Todavía hay ecos y rémoras del resultado electoral del día domingo, del claro y holgado triunfo de la dirección oficial y gubernamental en la Argentina con más del 50% de apoyo a la reelección presidencial de Cristina Fernández el próximo 23 de octubre.
Prácticamente todos los discursos de los perdedores son de resignación, algunos necios como Eduardo Duhalde, por ejemplo, que sigue diciendo que él va a competir con el porcentaje que tiene en octubre con aspiraciones de ganar en segunda vuelta, algo que resulta absolutamente impensable.
Otros, más conscientes de lo que les está pasando y más acostumbrados a las derrotas, han salido a explicar, pero cuando usted sale a explicar sin que le pidan, cuando usted sale a dar argumentos para aclarar, como decía Don Atahualpa Yupanqui, termina oscureciendo.
Por ejemplo, el abrazo de Fernando De la Rúa a Alfonsín diciéndole que se puede vencer al justicialismo es un salvavidas de plomo.
Esa foto le cuesta varios puntos menos de intención de voto a Alfonsín al ligarse a un perdedor como Fernando De la Rúa porque todo el mundo tiene todavía la imagen del helicóptero y los 40 muertos en la jornada del 19 y 20 de diciembre, que costó la salida de la desastrosa Alianza de la dirección del gobierno. Alianza de la cual González Fraga, el actual compañero de fórmula del hijo del ex presidente Raúl Alfonsín, no era ajeno porque él había sido en esos tiempos asesor y después pasó automáticamente al ostracismo por unos años, a dedicarse a la consultaría privada, a su trafico de influencias.
Y ahora aparece como un representante del estado financiero para integrar la fórmula con Alfonsín.
Pero…
¿Qué dice González Fraga que lo pinta de cuerpo entero como un perdedor por no tener una propuesta alternativa que mejore el rumbo de la economía que tiene la Argentina? Para que no digan que mi comentario es tendencioso, les voy a leer lo que dice.
González Fraga -porque en definitiva es él el que está diciendo esto- le adjudicó el gran apoyo logrado por la señora Cristina Fernández a la buena situación económica.
Entonces uno se pregunta ¿Cómo? En los discursos de campaña era que nos íbamos al horno, que el precio de los comodities era transitorio, que el endeudamiento argentino no lo permite, que la inflación, que la situación económica era pésima.
Los discursos de campaña de la oposición eran esos.
Ahora sale González Fraga a decir que el triunfo de la señora es porque hay una buena situación económica en el país, lo está diciendo un economista de la oposición.
Él dice que hay que aprender a leer los resultados y explica por qué la gente vota a la Presidenta para una reelección y dice: “En los electores más altos”– se refiere a los de más altos recursos- “la economía les permite evolucionar bien en sus empresas”. Esto, les repito, lo está diciendo un economista de la oposición.
Quiere decir que las empresas están evolucionando bien con el sistema económico y tienen miedo de cambiar.
No González Fraga, ahí ya la embarró.
No tiene miedo de cambiar, el empresario no quiere cambiar.
Si le va bien no quiere cambiar, no es que tenga miedo.
Si usted en su empresa le va bien, a usted en esta radio le va bien, por qué va a cambiar la programación, por qué va a cambiar los locutores, por qué va a cambiar los periodistas, si a usted le va bien.
No tiene que reestructurar nada, no es verdad que los empresarios tengan miedo, los empresarios están chochos con el plan económico. Después dice González Fraga, en la sumatoria mental que él hace de cómo llega al 50% la señora: “Hay 9 millones de jubilados”, da por sentado que los 9 millones de jubilados la votaron a Cristina Fernández, él da por sentado que los jubilados están bien, según su parámetro.
Agrega que “hay 5 millones de beneficiarios de planes sociales”, está mintiendo, no es cierto, son tres millones doscientos cincuenta mil los planes sociales que hay vigentes en estos momentos.
No es verdad que son 5 millones.
Luego señala dentro de la sumatoria de votos a la Presidente a “la masa salarial que ha tenido mejoras salariales y puede seguir consumiendo”.
Está hablando de éxitos en la economía, lo que un golpista de la talla de Mariano Grondona llama “viento de cola” para restarle méritos a la estabilidad económica que relativamente el estado argentino tiene.
También dice que “los argentinos ven la economía por el espejo retrovisor”. ¿Qué está queriendo decir? ¿Que no ven para adelante? Se supone que usted va en un auto y mira la economía por el espejo retrovisor y no ve cómo va a chocar cuando usted ve adelante.
Esto es para que la gente se de cuenta cuál es el pensamiento de estos liberales que han formado parte, en algún momento, de un golpismo en alguna parte de su vida.
Ellos piensan que la gente que vota así no sabe nada, son miopes, ven por el espejito retrovisor y no están viendo la realidad de la economía.
¿A La realidad de la economía quién la ve? Él.
González Fraga es el único que ve claro, los demás miramos el espejito retrovisor.
“Y no ve” -dice González Fraga- “que la situación puede cambiar en 18 o en 24 meses”.
Sí, la economía puede cambiar mañana, pasado, dentro de 18 o dentro de 24 meses.
La gente vota porque está haciendo la elección hoy.
Él está vaticinando una ruptura escatológica y dice, para terminar de oscurecer sus pensamientos, que la oposición no puede transmitir los problemas que verdaderamente tiene la Argentina, que ha inyectado una gran cantidad de dinero por el clientelismo político.
Lo cual es cierto, y en toda elección pasa y él haría exactamente lo mismo.
Esto es algo clarísimo que le ocurre a la gente cuando no tiene argumentos.
Los abogados siempre que perdemos un juicio y tenemos que hacer una apelación, y nos han ganado bien, cuando nos sentamos a hacer la apelación , nosotros decimos: “Cuando no hay nada que decir, hay mucho que escribir”. Porque cuando uno no tiene argumentos tiene que empezar a inventarlos.
Es lo que ha hecho González Fraga.
Y remata, en su desconcierto, diciendo, escuche bien, que va a mantener la candidatura de la UDESO, la Unión para el Desarrollo Social, que lleva con Alfonsín, porque van a apuntar a la elección legislativa.
Lo que está diciendo González Fraga es que están totalmente resignados, que no pueden competir en octubre y sólo aspiran a meter uno que otro diputado o alguno que otro éxito en el plano legislativo.
Ya han cambiado el discurso y le están diciendo que no le den cheque en blanco a la Presidenta y que la gente en octubre tiene que votar a la oposición para poner legisladores que hagan un equilibrio.
González Fraga está totalmente desorientado, pobrecito.
Y dice que la oposición no pudo convencer al electorado de que era posible un cambio sin poner en riesgo la situación económica.
Esto es muy simple, si usted tiene en su empresa un gerente que economiza costos, tiene resultados, maneja bien a los empleados, no tiene conflictos sindicales, sabe manejar las ventas, las compras, el stock, y anda bien, para qué va a cambiar el gerente.
La gente pensó exactamente igual.
Estamos en un rumbo estabilizado, relativo porque realmente va a haber que hacer un ajuste, porque eso es así y porque la inflación sigue.
Este ajuste va a haber que hacerlo sí o sí.
Pero la gente dice, yo, con el rumbo que tiene la economía de estabilidad, voto que no quiero cambios.
No me voy a arriesgar con Duhalde, porque me acuerdo del corralito y que me afanaron los dólares.
No me voy a arriesgar con González Fraga que fue Presidente del Banco Central de La Rata *.
No voy a arriesgar por Alfonsín, que nunca administró ni un quiosco, como dice Luis Juez.
La gente no quiere arriesgar.
¿Por qué? Porque está relativamente estabilizada, la gente que está incluida en el sistema económico está estabilizada.
González Fraga: no aclare que oscurece- le diría Don Atahualpa si lo tuviera al frente. Son puntos positivos las medidas de gobierno, la redistribución del ingreso, nadie puede negar eso.
Y la gente que antes no tenia ni zapatillas y comía salteado -porque gente como González Fraga decía “para que no haya inflación hay que ampliar la economía”.
Y entonces retira circulantes del mercado y no hay desarrollo.
Entonces yo digo, qué bonito tengo un índice de inflación bajo, pero el índice de desarrollo se me viene a pique también.
Entonces, son muy claras las dos posiciones economicistas que hay. La Presidenta dice: “Mientras yo tenga desarrollo, no me importa tener inflación”, algo que tiene sego de irresponsabilidad, pero que es una fórmula práctica que le dio el 50%. González Fraga dice, siempre dijo, y lo sigue sosteniendo: “Hay que ampliar la economía”.
¿Qué quiere decir? Hay que sacar circulantes del mercado sin respaldo provincial para bajar los índices de inflación.
Pero eso lo hace ajustándole el cinturón a los que están abajo.
Y la gente eso no le va a dar.
González Fraga fracasó con todo éxito, ya se va a tener que acomodar. Hay muchas cosas que ajustar en el gobierno nacional, pero usted no va a empezar de cero con Gonzales Fraga cuando ya anduvo parte del camino.
Entonces ahí está el 50% de los votos.
* La Rata: Ex presidente Carlos Saúl Menem