Un centenar de indígenas que manifiestan frente a la Catedral Basílica de Salta están indignados. Dicen que el gobernador Juan Manuel Urtubey se niega a recibirlos. Esta tarde se desnudarán para pedirle a sus dioses que castiguen a los gobernantes.
El cacique wichi Indalecio Calermo explicó el sentido de la ceremonia que los aborígenes del norte provincial realizarán esta tarde frente a la Iglesia Mayor del catolicismo salteño. Según explica el dirigente se trata de algo serio, que en su interpretación dista de ser una acción que pueda ser tomada para la chacota o entendida apenas como un modo ingenioso de llamar la atención sobre los problemas de los pueblos indígenas de Salta.
Ayer pasado el mediodía un centenar de indígenas -hombres, mujeres y niños- se recostaban sobre césped de la plaza 9 de Julio frente a la Catedral Basílica y a la sede del Banco Macro. Indalecio Calermo dialogó con Salta 21.
¿Qué sentido tiene el desnudo que usted anunció para mañana a la tarde?
Es algo que tiene que ver con la tradición del pueblo wichi al que pertenezco. Cuando estamos enojados nos quitamos la ropa y nos pintamos. Entonces les pedimos a nuestros dioses que manden un castigo contra las personas que nos atacan, nos amenazan o nos ofenden.
Pero este es un lugar público y estamos en Semana Santa…
Justamente, tiene que ver con eso. A Cristo también lo desnudaron y lo colgaron en una cruz.
A Cristo le dejaron un taparrabos. ¿Ustedes harán un desnudo total o quedarán en ropa interior?
No. Vamos a quedar en calzoncillos…
Usted dijo que son 200 pero aquí no se ve esa cantidad de gente…
Es que algunos se fueron a comer.
Reciben ayuda de alguien? ¿De intendentes de sus localidades?
No pedimos ayuda a los intendentes, porque si les pedimos ayuda siempre quieren algo a cambio….
Calermo señala los problemas que enfrentan los pueblos indígenas salteños: deforestación, miseria, explotación en fincas, trabajo infantil, expulsión de sus territorios. Pero parece que esta vez el eje del reclamo pasa por el tema de los maestros bilingües. Muestra una resolución de la ministra de Educación Marta Torino y advierte: «Podemos soportarlo todo, menos que nos quiten la cultura. Sin nuestra cultura ya no somos indios. Usted es crillo y yo soy wichi, pero si nos cortamos a los dos nos va a salir sangre por igual….»
Pero si la cultura es la lengua, la religión y las costumbres ustedes están en situación crítica porque son cristianos, abandonaron la caza y la pesca para vivir en las afueras de los pueblos… ¿por eso se aferran a la lengua? ¿Es lo que les queda?
No todos somos cristianos, sólo algunos, y los respetamos. Nos quitaron la tierra, pero todavía hay grupos que viven en el monte. Los wichis hablamos nuestra lengua en un 90 por ciento. Los guaraníes, que la estaban perdiendo la recuperaron en un 60 por ciento. No queremos que nos pase como a los diaguitas, que perdieron su idioma.
El cacique muestra la resolución ministerial que gatilló el conflicto. Parece un instrumento adecuado, habla de la designación de maestros bilingues. ¿Dónde está el problema?
Calermo dice que la ministra Torino miente cuando afirma que hubo acuerdo, que es una decisión impuesta; que obliga al maestro de la lengua indígena a tener estudios superiores. Pero que para transmitir la cultura occidental está el maestro normal, que el maestro aborigen debe conocer a fondo su cultura y su lengua para poder transmitirla a los niños de las comunidades. Dice que el IPIS (Instituto de Pueblos Indígenas de Salta) representa al gobierno y no a las etnias originarias.
Como Octorina Zamora que integraba un grupo de indígenas que protestaban frente al cabildo el día que asumió el gobernador Urtubey, quien encabezaba una fiesta cívica en la misma plaza 9 de Julio desde un escenario levantado en la esquina de España y Mitre, Indalecio Calermo es un dirigente decidido y polémico. El cacique wichi criticó duramente la decisión de la justicia de procesar por estupro a un indígena cuando una chica púber que cursaba la primaria quedó embarazada. Explicó que para la moral indígena tras la menarca (primera menstruación) la niña se transforma en mujer y puede convivir con un hombre, incluso si éste es mayor.
Usted fue muy criticado cuando anunció que se inmolarían en aquella marcha en la que vinieron a protestar contra Romero. Se dijo que como adulto podía disponer de su propia vida, pero no de la de los niños….
Es que no fue una decisión mía, fue una decisión de toda la comunidad y que debía respetarse. Realmente estábamos dispuestos a incendiarnos…
¿Fue el momento más dramático del enfrentamiento con Romero?
Sí…
¿Con Urtubey están igual, mejor o peor que con Romero?
Peor. Al menos Romero nos recibía. Urtubey no nos da audiencia, no acepta hablar con nosotros.
Pero en la campaña se vieron fotos de él recorriendo las comunidades, levantando en brazos a los niños indígenas….
Y si, bueno. Pero ahora no nos quiere recibir…
Foto portada: indígenas wichis a orillas del Pilcomayo en fotografía tomada a principios del siglo XX. Fuente: www.viajoporargentina.com
