Con un decreto de necesidad y urgencia, la presidenta Cristina Kirchner dispuso que los desocupados y trabajadores que no están registrados en la economía formal reciban una asignación mensual de 180 pesos por cada uno de sus hijos menores de 18 años, en un intento de neutralizar las críticas de la oposición por la falta de políticas contra la pobreza.
– Mariana Verón – LA NACION
«Esto constituye un paliativo para aquellos sectores que todavía no tienen la posibilidad de un trabajo decente», expresó la Presidenta ayer al mediodía, en un acto en la Casa Rosada que se transmitió por cadena nacional y contó con la presencia de gobernadores, legisladores y organizaciones sociales aliadas al kirchnerismo. «De ninguna manera esto será el fin de la pobreza», agregó.
El subsidio, que el Gobierno presentó como una «asignación universal para la protección social», llegará a unos 6 millones de chicos y demandará 9965 millones de pesos que aportará la Anses, organismo que, además, tendrá a cargo su instrumentación.
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La asignación la cobrarán los padres o tutores, que deberán acreditar la asistencia de los menores de 18 años a la escuela y cumplir con la obligatoriedad de los controles sanitarios.
Para eso, la Anses dispondrá de un sistema bancarizado, según se anunció ayer en la Casa Rosada, que le otorgará al beneficiario todos los meses, desde el 1° de noviembre, 144 pesos, lo que representa el 80% del total del aporte.
El restante 20% será depositado por el organismo en una caja de ahorro en el Banco Nación, que se creará para quienes reciban la ayuda. Esa suma se podrá retirar sólo una vez al año, siempre que el padre pueda acreditar que sus hijos cumplieron el año lectivo anterior. Serán 432 pesos en total, que quedarán retenidos por el Estado de manera transitoria.
La Presidenta firmó minutos antes de la presentación oficial, organizada de apuro en menos de 24 horas, el decreto 1602, con carácter de urgencia, para evitar que la discusión sobre los planes para paliar la pobreza en el Congreso derive en duros cuestionamientos al Gobierno.
Ante el inesperado anuncio, la oposición reaccionó con críticas: la mayoría de los bloques políticos del Congreso se mostraron de acuerdo con la idea de dar un auxilio a los hijos (como ellos habían pedido), pero cuestionaron que se hubiera hecho por decreto y que no se hubiera extendido el beneficio a todos los hijos, para evitar así las «prácticas clientelares». De todos modos, varios dirigentes, como Elisa Carrió (Coalición Cívica), resaltaron que la Presidenta había hecho el anuncio motivada por la presión de las otras fuerzas políticas.
La asignación solamente cubrirá hasta cinco hijos dentro de un grupo familiar y hasta que cumplan los 18 años.
Quienes quieran acceder al beneficio deberán acreditar que sus sueldos en la economía informal no superan el mínimo vital y móvil, hoy en 1500 pesos, según lo establece el artículo 2 de decreto presidencial.
En este punto quedaron dudas respecto de la aplicación debido a la complejidad para determinar que efectivamente el beneficiario cobre informalmente menos del salario mínimo.
Además, el plan reducirá hasta su eliminación los planes sociales que actualmente existen, como el Familias o el Jefes y Jefas de Hogar, que otorgaban 249 pesos en promedio el primero y 150 pesos el segundo. Como con el nuevo plan el cobro de los 180 pesos es por cada hijo, superará ampliamente los actuales montos de los programas sociales. Se supone que no habrá lugar para que los beneficiarios se resistan al traspaso.
También recibirán el beneficio quienes estén inscriptos como «monotributistas sociales», que son quienes están dentro de las cooperativas de trabajo que formó el Gobierno para instrumentar el plan de empleo que lanzó en agosto pasado, que ya recibían 45 pesos por hijo.
«Que quede claro: el objetivo de esta presidenta va a seguir siendo pelear por el trabajo decente, por agregar valor a nuestros productos, por tener cada vez más industrias, más empresas, más comercios», exhortó Cristina Kirchner y levantó los aplausos en el colmado salón de las Mujeres del Bicentenario, que ayer al mediodía volvió a vivir la euforia kirchnerista que parecía contenida en los últimos actos que allí se organizaron.
Reproches
La Presidenta tampoco se privó de hacer sus reproches a la oposición. En su discurso resaltó que el plan se ponía en marcha gracias a que el Estado había recuperado la administración de los fondos jubilatorios.
«A los que no nos acompañaron en el Congreso cuando decidimos que los recursos de los trabajadores volvieran a la administración del sector público les decimos: «Fíjense cómo podrían haber ayudado para que esto hoy se pueda llevar adelante»».
De paso, también se quejó de las propuestas de financiamiento que habían planteado otras fuerzas políticas como aplicar un impuesto a la renta financiera.
«Estoy absolutamente segura de que vamos a poder encontrar un punto de encuentro para dar respuesta a problemas estructurales no desde un eslogan, de desafíos, de insultos o descalificaciones, sino de ideas que puedan llevarse a la práctica», cuestionó la Presidenta.
Las claves del nuevo beneficio
– ¿Quiénes se beneficiarán con este decreto?
La asignación por hijo será dirigida para todos los menores de familias desocupadas o que trabajan en la economía informal y para los discapacitados menores de 18 años.
– ¿Cómo se accederá a este beneficio que dará el Gobierno?
Para acceder a los 180 pesos por mes el menor deberá ser argentino, hijo de argentino nativo o por opción, naturalizado o residente con residencia legal no inferior a los tres años. Deberá acreditar el DNI y un vínculo entre la persona que percibirá el beneficio y el menor.
– ¿Qué se les exigirá a los padres?
Hasta los cuatro años de edad inclusive se deberá acreditar el cumplimiento de los controles sanitarios y el plan de vacunación obligatorio. Desde los cinco años y hasta los 18 se deberá acreditar además la concurrencia de los menores a la escuela.
– ¿Qué pasará con el resto de los planes sociales?
El decreto no menciona la eliminación del plan Familias o el Jefes y Jefas de Hogar. Pero en el Gobierno dicen que paulatinamente este beneficio absorberá esos programas sociales.
– ¿Cómo se abonará el beneficio?
El 80% del monto se abonará mensualmente a los titulares por el sistema de pagos de la Anses y el restante 20% será reservado en una Caja de Ahorro a nombre del titular en el Banco Nación que se entregará mediante una tarjeta magnética.
– ¿Quién financiará el sistema?
El decreto faculta a la Anses a instrumentar, controlar y pagar el beneficio universal.
– ¿Por qué salió por decreto?
El Gobierno impulsó la medida por decreto para evitar el debate legislativo y que la iniciativa sufriera eventuales modificaciones.
– ¿Cuánto costará y desde cuándo se aplicará?
El beneficio será de $ 10.000 millones anuales y se empezará a aplicar desde diciembre.
