En un lejano lugar del Reino Unido… sucede una historia real que reunió a un grupo de mujeres que en el año 1999 comenzaron su éxito a partir de un calendario con sus desnudos en memoria de John Baker quien muere por una enfermedad incurable. El dinero ganado con el calendario se destinó a la investigación del Linfoma de Hodking y la Leucemia.
En un cercano lugar de la Argentina… en Buenos Aires… esta historia escrita por Tim Firth es retomada bajo la dirección de Manuel González Gil, con producción de Javier Faroni. ¿Pero qué tenemos que ver nosotros con Inglaterra y sus íconos? ¿Qué tenemos que ver con las mujercitas inglesas, con la primavera inglesa, con la Sociedad de mujeres voluntarias inglesas? Una historia inglesa conmovedora que vemos hablada en castellano, con nombres ingleses, espacios ingleses y puteadas en porteño… De entrada, el cuento de hadas es inverosímil. Ese es el tema, no les puedo creer a las actrices hablando de un tal Jhon que no es nuestro Juan ni me llaman la atención las colinas donde siembran girasoles como si sembraran la esperanza… inglesa.
Lo que sí es creíble, lo único creíble y salvable de la obra es el desnudo de las actrices: María Valenzuela, Marta González, María Rosa Fugazot, Norma Pons, Graciela Cohen y Nani Ardanaz (no llegó a Salta Linda Peretz). Podríamos afirmar que la historia triste y romántica de la enfermedad se convierte en la historia audaz, provocadora y hasta mediática de seis actrices porteñas y cincuentonas que se atrevieron a quitarse la ropa 
para mostrase tal cual son. Un marco de una cosa puesto en otro lugar para que funcione el desnudo. No recordaré la hazaña de unas mujeres inglesas que posaron desnudas en un calendario por el cáncer, en cambio, no podré quitarme jamás de la cabeza el cuerpo desnudo de Norma Pons, la más atrevida y la más arriesgada de las seis; y en mi opinión, la mejor de las actrices, fuera de todo cliché, sobre todo al que nos invitan Valenzuela, Cohen y Ardanaz, o para ser más justa, el director González Gil.
Marta González y María Valenzuela son las protagonistas de “Las chicas del calendario” (Valenzuela es la esposa y luego viuda de Jhon) pero Norma Pons se roba la obra, en esos fragmentos de participación, abarca más que ninguna, copa la escena con su encantador personaje, con su presencia desbordante y su carisma inigualable.
Mery, interpetada por Dora Baret, es la presidenta de este voluntariado de mujeres, ácida, rígida y moralista, representa a una parte prejuiciosa de la sociedad… inglesa. Una excelente actuación sin desnudo. Igualmente Fugazot, que a sus añitos, posó sin ropas para este calendario.
Los formidables desnudos de todas y cada una, son conmocionantes, han sido lo verdaderamente auténtico del trabajo y lo que perdurará en la historia del teatro comercial.
Pero queda la idea ¿tengo que llegar al extremo de desnudarme para lograr un objetivo? ¿Tendríamos que desnudarnos frente al palacio de Justicia para terminar con la impunidad?
¿Deberá la presidenta Cristina recurrir a un desnudo para que alguien la vote?
– Las fotos corresponden a la función realizada en Salta.
– Nota relacionada:
Llegan a Salta Las chicas del calendario
http://www.salta21.com/Llegan-a-Salta-Las-chicas-del.html
