El 19 de abril del año 1940 se realizaba en Patzcuaro (México) el Primer Congreso Indigenista Indoamericano con los objetivos de perpetuar la cultura, el trato igualitario, el derecho a la tierra, etc., de los pueblos originarios.
Argentina se adhería en 1945, pero nada más, porque la marginación ha seguido (y sigue). Una cuestión declamatoria, como la adhesión del año 2000 al declarado “DÍA DE LA CONVIVENCIA DE LA DIVERSIDAD CULTURAL”.
En esta ocasión como un reconocimiento meritorio a mi amiga y comprovinciana la antropóloga Silvia Barrios, por sus trabajos de investigación de la cultura, historia y costumbres de nuestra comunidades, especialmente en la música y el canto, como han sido, entre otros, el espectáculo que recorrió el mundo “Argentina Indígena” y su último libro “POBLADORES DEL HORIZONTE” , dedicado A la memoria de dos maestros del canto: Nokais, wichi-mataco del Pilcomayo y Lojchipena, chorote montaráz.
Escribe Silvia en relación a Nokais: Vagaba insomne por el monte y se consumía de a poco en su propio fuego, se revolcaba en sus cenizas. Su cuerpo nervudo, fibroso, languidecía exhausto cuando lo sorprendía la mañana en cualquier claro o cerca de alguna aldea, cuando se tiraba a dormir. En la noche había buscado compañeros invisibles a los que le impartía la orden de comenzar el canto…
Son culturas que se mantienen vivas conservando sus antiguas costumbres heredadas desde hace de más 500 años que la clase dominante no ha podido destruir (ni debe), a pesar de la marginación, el desprecio y la pobreza causada por el sistema capitalista impuesto por los sucesivos gobiernos.
Y como no pueden destruirlos, pretenden incorporarlos a la sociedad de consumo, al mercado, manipularlos demagógica y políticamente. Esto también es corrupción.
Debemos por ello evitar que la llamada “civilización” destruyan su cultura y su identidad, como bien dice Silvia: …presentarlos de una forma más abarcativa posible, ante un país que los desconoce, separa, discrimina, estereotipa e integra compulsivamente.
Día de los pueblos originarios
Estoy totalmente de acuerdo de honrar a los pueblos ìndigenas, a respetarlos como a iguales y a dotarlos de plenos derechos. Tambièn estarìa de acuerdo en una discriminacion positiva en su favor (en educaciòn y otras àreas), a fin de compensar, por lo menos en parte, por la violencia, las injusticias y las maldades que se ejercieròn (y se ejercen) en contra de ellos. Sin embargo, el adjetivo: «Originarios» no es correcto, no existen los pueblos originarios. Existe un ùnico pueblo que merece esa caracterizaciòn: el ètiope. En efecto, hace tiempo que la antropologìa estableciò, sobre bases cientìficas sòlidas, que el primer ser con rasgos decididamente humanos naciò y se desarrollò hace mas o menos 2 millones de años en las llanuras de Laetoli, una regiòn en la actual Etiopìa. Desde allì, este grupo, el ùnico realmente originario, emigrò y se dispersò por todos los demàs continentes. En consecuencia, todos los demàs pueblos del mundo, incluyendo los indìgenas, son descendientes de imigrantes.
El asunto no es solamente anecdòtico. Evo Morales, en Bolivia, ha aprobado una nueva Constituciòn y un nuevo sistema legal basado en la raza. La idea central de Morales con respecto a su nueva legalidad, es que los pueblos «Originarios» , por el solo hecho de serlo, tienen cualidades intrìnsicamente superiores a los «No Originarios» . De ese supuesto «hecho» , Morales y su gente, deducen que, debido a èsas cualidades intrìnsecamente superiores, a los «Originarios» les corresponden- natural e històricamente- derechos especiales (de propiedad y otros) de mayor entidad y prioritarios frente a los que les cabe a los No Originarios. En efecto, en la Constituciòn de Morales, se hace una distinciòn clara entre los derechos de los originarios y los otros. De ahì, a discriminar (legalmente) por raza, hay solo un paso. Cualquier semejanza con la constituciòn del règimen racista de Àfrica del Sur antes de Mandela NO es casualidad. Tampoco son casuales las semejanzas entre las teòrias de Evo Morales y las del antropòlogo Rosenberg y su principal discipulo y ejecutor: Hitler
Día de los pueblos originarios
Sr debiera darle vergüenza hacer una comparación como la efectuada. Los pueblos originarios han estado en estos territorios latinoamericanos mucho antes que los dominadores colonialistas que han cometido uno de los mayores genocidios de nuestra historia, al estilo de Hitler. En cada territorio de nuestro planeta tribus y clanes han luchado para asegurarse una parte de la tierra a niveles similares de fuerza. Pero lo sucedido en latinoamérica ha sido un crimen de lesa humanidad, una monstruosidad que, aun hoy en Argentina sigue su curso. Si un gobierno constitucional como el de la hermana Bolivia ha aprobado una Constitución ella puede ser objeto de críticas para mejorarla, pero es un documento que pone reglas de convivencia PARA TODOS LOS CIUDADANOS. Y eso es democracia. Y es infinitamente mejor que lo que han hecho los dominadores colonialistas: masacrar a quienes, sin duda, tenían mucho más derecho a la tierra latinoamericana sin siquiera considerarlos seres humanos. Sr Ud no tiene vergüenza. Y me puedo imaginar por qué.