Sandra Rodríguez de Fuentealba llegó al mediodía a Salta. Fue la protagonista esperada de la gran «Marcha contra la impunidad y por los Derechos Humanos» organizada por distintos sectores políticos y organizaciones de la sociedad que repudian la falta de justicia en la Provincia. Su diálogo con Salta 21.
Es cálida, fuerte, serena. Una mujer que transita la historia del asesinato de Carlos Fuentealba, su esposo, docente muerto en Neuquén por la policía que responde al gobierno de Sobisch, en una fuerte represión lanzada durante el conflicto docente en abril de este año.
Conflicto que significó el inicio de otra página negra en la historia argentina, que tiene un acusado: Poblete. “Repudiamos la candidatura de Sobisch” dijo Sandra en Salta. Y convocó al paro nacional y a la gran marcha por el crimen de su esposo. También invitó a sumarse a la organización denominada “Carlos presente”.
“Viví tres meses con los fondos de huelga porque el gobierno se dio el lujo de no pagarme la pensión por Carlos”, denunció la docente neuquina.
¿Te sentís en estos momentos un emblema de la lucha contra la represión y contra la impunidad?
En esta situación uno sabe realmente que para la gente existe un Carlos, y para mí existe otro; pero más allá de eso, esos dos Carlos se juntan en mí. Tiene que ver con nuestra postura en la vida como maestros como pareja, como padres, como docentes. Los dos estamos a favor de los derechos humanos.
Estoy totalmente convencida que Carlos hoy estaría acá, con la gente que nosotros apoyamos siempre: las madres de plaza de mayo, las organizaciones de Derechos Humanos. Fuimos docentes que enseñamos a los chicos qué eran esas cosas, qué cosas no iban a suceder nunca más, qué hechos no se iban a repetir después de la dictadura porque jamás uno quisiera que estos hechos ocurrieran y menos con la atrocidad con la que están apareciendo. Uno hace una lectura en relación a que cuando nosotros le cedemos el espacio a estos gobiernos feudalistas como hay en las provincias, tenemos que levantar los brazos como lo hacen las madres, como lo hacen los organismos para unirnos mucho más, unirnos todos los sectores y luchar por la vida, que es un derecho universal. No es de una provincia ni de un sindicato, es universal.
En este sentido Carlos Fuentealba está vivo…
Más presente que nunca. Estoy emocionada. Venía pensando, creí que para mi familia esto sería muy fuerte. Pero estar aquí es muy cálido para nosotros, nos sentimos como en nuestra casa. Que raro esto de la Patagonia y el norte que se nos juntan…
Los maestros salteños estuvieron desde un principio con nosotros. Ellos aportaron de su fondo de huelga para que yo en estos días no pasara ninguna penuria. Se los voy agradecer ahora personalmente. Somos hermanos en todos los sentidos.
También el secretario adjunto de ATEN, Pablo Grisón -quien marchó junto a Sandra Rodríguez-, dialogó con salta 21. Dijo que tanto en Salta como en Neuquén hubo puebladas por el tema de las petroleras y el reclamo docente. «Hemos dado una fuerte pelea por la escuela pública, la recuperación de los salarios y el trabajo docente. A diferencia de lo que pasa en Salta (donde ADP no acompaña la lucha), nuestro sindicato está absolutamente comprometido con los trabajadores de la educación».
Con respecto a lo que pasó con Fuentealba Pablo Grisón explica: «Hubo una orden de disciplinar, de dar un escarmiento. Así lo expresaron los jefes policiales en una situación en la que nosotros ni siquiera alcanzamos a llegar a la ruta. La represión duró varias horas, en un trayecto de 6 km, donde muchos de nosotros estábamos caminando, nos estábamos yendo».
Lo fusilaron
«Las heridas de nuestros compañeros son en las espaldas, no hubo enfrentamiento y en cuanto al fusilamiento de Carlos pudo haber sido cualquiera de nosotros. El gobernador Jorge Sobisch al dar la orden de escarmentar estaba avalando el ajusticiamiento. Hay dos causas judiciales, una de ellas por el homicidio concreto cuyo presunto autor está detenido. Pero estamos pidiendo que la justicia se mueva en forma más rápida y que las causas no se dividan porque están totalmente relacionadas».
El secretario de ATEN anunció que el 11 de setiembre habrá una marcha nacional por el asesinato de Carlos Fuentealba y convocó al paro del 4 de octubre para que su muerte no quede impune “para evitar que este caso sea el primero y detrás de él puedan venir otros.”
En su discurso en el acto frente al cabildo Sandra Rodríguez de Fuentealba respaldó a lucha de los docentes salteños, repudió al gobierno de Neuquén, se pronunció en contra de la represión y de la impunidad y alentó a unirse en una fuerza masiva. Sandra condenó el fusilamiento público de su esposo y responsabilizó en forma directa a Jorge Sobisch. Al llegar a la marcha, abrazó a la representante de Madres de plaza de mayo, línea fundadora, Nora Cortiñas y a Miryam Medina , madre de Sebastián Bordón, joven asesinado hace 10 años en Mendoza.
– Fotos: R. Chávez Díaz