Pensando en la gravedad de La Pandemia Porcina, se me vino a la mente la forma que tienen de enseñar prevención el Estado Nacional y no pocas veces el Provincial.
La gente de mi pueblo está totalmente psicótica con el tema de la “muerte porcina”, es tan ambigua y general la información que cualquiera que se moquea ya corre por una guardia hospitalaria o por el médico particular o a la clínica privada que más le guste. Se quería evitar el pánico desde la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero la verdad que el pánico invade la conciencia de muchos de nosotros.
Hay personas que ante cualquier noticia sobre un ser conocido que está resfriado o engripado, evita su encuentro por el temor al contagio manifestándose así el temor a la cercanía, al afecto, al contacto con el otro y como ejemplo vemos brillar los barbijos ridículamente en el rostro de tantos.
Se mediatiza el tema y se sacan provecho por distintos lados. Es buena temporada para los Bioquímicos, Clínicos, Clínicas, Empresas de descartables, Farmacia, Laboratorios ¡y hasta para las pinturerías con las ventas de barbijos!.
No deja de extrañar este proceso de información y la especulación turística de por medio, ¿a quién se le tira más H1N1 para ganar la plaza de invierno? De todas maneras habría que hacer números, ¿Qué conviene más? ¿Una farmacia o clínica o un hotel en estos momentos?
Los números de los intereses económicos marcan los ritmos sociales sin ningún tipo de pudor y realmente la víctima sigue siendo la persona común, la cual inocente en su discernimiento, algo iluso en sus criterios, piensa en sintonía con los medios de comunicación masiva y así se deja llevar por la mente de otros.
Las campañas de concientización para nada son despreciables, lo que es despreciable es la forma en que se trata la cabeza y el afecto de las personas influyendo negativamente en su voluntad. Da toda la sensación de que se toma a las gentes por taradas.
Tampoco es despreciable la Pandemia, que si bien no es una peste que mata masivamente, es una gripe más que se suma a la conocida por todos, duplicando los casos de esta enfermedad y provocando algunas muertes de manera indirecta.
La verdad que no faltan preocupaciones de todo tipo y esta enfermedad se suma a la angustia de los ciudadanos que en definitiva produce una alteración en su anhelo por vivir mejor… vivir mejor parece cada vez más lejano.
