Con un 54,2% de trabajo informal Salta es la ciudad con mayor porcentaje de empleo en negro del país. Su tasa de desocupación del 10,5 % sólo es superada por el Gran Catamarca (11,0%), el Gran Rosario (11,2%) y la ciudad bonaerense de Batán (10,9%)
Estos datos están en un informe especial titulado Qué es «pleno empleo» en la Argentina del periodista Ezequiel Burgo publicado el domingo por el diario Clarín en su suplemento de economía iEco (edición en papel).
De acuerdo al informe Salta muestra los peores indicadores de ocupación laboral: si bien pasó de ser la ciudad con más desempleados -rango que había alcanzado pocos meses atrás- al cuarto lugar después de Rosario, Catamarca y Batán (de las que está separada por fracciones menores a un punto), es la urbe argentina con mayor porcentaje de trabajo informal.
En efecto, el informe de Burgo señala que en Salta el 54,2 de los trabajadores trabaja en negro. De este modo encabeza el ránking de empleo informal del país, seguida de la ciudad santiagueña de La Banda (51,2%) y la cordobesa de Río Cuarto (50,4%).
El informe de Clarín analiza a través de la comparación de los principales indicadores de empleo por región las fuertes diferencias en cantidad y calidad del trabajo a lo largo de toda la geografía de la Argentina.
La Patagonia con los mejores índices
La nota toma como fuente una investigación reciente de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Buenos Aires para advertir que el empleo está creciendo en todo el país, pero de manera diversa. Así por ejemplo, en muchas provincias conviven niveles de peno empleo con un alto nivel de trabajo precario.
Con una tasa promedio de desempleo del 7,5% Argentina estaría cerca de lo que se conoce como «tasa natural de desempleo», que se registra cuando una economía hace pleno uso de sus recursos humanos.
Pero este panorama tiene sus bemoles. San Luis registra una tasa de desocupación del 1,9% pero es uno de los conglomerados con peor calidad de trabajo: el 50% de sus asalariados tiene ocupaciones informales, el 34% empleos inestables y el 27% trabajan en planes de empleo.
Las mejores estadísticas se observan en la Patagonia, aunque se debe considerar que sus centros urbanos son los de menor población relativa. Las tasas de personas que demandan un empleo (desocupados y ocupados que buscan activamente un trabajo) van desde un 8,8% en Comodoro Rivadavia a un 36,1% en Tucumán.
El optimismo de Romero
El trabajo de la UBA observa que si bien en muchas provincias conviven un desempleo de dos dígitos con altos niveles de empleo informal -como ocurre en Salta y en el Gran Buenos Aires-, va ganando terreno lo que se llama la dupla «pleno empleo-puestos de trabajo precarios» como pasa en San Luis, Formosa, Posadas y Mendoza.
Cuando meses atrás la estadística marcaba a Salta como el punto de mayor desempleo del país Juan Carlos Romero hizo una interpretación optimista de esa situación. «Lo que pasa es que Salta está tan bien que hay mucha gente que quiere venir a radicarse y a trabajar en nuestra provincia», le explicó el primer mandatario a la revista Gente.
Tal vez la misma explicación podría ensayarse desde el gobierno para la grave crisis habitacional que se vive en Salta y Orán, con violentas acciones de desalojo de personas humildes -por lo general desempleadas o con trabajos precarios- que toman predios públicos y privados en el intento de conseguir un espacio donde vivir con sus familias.