En Entre Ríos, el presidente municipal (es la denominación oficial del cargo) de la pequeña localidad de Colonia Avellaneda, que tiene apenas 5000 habitantes y que forma parte del Gran Paraná, se convirtió en el funcionario mejor pago de toda la provincia. Cobrará 74 mil pesos por mes, pero en el mismo presupuesto que autoriza su aumento no se prevé que ocurra lo mismo con los salarios del personal municipal.
Muchos de los resabios que el kirchnerismo dejará, serán muy difícil de erradicar; un ejemplo de ello es el intendente (FpV) de la pequeña localidad de Colonia Avellaneda, Edgardo Dellizzotti, que logró un aumento de sueldo que lo ubica como el funcionario mejor pago de toda la administración pública de Entre Ríos. Solo lo superan los sueldos de los tres jueces integrantes del Superior Tribunal de Justicia.
Dellizzotti será presidente municipal de Colonia Avellaneda por cuarta vez desde que la localidad fue categorizada como municipio, pero antes, cuando aún era una Junta de Gobierno, Dellizzotti ya la había presidido, por lo que en realidad el que inició el 10/12 sería su quinto mandato. Por ello cobrará la suma de $ 74.000 mensuales. En sus primeras presidencias municipales, Dellizzotti decía ser radical, para luego mutar al kirchnerismo.
Colonia Avellaneda es un conglomerado ubicado en las afueras de la capital entrerriana y forma parte de lo que acá se conoce como Gran Paraná, integrado además por San Benito y Oro Verde. Hasta no hace más de quince años ese lugar era solo una zona de quintas, pero el crecimiento de Paraná hizo que cada vez se fuera poblando más y más, hasta que Dellizzotti logró que se le diera el rango de municipalidad.
Dellizzotti negoció para ello que en ese lugar se instalaran los proyectos de construcción de viviendas más importantes que se hayan realizado en Entre Ríos hasta la fecha. Mil doscientas viviendas se llevan construidas en Colonia Avellaneda, lo que hizo que la población creciera exponencialmente. Según el Censo 2010 residían allí 3083 habitantes, pero ese número en la actualidad debe estar cercano a los 5.000.
A pesar de ese crecimiento la localidad carece de servicios acorde con ese desarrollo, algo que a Dellizzotti nunca le interesó demasiado. El intendente ha permitido al mismo tiempo que en el ejido municipal se instalen empresas de importantes dimensiones que complican aún más la situación. Los habitantes de Colonia Avellaneda, al contrario de los de las otras dos localidades del Gran Paraná, son en su inmensa mayoría empleados de la administración pública provincial, que todos los días se trasladan hasta Paraná en medios propios o en pésimas condiciones en los dos medios de transporte público que disponen: Un destartalado tren que no siempre funciona y dos líneas de colectivos.
En tanto aquél simpático y humilde dirigente radical de fines de los años noventa, es hoy un portentoso y millonario dirigente peronista, cuyo patrimonio, desde que logro en el año 2005 que Colonia Avellaneda se transformara en municipio, ha crecido mucho más que la localidad que preside.
Dellizzotti es otro más de los que integran el club de la “década ganada”.
– Urgente 24
