«Son menores y están perfectamente de acuerdo y, además, deseándolo», señaló un sacerdote español. «Puede haber menores que sí lo consientan y, de hecho, los hay», agregó. Otro clérigo intentó explicar los dichos y dijo que la homesexualidad «perjudica a las personas y a la sociedad».
«Puede haber menores que sí lo consientan y, de hecho, los hay. Hay adolescentes de 13 años que son menores y están perfectamente de acuerdo y, además, deseándolo. Incluso si te descuidas te provocan. Esto de la sexualidad es algo más complejo de lo que parece», apuntó sobre el abuso de menores el obispo de la isla española de Tenerife Bernardo Álvarez.
Tras las declaraciones publicadas por el diario español La Opinión, otro clérigo, el vicario general del obispado, Antonio Pérez, intentó explicar estas declaraciones en nombre de Álvarez: «El obispo en sus palabras no pretende justificar ni comprender un fenómeno absolutamente rechazable como es el abuso de menores».
Sobre la homosexualidad, Álvarez señala que «perjudica a las personas y a la sociedad» y afirma, asimilándola a las agresiones sexuales, que «la persona practica la homosexualidad como puede practicar el abuso de menores».
Diferentes diócesis de la Iglesia católica, especialmente en Estados Unidos (Boston y Los Ángeles) e Irlanda (Dublín) se han visto implicadas en escándalos de pederastia destapados y reconocidos en los últimos años. En Argentin el caso más emblemático de los últimos tiempos es el del Padre Julio César Grassi que fue condenado por la justicia de la localidad Morón.
Por otra parte, el máximo responsable de la Iglesia católica en Tenerife afirma que si en Canarias se registra el récord nacional de divorcios se debe a falta de madurez.
– El Argentino
Un obispo dijo que algunos chicos «provocan» el abuso
Creo que una de las manifestaciones de normalidad en humanos adultos, es la verguenza. El sentimiento de que no està bièn mostrar nuestras partes y sentimientos màs ìntimos, nuestros complejos màs profundos, nuestras pulsiones màs malignas. Lo contrario ocurre con los anormales. Estos se solazan en presentar sus vicios, las aberraciones que son capaces de hacer y su caràcter degenerado, como si fueràn virtudes. Para ellos fabular y mentir es lo normal. Eso, justamente, es lo que ocurre con èste infrahumano vestido de sotana. Siendo asì, para entender las señales que emiten estos entes, hay que poner màs atenciòn a sus intenciones y afirmaciones subliminales, que al enunciado literario del mensaje. Por ejemplo, cuando, refiriendosè a los menores, èste anormal dice: «Hay menores que, incluso, si te descuìdas, te provocan», quiere decir: Los menores son unos degenerados y sì no estàs atento, te violan. Por tanto, violarlos no es un pecado cometido por mì, sino por ellos. Seguramente el Papa Joseph Raztzinger concuerda plenamente con esa opiniòn. Por eso nunca hizo nada contra los miles de casos de abusos sexuales a niños por parte de curas, de los cuales estaba perfectamente informado. Por ejemplo, ese fue el caso del cura Lawrence Murphy quièn (en Wisconsin, USA) violò ,durante años, a DOSCIENTOS (200) NIÑOS DISCAPACITADOS QUE ESTABAN A SU CARGO. O el caso, denunciado en la revista L’ Expresso, Italia, de los curas de los Institutos Provolos de Verona, quienes durante 30 años abusaròn de decenas de niños y niñas, igualmente discapacitados. Ni Hitler pudo imaginar semejantes horrores. Segùn L’ Expresso, los curas llegaròn a violar niños y niñas incluso bajo el altar y/o en los confesionarios. EN NINGUNO DE ESTOS CASOS, ni en otros cientos igualmente bièn documentados, LA IGLESIA CASTIGÒ A LOS CULPÀBLES. Mas bièn ocurriò lo contrario, los premiò trasladàndolòs a otras parroquias, donde podìan dar nuevamente rienda suelta a sus bajos instintos sin riesgo alguno. En cambio, fue durìsima con los pocos curas que denunciaròn los abusos. La «Santa» Sede los excomulgò y los expulsò sin proceso alguno: «latae senteciae», por alta traiciòn a Il Papi» de tutti gli Papi». Fuente, diario «El Pais», España, por Miguel Mora; 26/03/ 2010