de autogestión que eviten la regulación permanente del estado y que permitan la convivencia de los pequeños productores en general, de los hipermercados y autoservicios de proximidad, de representantes de las economías regionales, de las cámaras de comerciantes y, fundamentalmente, de las asociaciones de consumidores en conjunto con las diferentes direcciones de defensa del consumidor de todos los municipios del país”.
En consonancia, explicó que “para lograrlo en el corto plazo, debería convocarse a todos y buscar un acuerdo marco entre ellos, lo que permitiría la incorporación de nuevos actores a la cadena de comercialización y arrojaría una mayor competencia, siendo ésta última la principal herramienta contra la inflación”.
En ese escenario de mayor competitividad, el referente del organismo de mediciones de consumo adelantó que en los próximos días presentarán ante la Secretaria de Comercio Interior un proyecto denominado “Góndolas Argentinas”, que fue cajoneado en varias oportunidades por la anterior gestión y que, de aprobarse, obligaría a todos los supermercados e hipermercados, así como a los autoservicios de proximidad, a incluir en sus salones de venta exhibidoras con productos elaborados por pequeñas industrias, ocupando la exposición de esos artículos al menos un 20 % del total del área de exhibición”. Anticipan que esa iniciativa generaría el reposicionamiento de nuevos fabricantes, reactivaría el empleo y la actividad industrial, además de contribuir notablemente a la baja de precios.
Por su parte, también adelantó que otro de los proyectos pondrá de manifiesto “la necesidad de incorporar herramientas tecnológicas que incluyan aplicaciones celulares que permitan que cualquier consumidor actúe como un inspector en los diferentes puntos de compra para que los empresarios se sientan más controlados”. Sobre este punto, dijo que sería muy importante que se concrete y se complemente con la nueva web, dado que actualmente “todos los sectores de la sociedad aparecen igualados por la tecnología y pueden contribuir para evitar abusos”.
Además, promueven la incorporación de un software con conexión online a los servidores de la AFIP y de la Secretaria de Comercio Interior para poder auditar en tiempo real a las terminales de facturación de toda la cadena de comercialización, incluyendo al mismo tiempo a las industrias, comercios mayoristas, grandes supermercados, autoservicios chinos y todos los puntos de proximidad, porque considera que “eso podría ponerse en práctica mucho más rápido y expondría notablemente a los verdaderos distorsionadores de precios”.
Finalmente, Calvete reiteró que “en las próximas horas, esperan ser recibidos por los funcionarios nacionales para elevar los proyectos que permitan reconfigurar íntegramente la cadena de comercialización y sus costos”.
– Parte de prensa