El Papa Francisco presentó el pesebre que esta noche se conmemorará en la Plaza San Pedro. Este año es de arena, un “material pobre”, según el representante de la Iglesia católica.
Durante los primeros días de diciembre, el Papa Francisco presentó el pesebre que, como todos los años, se esgrime en medio de la Plaza San Pedro de la ciudad del Vaticano. Este año el nacimiento del niño Jesús que se conmemorará esta noche a las cero horas, fue construido de arena.
Según el máximo representante de la Iglesia católica, el pesebre está hecho de un material “pobre”, “humilde”, que simboliza “la simplicidad, la pequeñez y la fragilidad con la que Dios se mostró con el nacimiento de Jesús en la precariedad de Belén”.
Para construir el gran pesebre, se necesitaron tres bloques de arena que, en total, pesan 720 toneladas. Allí se pueden ver a los tres reyen magos, Melchor, Gaspar y Baltazar, ofreciéndole sus ofrendas al niño Jesús que está rodeado por la Vírgen María y San José. En lo alto de la construcción, los escolta un ángel. Pedro también forma parte de la obra: se lo puede ver de pie, inclinado hacia su familia. La iluminación apunta hacia el niño para resaltar al protagonista de la Navidad. (Cien radios)
