«Dedico este premio a todos aquellos que en Italia están resistiéndose a la aprobación de la ley mordaza». Roberto Saviano no dio rodeos ayer en su discurso de agradecimiento por la concesión del VII premio Tomás y Valiente por la defensa de las libertades y los derechos fundamentales.
El escritor italiano -amenazado de muerte por la Camorra por su libro-denuncia Gomorra- clamó contra la ley que el Gobierno de Silvio Berlusconi lleva meses impulsando y que constituye una gravísima amenaza para la continuidad de la lucha al crimen organizado.
«La situación en Italia es muy delicada. Esta ley restringirá la capacidad de los fiscales de utilizar las interceptaciones telefónicas en sus investigaciones», alertó Saviano tras recibir el premio de las manos de Luis Moreno Ocampo, fiscal general de la Corte Penal Internacional, institución galardonada en la anterior edición del premio junto con el ex presidente checo Václav Havel.
El escritor italiano (Nápoles, 1979) puso el dedo en una llaga que está desestabilizando la coalición gubernamental. El sector liderado por Gianfranco Fini se resiste a aceptar una norma que, propuesta en nombre de una mejor defensa del derecho a la privacidad, reduce los instrumentos de lucha contra un cáncer que Italia no logra extirpar.
Decenas de ayuntamientos del sur del país han tenido que ser disueltos por infiltración mafiosa en la última década; 35 de los 50 consejeros regionales de Calabria fueron condenados o investigados en la legislatura que acabó esta primavera.
Saviano aprovechó la ceremonia -organizada por la Fundación Instituto de Cultura del Sur y celebrada en una sala del Ayuntamiento de Fuenlabrada- para señalar que España está llena de células criminales de organizaciones procedentes de Italia, Rusia y otros países del este europeo.
«La burbuja inmobiliaria cuyo estallido ahora hace sufrir a España fue en buena medida alimentada por el blanqueo de capitales de estas organizaciones, que invirtieron aquí en España», apuntó el escritor, quien destacó cómo una presencia de baja intensidad, sin crímenes de sangre, ayuda a estas células a pasar inadvertidas ante la opinión pública. «Que la gente no lo perciba no significa que no estén».
Saviano mostró su apoyo al concepto clave del discurso pronunciado anteriormente por Luis Moreno Ocampo: la exigencia de desarrollar una nueva y más intensa cooperación internacional frente al crimen organizado. «Las mafias ya son internacionales, pero la lucha contra ellas sigue siendo fundamentalmente nacional», había alertado Ocampo.
Saviano concluyó agradeciendo un apoyo que rompe la mayor amenaza para él: la soledad y el olvido.
«Agradezco este premio y vuestra cercanía. El primer ministro de Italia me acusa de difamar a mi país. Pero, utilizando palabras de Saramago, sigo convencido de que las palabras pueden ser una manera de cambiar el mundo».
– Andrea Rizzi – El País – Madrid – 26/06/2010
«Italia es un país malvado para vivir»
Entrevista a Roberto Saviano
– Lola Galán
Un dispositivo de seguridad espectacular protege al escritor Roberto Saviano, amenazado de muerte por la Camorra napolitana, allá donde va.
En el lujoso hotel de Madrid donde se celebra la entrevista, hay al menos siete agentes, en ropa civil. Saviano llega vestido con vaqueros y chaqueta oscura, y un aire mucho más juvenil del que cabría pensar viendo sus fotografías.
El éxito abrumador de su novela Gomorra, sobre la Camorra napolitana, publicada en 2006, cambió la vida de este napolitano de 30 años. Se vendieron cinco millones de ejemplares en el mundo, pero cabe preguntar si no ha sido muy alto el precio pagado.
– «Es el precio del éxito, en realidad. Hay muchos libros sobre la mafia, algunos muy buenos, pero la diferencia con el mío es que ha tenido un éxito enorme. De lo contrario, no habría pasado nada. A veces pienso que estoy pagando un precio muy alto, pero no por mi vida privada, porque yo sigo escribiendo. Me interesan las historias, cuidar el estilo literario, no quiero convertirme en un mafiólogo ni en un símbolo que recorre el mundo para dar testimonio. Tampoco por el miedo a morir, porque se habla de mi muerte públicamente desde hace tantos años que ya la veo como algo que no me concierne. De lo que tengo miedo verdaderamente es de seguir viviendo así».
Saviano vive en paradero desconocido desde que le amenazaron los camorristas, y el escritor no ve cambios a medio plazo que puedan mejorar su situación.
– «Estoy pensando en volverme a instalar en el extranjero. Creo que no tengo muchas posibilidades en mi país. Los españoles y los franceses nos ven como el país de las mujeres hermosas, de las colinas de Toscana, pero Italia es un país malvado para vivir en él, un país feroz».
¿Por qué?
– «Porque lleva demasiados años sin tener derechos garantizados.
Al final, lo que ocurre es que para la gente el enemigo no es el sistema, sino el individuo que ha conseguido lo que uno no tiene. El desocupado odia al que trabaja, pero no da un paso para cambiar las cosas. Si tienes trabajo, la gente se pregunta quién te habrá recomendado. Si estás en la televisión, piensan ¿quién le habrá enchufado? En el 80% de los casos es así. O sea que se sienten legitimados para seguir pensándolo. No es algo genético, es el funcionamiento del país. Es su frustración». Quizás el sistema mafioso ha penetrado demasiado hondo en la sociedad.
– «Europa entera se está haciendo más mafiosa cada vez. Ya no hay un camino común, una economía común a la que proteger de la influencia de las mafias. Con la crisis económica se ha bajado mucho la guardia, han entrado en juego las mafias rusas, y toda la potencia del narcotráfico ha entrado de lleno en el sector bancario, por lo que ellos mismos dicen.
El gobernador del Banco de España ya dijo que este es el país de Europa con más billetes de 500 euros, que son los billetes que usa la mafia. Todo esto tendría que ser objeto de un debate cotidiano, y no lo es».