Los miembros de la comunidad de la UNSa. que participaron a través de diferentes instancias en la actividad política de la toma del Rectorado de la misma, al momento de suspender dicha medida, manifiestan:
Que la toma del Rectorado constituyó una reacción ante la indignación provocada en estudiantes, docentes y personal de apoyo universitario por la arbitraria e ilegal maniobra concretada por los decanos de las otras Facultades, al hacer votar en un solo y único despacho el reconocimiento de legítimo abono a las colegas a quienes se les había suspendido el pago del aumento de dedicación –ya aprobado en la sesión anterior- y la suspensión de los concursos en la Facultad de Humanidades; todo esto agravado por la negativa a tratar el pedido de reconsideración presentado por esta Facultad expresada en la ausencia de quórum para su tratamiento.
Que en ningún momento estuvieron animados por un afán destituyente, lo que se hace patente en el hecho de que ningún petitorio contempló el pedido de renuncias aún cuando en ciertos casos -Presidencia del Consejo de Investigación y Secretaría General- el pedido hubiera estado plenamente justificado.
Que ninguna de las acciones llevadas a cabo fueron violentas y en cambio, si se recibieron distintas formas de agresión.
Que las instalaciones y los bienes disponibles, que son de propiedad publica, han sido mantenidos en perfecto estado. En ningún caso se accedió a espacios que se encontraban bajo llave.
Que con el transcurrir de los días, las discusiones acerca de política universitaria y de la situación concreta de nuestra universidad dieron lugar a debates de los cuales surgió el pliego de reivindicaciones entregado al Vicerrector: comedor, becas, boleto estudiantil.
Que hasta el momento ha sido imposible entablar instancias de diálogo conducentes a la superación de la crisis institucional producida, la primera de las cuales fracasó porque –precisamente- el Secretario General que tenía la misión de acercar posiciones remató sus oficios amenazando públicamente a los integrantes de la toma con la judicialización de la protesta merced a las firmas obrantes en la designación del Mgr. Grabosky como interlocutor de la Asamblea de la Comunidad Universitaria.
Que en un segundo intento la Asamblea designó cinco facilitadores de la comunicación que vieron obstaculizada su misión por rodeos que consideramos meras maniobras dilatorias en espera de que la acción política se diluyera con el paso del tiempo.
Que recién después de un mes el Rectorado se ha dignado nombrar dos interlocutores autorizados para dialogar y lo hacen designándolos como “representantes de esta Casa de Altos Estudios” como si los miembros de la Asamblea perteneciéramos a otra institución.
Que las dos personas designadas han mantenido manifiestas posiciones hostiles respecto a la toma, hechas públicas a través de todos los medios de prensa posibles.
Que la toma del Rectorado ha constituido una instancia de lucha que permitió el logro de objetivos no visualizados inicialmente y que resultan ventajosos para dar continuidad a las acciones políticamente organizadas de quienes creen que la actual gestión universitaria debe transparentar el manejo presupuestario, cumplir con el informe estatutario a la Asamblea Universitaria, cumplir con las promesas electorales que llevaron a tantos estudiantes a favorecerlos con su voto, revalorizar el Consejo Superior como instancia máxima del gobierno universitario por encima de la reunión de decanos, normalizar el funcionamiento del Consejo Superior confeccionando, dando a conocer y sometiendo a aprobación las actas, etc.
Que a partir del lunes 11 de noviembre del año en curso se producirá el retiro de estudiantes, docentes y personal de apoyo del edificio de Rectorado, producido lo cual no habrá ya necesidad de mesa alguna de diálogo porque no existirá excusa para no convocar a la Reunión Extraordinaria del Consejo Superior pedida estatutariamente en tres oportunidades para tratar el recurso de reconsideración de la Res. CS Nro. 340/13 en las dos primeras ocasiones y el pliego de reivindicaciones de la Asamblea de la Comunidad Universitaria, la última vez.
Invitar a todos quienes comparten la línea política a sumarse a la convocatoria.
Un «nuevo» giro en las escaramuzas de «El Señor de los Anillos»…
Estimados lectores:
Es cierto y lo vuelvo a sostener una vez más, que algunos acontecimientos verdaderamente, compulsivos y autoritarios, como el de haber afectado en sus salarios a profesores de la Facultad de Humanidades de la UNSa., no nos podían dejar a un costado, si es que uno asume una postura que desea, porque se trata de un deseo…, una comuna diferente a la que existe y que unos, llaman «sociedad de consumo» (Jean Baudrillard) y otros, capitalismo, a lo Marx crudo, sin eufemismos y sin coartada.
También es genuino y lo digo otra vez, que la Decana, Mgr. Liliana Fortuny, que es una de las Autoridades de esa unidad administrativa que fue como profesional una de las más honestas en los últimos 25 años, evaluó la situación con sinceridad, pero sin atender a otros aspectos, algunos de los cuales, recordaré más abajo.
Por igual, es cierto que lo que comenzó como la protesta contra un acto de prepotencia de parte de los que apoyan al Rector, CPN Claros, merecía el trazado de un límite y que por la dinámica de las reivindicaciones, éstas se ampliaron a tal extremo que eso ya no es para dialogar con el Rector y el Consejo Superior, sino con el Ministro de Educación de la Nación, mediante la intervención de la CONADU H, en virtud de que el Petitorio excedió por lejos, lo que dio inicio al «conflicto».
No obstante, cuando en algún momento, allá por 2009, se solicitó que se efectuaran Auditorías por doquier para sanear las cuentas de TODA la academia, dadas las presuntas y groseras irregularidades contables, hasta el Gremio ADIUNSa., salió a desestimar eso con argumentos que no fueron tales.
En esa etapa, en al que se habló de que los Concursos son arreglados y se reparten de acuerdo no al más capaz, sino al que es agraciado por el endogrupo del que es integrante y que lo beneficia con Cargos por su obsecuencia y obediencia, tampoco se llevó lo que debiera haberse pesquisado Y QUE SIGUE SIN INVESTIGARSE.
Cuando se habló de acoso laboral, mobbing, hostigamiento, más de uno miró para otro lado, incluyendo el Gremio y ya la en época de «Lito» Kirchsbaum, al cual considero un amigo, a pesar de las diferencias que nos separan.
En los intantes en que se dijo que realmente, no había democracia real y que la institución era propensa a prácticas no sólo autoritarias, sino conservadoras, reaccionarias, intolerantes y hasta fascistas, también se hicieron los otarios.
La enumeración podría seguir.
El tema es que cuando eso se ventiló, estaba una Rectora, que perdió en 2009, por el escándalo del acoso laboral, que viene desde hace decenios Y SE CONTINÚA EJERCIENDO. Esa funcionaria, que se encontraba en el Rectorado, había cosechado simpatías, detentaba excelentes relaciones con ADIUNSa., al punto de que, por mediaciones complejas y por la injerencia enmadejada de la Rectora, ella logró que una huelga se levantara… Tenía «buenas migas» con el gobierno nacional de entonces. Y como la tal Rectora era «popular», nada de lo que se reseño, se efectuó.
No se concretó algo que se pidió en 2006 y que era que, como el mobbing había llegado a escalas insoportables, se anoticiara a las instancias gubernamentales provinciales, que es lo que quiso el «bloqueao» del Rectorado, por otros motivos.
En 2006, se esgrimió que eso violaba la Autonomía Universitaria. En Noviembre de 2013, parece que ya no se atenta contra la Autonomía Universitaria… Pero esto no acontece, sino porque la ex Rectora que estaba entonces, tenía consenso hasta con organizaciones de DDHHH, y el Rector, CPN Claros, no, a causa de que su liberalismo es de tal ultranza, que espanta hasta a Milton Friedman.
No es lo mismo, pero cosas parecidas y hasta peores les exigen al clarismo -al que no estoy apoyando de ninguna manera…-, asuntos que en su momento, no se demandaron de la funcionaria de 2009 a la que se aludió y eludió.
Por qué, a lo 6, 7, 8, esa doble vara?
A causa de que todo el conflicto se trató en el fondo, de un eje político, en el más repugnante sentido de la palabra y que involucró lo Real lacaniano, en tanto es lo que asquea, precisamente.
No hubo de un «lado», excepto docentes como la Mgr. Liliana Fortuny o la Licenciada Norma Naharro…, para ofrecer unos nombres emblemáticos, y del «otro», angelotes, sino piratas de diferentes barcos, que se destriparían entre sí, hasta llegar a un acuerdo y hasta la próxima escaramuza.
Los de un «lado» y del «otro», descontando las honrosas excepciones que detallé, anhelan cargos altos, hermosas jubilaciones, trabajar lo menos posible, no se interesan ni ahí en los alumnos, no les importa que la institución concrete Proyectos de Pesquisa de envergadura y, en cuanto a los estudiantes, en la medida en que ellos, los endogrupos…, pueden, los usan (y algunos o muchos, se dejan usar…), para ser mano de obra barata en tales Proyectos que no llevan a nada, para laburar ad honorem en las cátedras y para ser «carne de cañon» en las distintas contiendas electorales.
Independientemente, de lo que aconteción con Humanidades, en la UNSa., existen faltantes millonarios y es realmente, necesaria, a estas alturas, una Intervención Federal y una Auditoría de tales proporciones, que no sé si luego de eso, quedará títere con cabeza… (http://www.youtube.com/watch?v=9m90rCyul_8)