Algunas personas que siguen mis artículos, me preguntan vía email o personalmente: no temes de sufrir represalias por lo que escribes?
Represalias en Democracia…?
Para contestar esa pregunta me reflejo en una canción que la interpretan Los Cantores del Alba “Ayer tarde me he mirado en el espejo, pues sentí por mi faz curiosidad, y el espejo al reflejar mi cuerpo entero me ha mostrado dolorosa realidad, ya estoy viejo…”
Su letra indica que el paso del tiempo es indefectible, no se inclina ante nadie, no se detiene, y cuando giramos nuestra cabeza para ver lo que vamos dejando de nuestra vida, podemos apreciar todo lo que hicimos, bien o mal, a favor o en contra de la gente, pero por sobre todas las cosas los legados que les heredaremos a nuestros seres queridos.
Reflejo lo que todos ven, sienten y saben, situaciones que a todos indigna, pero por una cuestión u otra no se animan a decirlo a viva voz, por miles de motivos, el más común de todos el “no te metas”, que quedó grabado a fuego en esta sociedad en la década de los setenta, gracias a los “botudos”, que con arma en manos disponían de las ideas y las vidas de los que se atrevían a pensar o a idealizar una forma de gobierno que sea equitativa y justa: muchos de esos pensadores quedaron en la historia, en nuestro país fueron 30,000 los que ofrendaron sus vidas para que hoy nosotros los honremos y no callemos ante las injusticias.
Cómo poder negarme a realidades manifiestas que atormentan a la mayoría del pueblo: verdades que golpean a diario nuestras puertas; la inseguridad, los precios, la destrucción de nuestro medio ambiente, cuando se está destruyendo nuestra propia hábitat, nuestra propia Casa Grande, de que el sector político se convirtió en la nueva casta oligarca.
El espejo refleja mi imagen, me devuelve un dibujo que va cambiando día a día y me anuncia que algo se va opacando, va perdiendo sus luces…pienso, qué será?
Ya estoy viejo, como dice la canción, para callar y temer de escribir lo que siento. En mis casi cincuenta años, mi vida ya “cruzó el río”, ya estoy por encima del Bien y del Mal, hice, aprecié, formé y también amé…!!!
Las generaciones que nos siguen, nos están observando, no podemos mostrarles debilidad ni agachadas; por mi parte les muestro “libertad de expresión” y estudiar que es el único camino que les dará la llave hacia la verdadera Libertad.
Qué miedo podría tener de ser la “voz de los que no tienen voz”, miedo me da el silencio, miedo me da observar y arrodillarme…ayer tarde me he mirado en el espejo, pues sentía por mi faz curiosidad…
– El autor pertenece a Conciencia Ambiental Tucumán