Luego de que los gobernadores rechazaran la propuesta inicial del gobierno nacional, recibieron una oferta oficial que puede llegar a reducir en un año el tiempo de pago de la deuda del 15% de coparticipación.
El gobierno nacional propuso a las 24 provincias un nuevo esquema de devolución de las deudas por el 15 por ciento de la Coparticipación Federal que acelera los plazos para el cobro de las acreencias, al tiempo que insistió en la necesidad de avanzar en acuerdos para poder reformar la ley que define el reparto de los impuestos nacionales.
Lo cierto es que los gobernadores convocados este jueves a la Casa Rosada escucharon atentamente al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, pero aún no comunicaron si aceptarán la propuesta del oficialismo. La misma consiste en la devolución del 3% en cinco años, o bien el envío durante cuatro años de un 3% más la posibilidad de sumar un porcentaje idéntico, en forma anual, a través de un bono o instrumento financiero hasta alcanzar el 15 por ciento reclamado.
Las partes coincidieron en que durante el encuentro celebrado en el Salón Norte, del que participó durante unos minutos el presidente Mauricio Macri, se avanzó en una «propuesta superadora» al plan anterior, pero que cada jurisdicción deberá analizar si la acepta o no.
La voz disonante la llevó la mandataria santacruceña, Alicia Kirchner, que cuestionó que aún negocian estas deudas con el Estado federal «en un contexto de aumentos de precios, de combustibles y de tarifas».
Según se pudo averiguar, al comienzo Macri ofreció un breve discurso mostrando su satisfacción «por la nueva convocatoria de todos los gobernadores», a los que instó a «seguir debatiendo para mejorar la situación fiscal», pero «entendiendo la compleja situación» que atraviesan las cuentas nacionales. Luego le dio la palabra al titular de la cartera política y se retiró.
La reunión había sido convocada por Frigerio luego de que los mandatarios del PJ rechazaran el organigrama oficial -que mediante un decreto de febrero ordenaba la devolución de los millonarios recursos en un plazo de cinco años y creaba el Consejo Argentino para el Nuevo Federalismo- y amenazaran con trabar en el Congreso la votación de leyes fundamentales para el Ejecutivo, como la derogación de las normas que posibilitarían cerrar el arreglo con los fondos buitre.
El mencionado decreto fue dejado de lado ayer por los protagonistas de la reunión y ahora se estudia la forma de reglamentar la enmienda propuesta. Es que el anuncio de ayer planteó, en forma ideal, un esquema de devolución de los fondos entre 2016 y 2019 con la inclusión de un bono o el reintegro original que preveía el pago de un 3 por ciento en cinco años.
En una conferencia de prensa posterior, el ministro Frigerio fue consultado sobre el recorte de los plazos en los pagos y contestó: «planteamos la devolución del 15% de acuerdo a las posibilidades de un Estado quebrado desde el punto de vista fiscal y financiero como el que heredamos. La propuesta es incrementar la coparticipación a razón de 3 por ciento por año» al tiempo que aclaró que algunas provincias tendrán la posibilidad de sumar otro 3 por ciento anual en los primeros cuatro años a través de un instrumento financiero a definir en los próximos días.
El funcionario también coincidió con los mandatarios provinciales en la necesidad de discutir una nueva ley federal de Coparticipación. En este sentido, el funcionario dijo que «una vez que sorteemos los problemas que se generaron en estos 20 años por fuera de la ley de Coparticipación, como denominamos a estos ‘parches’, trataremos de que antes de 2019 podamos mostrar a la sociedad que nos pusimos de acuerdo para una nueva norma».
– Diario Popular
El Ejecutivo mejoró su oferta a los gobernadores
Habrá que reconocer que gracias a Macri los gobernadores de la mayoría de las provincias se sacudieron la modorra y salieron a pelear por los intereses de su propia gente.
Con excepción de Santa Fé, San Luis y Córdoba, ningún gobernador se animó en los 12 años pasados a reclamarle a Néstor y Cristina por los fondos que el Gobierno central les retenía; se hicieron bien los boludos y cuando iban a la Casa Rosada era solo para aplaudir a los jefes sin decir una sola palabra (además no los dejaban hablar).
Hoy son todos machos, un poco más y le patean el escritorio al Presidente para sacarle todo lo que puedan. Se acordaron del Federalismo que lo tenían escondido bajo de la cama.
Es indudable que para las instituciones de la República soplan mejores vientos.