Este fue el buen cierre de las actividades del año del Departamento de Música de Cámara.
Salta, domingo 1º de diciembre de 2013. Teatro Provincial. Ensamble Vocal-Instrumental “El Jardín de Apolo”. Director Julio Menéndez. Obras de Georg Friedrich Händel (1685-1759) y Arcangelo Corelli (1653-1713). Cierre de temporada del Departamento de Música de Cámara de la Provincia. Aforo Platea 75%.
El estilo “barroco”, ubicado en la centro Europa del siglo XVII y mitad del siguiente, invadió toda manifestación artística cuya característica principal es la intensa expresividad de esas manifestaciones. Por supuesto la música no estuvo ajena a este movimiento y curiosamente deja de lado las monumentales expresiones sonoras del estilo anterior, para simplificarlas aún cuando el lenguaje mantiene complejidad expositiva. La polifonía el Renacimiento se va perdiendo de a poco y aparece el sujeto principal que es la melodía revestida por acompañamientos que adornaban aquella. Para no ser muy extenso, me gustaría decir que las máximas expresiones barrocas de su tiempo fueron el austero Johann Sebastian Bach y el exuberante Antonio Vivaldi. Dentro del primero está la música de Händel y dentro del segundo, la de Corelli.
De este último llegó su “Concerto Grosso” (el nº 8 de su op. 6) escrito para la Navidad que responde a la personalidad de su autor en su lado tranquilo pues también podía ser tremendamente hiriente. Su op. 6, es una de las cumbres de la música instrumental del barroco por su riqueza sonora y magistral variedad temática y de formas. Y del primero, un hombre vehemente, inquieto y de fuerte carácter, dos páginas de su prolífica producción: “Gloria in excelsis Deo” un motete para soprano solista, cuerdas y continuo y un “cuasi” oratorio “Dixit Dominus”. Este final de temporada es oportuno en tiempos del Adviento que anteceden, en la liturgia cristiana, al nacimiento de Jesús. La interpretación tiene algunos aspectos historicistas como la falta de vibrato, pero felizmente, en este caso, prescinde de otras características que siempre consideré fuera de tiempo.
El grupo vocal-instrumental es de buena factura y aparece como un interesante resultado del trabajo del pianista y conductor Julio Menéndez. Hubo momentos y hechos para destacar. La participación de músicos de la orquesta sinfónica encabezados por su concertino la violinista Ana Cristina Tarta enriqueció el ripieno. La soprano jujeña Noelia Gareca con llamativa coloratura, propia del barroco, donde juegan las diferentes intensidades en una rápida sucesión de notas, ya en la segunda obra de Händel, el solo de la soprano Mónica Ferri, su notable esquicio nº 7, el coral “Judicabit in nationibus”, un excelente dúo de Silvana Acosta y Delfina Galvez y el poderoso “martellato” del coral “Gloria Patri” cargado de magnificencia.
Este fue el buen cierre de las actividades del año del Departamento de Música de Cámara que dirige la pianista y pedagoga María Fernanda Bruno a la que acompañan eficaces colaboradores. Lo hecho, promete un atractivo 2014.