La imagen fue descubierta poco antes de la medianoche del lunes 11 de febrero. Vea todas las imágenes registradas.
Fue en el momento en que la joven Belén Elías, residente en la calle Dionisio Ramos a la altura del 1700, llamó a su primo José Elías para que viera un rostro en la pared de enfrente de su vivienda.
José Elías refiere a esta cronista que al momento del llamado serían las 00:30 de la madrugada del martes 12, pero que el rostro en la pared había sido visto al cierre del lunes 11 de febrero.
En diálogo con Elías, comenta a Salta 21 que él vio el rostro de una mujer triste mientras que sus primas, su tía Rita y algunos vecinos de la cuadra, veían el rostro de Cristo. “Para mirar de cerca nos subimos al árbol, que no es muy alto, y le tomamos el mentón. En ese momento no sentí nada. Pero sí cuando vi que la otra persona lo tocaba, se me erizó la piel”.
Miguel Ángel, esposo de Rita, no pudo ver la imagen y algunos opinaron que se trataba de «una cuestión de fe”. Sin embargo, esta teoría no duró mucho puesto que algunos de los que miraban no son creyentes.
La imagen aparece sobre la pared de arriba de un portón. El dueño del lugar refirió que toda la vida pasó por ahí y nunca vio nada. Nuestro entrevistado comenta que el vecino quedó sorprendido como los demás ante lo que veían sus ojos.
“Sentimos una buena energía”– comenta José. “Sentí algo así como tranquilidad y me quedé observando durante casi 3 horas”. Incluso los vecinos recordaron la famosa y “trucha” aparición de la Virgen que supuestamente se veía por Santa Lucía, detrás de un árbol, por encima del techo (imagen que por aquel momento me pareció ser reflejo de las estrellas).
Inmediatamente me llegaron por la tarde de ayer, tres fotos de celular tomadas por Elías en el lugar, durante la primera noche. Hay algo que resulta muy probable: que el árbol, la luz naranja y las sombras, ayuden a producir estas imágenes que se proyectan. Pero el fenómeno aún así, resulta extraño por la referencia, más que nada.
Esta noche (y esta madrugada) volverían a esperar el fenómeno para ver si ocurría nuevamente. Y efectivamente sucedió. Me alertaron sobre la imagen y estuve en el lugar a la 1:30 de la madrugada de hoy y por el lapso de una hora. Cuando llegué, vi un rostro en la pared, hacia lo alto, arriba del portón. Inmediatamente tomé fotos con mi cámara. El rostro que vi desde la vereda de la familia que lo descubrió, fue el de Cristo. Intentaré describirlo: el ojo izquierdo permanecía en sombras y como si estuviese amoratado, mientras su par, el derecho, estaba cerrado, como si durmiera. La nariz se dibujaba perfectamente sobre unos labios que aparentemente estaban cerrados, y desde otra posición para observar, parecen abiertos. Sobre la cabeza, se ve la formación de espinas, posiblemente por las hojas de los árboles. Pero la imagen era visible, patente y clara.
Al acercarme, la imagen comenzó a tornarse diferente. Hacia la mitad derecha parecía la imagen de un hombre santo y sufriente. Pero del otro lado, comenzaba a producirme escalofríos, ya que el ojo amoratado o ensombrecido parecía estar abierto y con un fondo blanco, mirada nada angelical.
De repente, los testigos todos, entre los que me encuentro yo desde la segunda noche, comenzamos a sentir poco agrado.
Un vecino llegó con otra cámara y luego se sumó otro. Las fotos que veíamos revelaban no ya un rostro sino varios y no precisamente santos: quizá imágenes de seres malformados salvo por uno de una mujer que parece tener sus manos alzadas en súplica, de cuerpo alargado, casi al pie del rostro principal y hacia el costado derecho del portón de la panadería. Pero al mismo tiempo, otros seres se veían con nitidez a través de las fotos, especie de seres dolientes y otros, hasta siniestros. También se esparcían ojos y cuerpos en lo que llegó a componerse un verdadero mural que parecía espantar.
Y al mismo tiempo, la imagen se transfiguraba a veces en el rostro de una mujer y a veces en el rostro de un hombre con cabellera enrulada.
Los vimos todos los presentes.
La cámara que mejor logra capturar la imagen es la que puede sacar fotos en la oscuridad, y es allí donde se advierten distintas percepciones de la imagen mural. Depende de la toma, incluso, se ve que el rostro principal tiene un cuerpo.
En diálogo de Salta 21 con una vecina, Claudia, me comenta que hace años atrás, por las noches, se veía a un sujeto de negro, sin rostro y con un sombrero oscuro, parado en la puerta de la vivienda donde se observa el paradigmático rostro. Belén, al mismo tiempo, recordó que hace muchos años (ninguno supo precisar fechas pero todos coincidían que fue hace bastante), se suicidó un policía que vivía al lado de la casa. Y que se oyen ruidos.
Elio, otro vecino y amigo de la familia Elías, expresó que le refirió esto de la imagen a un empleado-tipo ayudante- de larga data de la Iglesia Ntra. Señora de Fátima. Este señor llegó anoche al lugar y vio, en efecto, la imagen principal que se revela en la pared. Como los que vieron esto, quedó también sorprendido y les recomendó a los vecinos que rezaran mucho.
Todavía siento escalofríos. Si el fenómeno es pura magia de la luz, puede explicarse con la lógica y la razón. Lo cierto es que resulta por demás enigmático. La fecha del suceso extraño ocurrió cuando se recuerda a Nuestra Señora de Lourdes, por un lado, y como consecuencia, en 1992, el Papa Juan Pablo II instituyó la celebración de la «Jornada Mundial del Enfermo» a realizarse el 11 de febrero de cada año, en memoria litúrgica de Nuestra Señora de Lourdes. Y por el otro, coincide con el día en que Benedicto XVI anunció su dimisión. En un sitio de Internet leí que “la profecía de los papas de San Malaquías anuncia que habrá 111 papas antes de la llegada de Pedro El Grande y del fin del mundo. Benedicto XVI es el número 111 en la lista”. Pero para qué meternos en estos asuntos alarmistas.
Pese a mi escepticismo, doy fe que la imagen-mural no es una alucinación y que sus formas, coinciden con el rostro de Cristo. Al menos en apariencia lo es. Cuando la percepción aumenta y se agudiza la vista, aparecen más rostros y hasta cuerpos, y la “lectura” se vuelve casi aterradora. Una mezcla rara de imágenes de seres ambiguos, como si mostrasen los dos planos conocidos como el bien y el mal en una conjunción de formas perceptibles con un trabajo de observación.
Un enigma realmente. Y un nuevo misterio.
– Haga click en el portafolio para ver las imágenes (las tres primeras tomadas por J. Elías y las otras por Salta 21).
Misterio en el Bº Policial de Salta: un rostro de Cristo se revela en la pared
Parece un rostro, pero no de cristo.
Misterio en el Bº Policial de Salta: un rostro de Cristo se revela en la pared
Quede impresionado!! Impactante las fotos y el testimonio vivido por mi amigo Jose Elias.. Mas aun en estos tiempos donde la fe se cuestiona. Realmente quede asombrado por las imagenes y la secuencia del relato de las apariciones.. Ariel Cruz
Misterio en el Bº Policial de Salta: un rostro de Cristo se revela en la pared
IMPRESIONANTE MI HERMANO ME LA MANDO A LA FATO Y QUEDE IMACTADA APENAS LA TOMO LA REENVIO PARA QUE EL GRUPO DE PRIMOS LA VIERA, POR WASAP