Si de algo se jacta este gobierno conservador, es haber profundizado la pobreza, a pesar de sus falsas promesas, constituyendo en la actualidad el pico de bolsones de la marginalidad.
Ser pobre, en estos tiempos de máximo consumo y de hegemonía de las leyes del mercado, es una situación vergonzante y sobre todo de anulación de oportunidades, precisamente el objetivo de este grupo gobernante. Desde la asunción del gobierno de Macri la pobreza no se limita a un grupo social concreto sino que se va extendiendo al conjunto de la población, convirtiéndose en una amenaza para el bienestar de los individuos y la cohesión social.
El norte profundo, en su horizontalidad geográfica, constituyen los picos de penuria social, con la mayor tasa de riesgo de pobreza y exclusión social y en la que se muestran con intensidad los efectos de esta sociedad dual, en la que una parte de la población mejora o al menos permanece estable frente a cualquier eventualidad, y otra se encuentra amenazada por la posibilidad de ver modificada su posición social a causa de su fragilidad económica y del debilitamiento de sus redes sociales, con el creciente riesgo de fragmentación social. Atender a estas personas y familias vulnerables se convierte en un derecho para unos y una obligación de los gobernantes, reconociendo de esta manera la dignidad humana de todas las personas.
Dentro de los márgenes políticos de este gobierno de Ceos, es una misión imposible, porque en su planificación económica no está, ni remotamente la inclusión social, muy por el contrario se valen de estas estratificaciones profundas para sus goces personales. Nada más placentero para el poder que regocijarse con los carenciados y justificar, gozosamente, la distancia de las posiciones, en tanto que a los destinos de exclusión se los presenta como naturales.
En boca de un propio intelectual de su palo, nos ilustra definiendo al déspota como: ”No ama ni le alcanza lo mucho que ya tiene. Lo asaltan accesos de furia. Grita fuerte e insulta, grosero. Su cabeza está nublada por una incesante paranoia, que no le da reposo. Es incapaz de escuchar. No soporta ninguna derrota. No admite errores. Su superyó es destructivo, por lo cual es impotente para comprender al otro que, si no se doblega, lo acusa de enemigo. Le hierve el anhelo de venganza contra quienes considera un obstáculo para sus ambiciones, aunque antes lo hayan servido como súbditos obedientes.” Marcos Aguinis: Psicología del Tirano. El que quiera puede consultar este delator artículo.
La lógica del poder
El que conozca a Lacan, reconocerá las líneas de Oscar Masotta. No hay poder sin relación del poder con el goce. Lo que en el poder queda prohibido es el goce del otro (entiéndase las opciones de placer/por ej. tener un celular, de ahí para adelante)…aunque es cierto que de cualquier manera el otro goza, masoquísticamente. En el discurso del poder, en la lógica de poder, este goce del otro queda ocultado. Prohibido y ocultado, razón por la cual tanta gente ama a los amos… En la Democracia auténtica popular, el goce no se prohíbe, se pretende abrir la capacidad comunicativa comunitaria, devolver la palabra a los que no tuvieron voz durante mucho tiempo ( por ej. en estos tiempos de desigualdad y Ya no necesitarán las movilizaciones). Se favorecen e incentivan los centros vecinales-barriales-clubes- sociedades de fomento, con todas las precauciones, para que los avivados no usufructúen estas iniciativas populares.
Por lo demás la Democracia deja al goce sobre la tierra. Los amos (los tiranos) para el futuro, lo anudan al castigo y al látigo, lo permiten si uno se redime, si paga sus culpas. La Democracia participativa nada tiene que ver con esto, es por ello, que mucha gente “sin clase definida” (aquellos cuyas ensoñaciones están más cerca de la clase dominante), nada quieren saber de la Democracia. Son ciudadanos con alma de esclavos. Estamos ante la relación de dominación con todas sus variantes.
El discurso del amo es centralista, ignora el deseo, lo prohíbe, excluye el goce del otro; o bien sólo lo incluye como panacea de la relación misma de dominación (¿los resultados se verán en el futuro? ¿Cuáles?). Es el masoquismo de aquellos que desesperan por formar parte de la clase dominante. Para la Democracia auténtica, todos deben tener la oportunidad de alcanzar las ensoñaciones reservadas, toda vez que estas no dañen los intereses colectivos. Nos estamos refiriendo, específicamente, a los derechos de salud, de educación pública y bienestar general, en todo el espectro que ellos comprenden.
Para el cierre
Para finalizar este punto de vista, remarquemos que la crueldad Macrista se basa en obturar el goce (el placer) de la mayoría de la población empujada hacia la mancha de la pobreza, en todas sus desproporciones (y disimilitudes). Es “el todo Pá mí” del avaro, que en la sintomatología sicoanalista está fijada a la etapa anal, que traducido a un lenguaje vulgar, serían los históricos “cagadores”, aquellos personajes sociales que la pretenden TODO para sí, sin lugar para el OTRO, para el prójimo, cuidada enseñanza de la Religión contemporánea que predica la caridad, sin compartir, ellos, en absoluto.
La realidad es un campo extenso y práctico de enseñanza de los ciudadanos, que votaron en su credulidad, masivamente, a unos fabuladores “fenomenales”, que les mintieron a mansalva. Muchos están convencidos de que este rumbo es, extremadamente, injusto y, que en la próxima oportunidad no se dejaran llevar tanto por los “cantos de sirenas” y pensarán mínimamente los personajes que nos gobernarán.- ¿Se cumplirá ésta condición?
– Notas que pueden resultar de su interés:
La pobreza en Argentina baja al 25,7%, casi cinco puntos en un año
https://elpais.com/internacional/2018/03/28/argentina/1522256797_120400.html
Macri informó que se redujo la pobreza en Argentina
https://www.elliberal.com.ar/noticia/406467/macri-informo-se-redujo-pobreza-argentina
