El peligro es que el gobierno vea el gesto policial como un signo de debilidad, por un lado. Y por otro que la masa de efectivos en huelga espere una rápida satisfacción y esta no llegue en pocas horas. Hay una luz en el túnel, pero no será fácil.
Los 9 policías intimados a entregar el arma y la credencial lo hicieron anoche, a las 22, en una oficina lateral con apertura al frente del edificio de jefatura, en una acción registrada por una nube de fotógrafos, camarógrafos, cronistas y movileros.
Se trata del cabo Ernesto Rubén Argañaraz, el agente abogado Pablo Fernando Cardozo Cisneros, el cabo Ramiro Javier Peña, el sargento Víctor Leonardo Torres, el cabo primero Renato Gabriel Mejía, el cabo Oscar Gustavo Díaz, el suboficial Antonio Ariel Gallardo, el cabo Carlos Cayo y El cabo Cristian Coronel.
Tras el trámite los policías -y de ellos integran la Comisión Negociadora- dialogaron con el subcomisario Mario Paz y el diputado Santiago Godoy por espacio de una hora.
Godoy valoró el gesto pero dijo que es necesario para avanzar que levanten la medida de fuerza. Los policías advirtieron que no levantarán la huelga hasta que no reciban un incremento salarial por encima de la propuesta gubernamental que fija un piso de 1.900 pesos.
Lo positivo es que se ha reanudado el diálogo y hoy los representantes de los policías esperan un llamado que los siente a una mesa con el ministro Kosiner (Seguridad) y Parodi (Finanzas).
Un espacio de distensión para un conflicto que lleva hoy ocho días y que pareció salirse de cauce por dos motivos:
– El gobierno -ofuscado por su impotencia para resolver el problema- decidió pasar a disponibilidad y pretendió exonar a los mismos efectivos a los que por circular había convocado al diálogo, reconociéndolos y avalándolos como representantes legitimados de sus compañeros.
(Cuando anoche le mostraron las circulares de la convocatoria a los policías ahora sumariados el diputado Godoy no pudo ocultar su sorpresa: el gobierno pretendió sancionarlos por cumplir una orden emanada de su autoridad que está documentada).
– La demora en el cumplimiento de la orden de jefatura a los policías sumariados y pasados a disponibilidad de entregar el arma y la credencial dio pábulo a los medios oficialistas a fustigarlos como «rebeldes» y «sediciosos», creando inquietud en la población. Esto a su vez debilitaba al gobierno que parecía haber perdido el control de su fuerza de seguridad.
«Como abogado sé que podría no devolver el arma, porque hay recursos legales presentados que así lo hacen posible sin vulnerar la ley, pero lo hago como un gesto para reanudar el diálogo», explicó el agente Cardozo Cisneros.
Cauce para la crisis policial: entregan armas y reanudan diálogo
Lamentablemente, este tipo de conflictos terminan casi siempre en acuartelamientos y exoneraciones. Y la responsabilidad de ello recae en el poder político, porque no permite la sindicalización de las fuerzas de seguridad. Precisamente el reconocer el derecho de libertad sindical al personal policial permitirá instrumentar una reglamentación que impida que sus medidas de fuerza obstruyan el normal cumplimiento del servicio de seguridad.
Por último, habría que recordar que el Dr. Capón Filas, juez de la Cámara Federal del Trabajo, sostiene que debe reconocerse a las fuerzas armadas y a las fuerzas de seguridad la libertad sindical y el derecho de negociación colectiva, pues cuando el Estado argentino ratificó los convenios 87 y 98 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ninguna ley fue sancionada excluyendo la libertad sindical de tales sectores.
Crisis policial encauzada: entregaron armas y se reanuda el diálogo
Creo que la base policial ha dado muestra de su voluntad de nogociar, no nos olvidemoos que para ellos entregar el arma y la credencial, es sumamente duro sobre todo cuando estan luchando por una causa justa.
Esperemos que tambien la cupula policial y el gobierno muestren la misma voluntad. Es la unica forma de negociar y destrabar el conflicto. Sobre todo cuando existe un acta firmada por el Sr. Gobernador que data del conflicto de agosto/08 donde se comprometia a blanquear en el mes de enero todos los items en negro de la fuerza, lo que no se cumplio. Y sobre todo teniendo en cuenta que dado el caracter del trabajo policial ni siquiera el agente ingresante esta excento de tener lesiones e incluso llegar a la muerte en un prosedimiento. Que pasaria entonces con su jubilacion o la pension de su familia si hay tantos items en negro?