Consideraron que el funcionario «no podría estar ni un minuto más» si se comprueba que escribió el mensaje que advertía a enfermos de cáncer sobre una victoria de Macri. Juntan firmas para exigir su dimisión.
Daniel Gollán quedó en el ojo de la tormenta por un controvertido mensaje que advertía que se terminarían los tratamientos contra el cáncer si Daniel Scioli no gana el ballotage. El funcionario borró el tuit apenas unas horas después de publicado y aseguró que le «hackearon» la cuenta, pero no pudo escapar de las críticas.
La explicación del ministro no convenció a todos. Muchos tomaron el argumento del «hackeo» con pinzas. Tal fue el caso de la diputada macrista Laura Alonso, quien usó la misma red social para aludir al caso con ironía.
El también legislador José Cano (UCR) fue más contundente y abogó por que Gollán dé un paso al costado. «Quisiera creerle al ministro que le hackearon la cuenta. Sería lamentable (que no haya sido así). No podría estar ni un minuto más al frente del Ministerio de Salud», indicó.
Cano asoció el tema a la agresiva campaña que el oficialismo está empleando contra Mauricio Macri de cara a la segunda vuelta. Al respecto, observó que desde que llegó al poder, en 2003, el Frente para la Victoria utilizó el esquema «de amigo-enemigo». «A nadie le debería sorprender lo que está pasando», remató en diálogo con radio La Red.
Las dudas en torno a la veracidad de la palabra del ministro tienen cierto asidero en tuits anteriores. Aunque no había llegado al extremo de especular sobre la enfermedad de esa manera, sí había desacreditado a Macri y otros candidatos de la oposición.
El caso no demoró en popularizarse en redes sociales y hasta mereció una propuesta en la plataforma Change.org. El planteo es sencillo: juntan firmas para exigir su renuncia «por inocular el miedo en personas que dependen de medicamentos oncológicos y/o tratamientos médicos». La petición había logrado centenares de adhesiones en cuestión de horas.
– Infobae