Los inquilinos esperan la reglamentación de la ley, que deberá fijar el mecanismo para acceder al beneficio. Desde AFIP aclararon que se exigirá un comprobante que demuestre que la operación se realizó en blanco, lo que implicaría la emisión de facturas en lugar de los habituales recibos informales.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) exigirá un comprobante en blanco para que los inquilinos puedan deducir parte del alquiler del pago del impuesto a las Ganancias.
La nueva ley contempla que se pueda deducir un porcentaje de la renta de los inmuebles, si se trata de viviendas únicas.
El dictamen indicaba que se podrá deducir «el 40% de las sumas pagadas por el contribuyente, o del causante en el caso de sucesiones indivisas, en concepto de alquileres de inmuebles destinados a su casa habitación, y hasta el límite de la suma prevista en el inciso a) del artículo 23 de esta ley, siempre y cuando el contribuyente o el causante no resulte titular de ningún inmueble, cualquiera sea la proporción».
Se trata de un tope de $4.330 mensuales para una eventual deducción. Una vez que la ley se promulgue, en la reglamentación del organismo tributario figurará el mecanismo para poder acceder a dicha deducción.
Y desde la AFIP aclararon que, como mínimo, se exigirá un comprobante que demuestre que la operación entre el propietario y el inquilino se realizó en blanco, lo que implicaría la emisión de una factura, en lugar de los habituales recibos informales que con frecuencia se entregan en forma mensual.
Mercado en blanco
La idea es que, a cambio de la deducción, se blanquee el mercado de alquileres, como debería ocurrir con el resto de la economía.
El conflicto que potencialmente se planteará es que el propietario, si declara que está alquilando un inmueble, debe pagar impuesto a las Ganancias y, si se trata de un local comercial, también tiene que abonar el IVA.
El tributarista César Litvin afirmó que «seguramente habrá que tener un contrato con todas las formalidades y llevará a que mucha gente pida recibos; será un control cruzado».
«Lo bueno es el mecanismo de actualización automática, ya que todos estos topes se van a ir actualizando», expresó.
Según, Gervasio Muñoz, de la Asociación de Inquilinos, «hay una situación que habrá que resolver y es que en todo el país se sellen los contratos de alquiler y que te den una factura».
«Si bien vemos bien que se deduzcan los alquileres de ganancias, habrá que ver cómo se deduce. En la Ciudad de Buenos Aires el 95% de los alquileres está en negro y nadie tiene registro de quienes son propietarios e inquilinos», agregó el especialista a La Nación.
En comunicado, la asociación expresó que «la implementación de esta deducción solo podrá ser llevada adelante si se legaliza el mercado de la vivienda».
«Es necesario tener un sistema claro y legal de firmas de contratos y de facturación del canon locativo. Son condiciones fundamentales para que la deducción del alquiler en ganancias no sea sólo letra escrita», señaló la asociación civil.
En tanto, Armando Pepe, titular de la inmobiliaria que lleva su nombre, aseguró: «Me parece perfecta la deducción de los alquileres y no va a ser difícil porque no hay contratos en negro. No va a ayudar a la persona de menores recursos, pero sí al que paga alquileres importantes».
– iProfesional