Tras la realización de la autopsia y la extracción de la bala que terminó con la vida del joven estudiante, hoy sus restos serán velados. Aún no se ha determinado el calibre del arma homicida. La Fiscal Cristina Caamaño ordenó una pericia planimétrica para determinar desde qué distancia se efectuó el disparo.
El cuerpo del militante asesinado tras un enfrentamiento gremial fue entregado a sus padres. Anteriormente los médicos forenses le realizaron la autopsia y le extrajeron del tórax la bala que terminó con su vida. Hoy sus restos serán inhumados en un cementerio de Avellaneda.
Fuentes judiciales informaron que aún no han podido determinar el calibre del arma homicida y mandaron a peritar el proyectil.
Los resultados podrían demorar entre dos y tres semanas. Mientras tanto, sacaron la conclusión de que «el arma no fue apoyada ni el disparo fue a quemarropa»; por esta razón la Fiscal Caamaño ordenó una pericia planimétrica para determinar desde qué distancia se efectuó el tiro.
Además, Caamaño, hoy al mediodía, tomará declaración testimonial a un grupo de personas que estuvieron presentes en el enfrentamiento entre trabajadores tercerizados y miembros de la Unión Ferroviaria.
A medida que avanza la investigación empiezan a aparecer nombres de los presuntos atacantes. Uno de los delegados de los tercerizados, Diego Cardia, asegurá conocer a quien asesinó a Mariano Ferreyra.
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