La Asamblea Provincial Docente dispuso un paro por 48 horas el jueves 26 y el viernes 27 de octubre, para ratificar sus reclamos y repudiar al gobierno al que acusan de destruir la escuela pública, deteriorar el salario y desconocer derechos de los educadores
A la Asamblea concurrieron alrededor de 90 maestros y profesores de la capital y del interior. Estuvieron presentes los delegados departamentales de Embarcación, Rosario de Lerma, Güemes, Metán y Tartagal.
La asamblea -convocada para las 15,30- arrancó a las 17,30 puesto que a ella habían acudido hasta ese momento sólo 50 docentes y se dudaba sobre si la reunión debía ser resolutiva o solamente informativa.
El informe que realizaron delegados de establecimientos educativos y representantes departamentales mostró -a través de una encuesta en la que se consultó a las bases- que no hay disposición entre los educadores para hacer un paro de tipo progresivo como el que se había dispuesto en la última Asamblea Provincial Docente.
Los porcentajes de adhesión a este tipo de medida fluctuaban entre un 10 y un 30 por ciento en la mayoría de las escuelas y colegios. En algunos casos se prefería una acción más contundente, en otros se proponía paro con asistencia y en general se percibía en las bases una renuencia a perder parte del salario con descuentos por un paro al que muchos no le encuentran posibilidades como medio para obtener satisfacción inmediata a las demandas que no fueron alcanzadas en la mesa de trabajo.
Finalmente se votaron las mociones y la reunión concluyó a las 20,30. Minutos antes se anunció que estaban robando el auto del delegado por Metán y vocero de la Asamblea Víctor Gamboa quien salió corriendo seguido por otros docentes. Pero se trataba del coche de un profesor de Güemes. Dos efectivos de la brigada -asignados al espionaje de la reunión- detuvieron a un hombre al que tenían inmovilizado en la vereda. «Es otra maniobra del gobierno para desmovilizar a los docentes», bromearon los asambleístas.
Ratifican demandas y repudian al gobierno
El sector de Tribuna Docente y los grupos más combativos denunciaron que la mesa de Trabajo fue una maniobra de distracción y desmovilización. Acusaron a los delegados de prestarse al juego. Otros recordaron que los delegados fueron a la mesa por mandato de Asamblea y que cumplieron el rol que se les asignó en el diálogo con el gobierno.
Había consenso de que se debe realizar una medida de fuerza la última semana del mes como mensaje claro de ratificación de las demandas (aumento al básico, eliminación de tickets y su pase al básico como efectivo, 82% para jubilados, respeto por la carrera docente, aporte por zona, transporte, mejoras edilicias) y de repudio a un gobierno al que se acusa de destruir la educación pública, deteriorar el salario docente, desconocer derechos de los educadores y reprimirlos en las manifestaciones.
Finalmente se aprobó un paro por 48 horas el jueves 25 y el viernes 26 de octubre, con una Marcha Provincial Docente el jueves en defensa de la educación pública y el salario de los educadores y de repudio al gobierno de Juan Carlos Romero.
Se instó a los delegados por establecimiento y por departamento a trabajar el paro y se aprobó el llamado a una nueva asamblea para el día sábado 13 con el fin de organizar y activar la medida de fuerza.
El martes 9 a las 19 horas se hará una reunión de delegados de capital en Urquiza 1936.
