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jueves, marzo 28, 2024

La vieja del parque San Martín

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Esta ”vieja del parque” es una mal parida, con el perdón de quienes fueran sus progenitores…

Corre el rumor entre los adolescentes y pre de a quién ver ante la necesidad de hacerse un aborto porque fueron sorprendidos por la vida de un nuevo ser en la matríz de las nenas: verla a la vieja del parque, por ahí debajo de algún árbol, en algún asiento de entre los juegos de los niños vivos y que se disponen a ser felices en la vida que les espera, ella está esperándolas para salvarlas de tremenda tragedia, haber quedado embarazada.

Sin padres, con malas compañías, mal aconsejadas, las chicas acuden a esta monstruosidad de mujer para provocarse un aborto. ¿Cómo se lo realizan? Es muy sencillo: con cuatro pastillas se mata al bebé en el seno de las mamás y se realiza la posible expulsión del feto intentando forzar el aborto. El costo es según la cara y la vestimenta de los jóvenes pero no menos de cuatrocientos pesos, las indicaciones son gratis. Hacen número y ante un “médico” abortista es negocio ya que estos menos de cinco mil, no cobran.

jpg_vieja.jpgCuando se detiene un embarazo por la vía natural, los obstetras le llaman “ayudar a la naturaleza” para la expulsión del feto que no prosperó al colocar un par de pastillas en el útero de la mujer y de esta manera se llegaría a un legrado liviano en el mejor de los casos. Las pastillas valen ochenta pesos (no pocas veces se venden de manera exclusiva en alguna clínica de la ciudad) y el plus profesional unos quinientos más el aporte de la obra social llegado el caso de legrar que en definitiva casi siempre se llega. Este sería un camino normal y todo legal por la vía privada.

¿Cuál es el peligro de un aborto ante el detenimiento del embarazo por la razón que fuere? La infección que se podría generar por los tejidos muertos que el bebé deja en el interior del útero materno. Las infecciones todos los días y de infinidad de manera se llevan miles de vidas entre los que la contraen.

Las novísimas mamás, sin saber lo precioso que es colaborar con la vida porque tampoco se les enseñó el verdadero valor y la finalidad de la dimensión sexuada de la persona humana, se exponen a contraer estas infecciones que en la gran mayoría de los casos llevan a la muerte.

Así llegan a los hospitales públicos y privados chicas cargando con la muerte de su bebé y la suya propia. Infectadas, con los síntomas propios de fiebre y en no pocos casos de abundante hemorragia vaginal, y ante la urgencia del caso los médicos de la guardia se hacen cargo de la situación límite en que está la joven y se disponen a legrar y/o aspirar los restos del bebé y de hecho combatir la infección hasta donde se pueda, sin dejar de constar que con anterioridad fueron ejecutadas “maniobras previas”. Claro está no hacen actividad legal, y demasiado con la parte de salud que les corresponde y más tratándose del ámbito público.

Sacar los restos del feto no es gran problema: quirófano, anestesia, raspaje y aspiración; el problema es combatir la infección y es aquí donde se quedan las jóvenes mamás sin haber podido ni siquiera vivir la adolescencia como corresponde. Mueren víctimas de la ignorancia, de los disvalores, de médicos y pseudo-médicos abortistas, de la ausencia de los padres, de las madres descuidadas y de tanta porquería que se les mete en la cabeza a las personas desde la infancia…

Maldita vieja del parque: tu última víctima tenía sólo dieciséis años y tuvo la valentía de denunciarte ante su doctora antes de morir generando el contra rumor al menos. ¡Ojalá te pudras en el infierno! porque por aquí, en esta vida, el castigo no alcanzaría.

2 COMENTARIOS

  1. La vieja del parque San Martín
    Lucía: creo que es todo un acierto cuando dices ” conocer y concientizarse” sobre la realidad cotidiana de los embarazos no deseados, por parte de los chicos y chicas, y por parte de los padres (si es que están) para darse cuenta claramente lo descuidado que dejamos a nuestros hijos y para colmo a merced de todas estas personas que se abusan de estas situaciones.

    Quizás sea oportuno, ante tanta tragedia que muchas veces creemos normal por la generalidad de los casos, volver la vista a las cosas más importantes como es cuidar a nuestros chicos, conociendo donde están, qué hacen y con quién están.

    Las preocupaciones mal jerarquizadas y nuestros egoísmos nos llevan a vivir estos dramas y a dar lugar para este tipo de abusos donde nada importa la vida, ni de las pequeñas mamas, ni las de los bebes en gestación.
    – Atte. Hugo Luis Daher

  2. La vieja del parque San Martín
    Una amiga mía tuvo que hacerse un raspaje en el hptal nuevo, no por aborto sino por una condición en la que se le forman tejidos intrauterinos. Esa noche compartió habitación con otras cinco chicas, todas estaban por legrados, todas por abortos ilegales mal realizados, todas menores que mi amiga. Ella tenía 22 años en ese momento. Es una realidad cotidiana que la gente tiene que conocer y sobre todo concientizar a sus hijas.

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