La modernidad se distinguió, desde su nacimiento, por la continua interpretación entre la crítica y la creación. Las creaciones más altas de la edad moderna han sido críticas y la crítica ha sido creadora. Fusión de imaginación e ironía en El Quijote
Una mirada latinoamericana desde la crítica periodística cultural
“Nada le hace más falta a nuestros pueblos que el examen de conciencia ya que es el arte mas difícil y el más urgente. Aprender a dudar es aprender a pensar”
Decía Julio Cortazar que nada le parecería más revolucionario que «enriquecer por todos los medios posibles la noción de realidad”
“Puede concebirse a la literatura como un oficio, un destino, una misión, un combate, un pasatiempo, un viacrucis; y al escritor como un anacoreta, un mandarín, un conspirador, un mártir, un iluminado, un payaso, un acróbata». Así decía Octavio Paz, poeta y escritor mexicano, que ganó el premio Nobel ; quien ya advertía el fenómeno la globalización al decir que “la historia mundial se nos ha echado encima. El horizonte histórico ha cambiado de forma y dimensión. El futuro se ha reducido y el presente se ha ensanchado. Pensar el presente nos devuelve la mirada hacia una modernidad prematura y tardía en nuestra América Latina».
La modernidad se distinguió, desde su nacimiento por la continua interpretación entre la crítica y la creación. Las creaciones más altas de la edad moderna han sido críticas y la crítica ha sido creadora. Aunque la fusión entre imaginación e ironía comenzó con una obra de nuestra lengua, el Quijote de Cervantes, la crítica literaria no se desarrollaría sino hasta mitad del siglo pasado. Sin embargo la producción de los escritores latinoamericanos tuvo un rasgo determinante en cuanto al compromiso ético y social con la época que les tocaba vivir.
Solo por citar algunos como “La región mas Trasparente” de Carlos Fuentes, “La ciudad y los perros” de Mario Vargas Llosa y el “Coronel no tiene quien le escriba” de Gabriel García Márquez entre otros inauguran este primer momento de lo que se llamo el boon latinoamericano.
Pero hay un escritor que merece un reconocimiento singular por su invalorable producción literaria como son los cuentos fantásticos de “Casa Tomada” y “Continuidad de los Parques” y novelas como “Rayuela” de Julio Cortázar quien además comprometió su literatura a tal punto de ofrecer una propuesta instrumental con el objeto de denuncia y divulgación que fue en lo que se convirtió El libro de Manuel, aparecido por primera vez en revisterías del país en 1973.
Julio Cortázar es el paradigma del escritor que no se refugia en su escritorio o en su cátedra sino que encarna una conducta activa y militante de compromiso con su pueblo, denunciando las injusticias, los abusos de poder, la corrupción y el imperialismo norteamericano que mostraba sus garras contra nuestros pueblos. Julio Cortázar formó parte del Tribunal Russell, que condenaba los crímenes que ya se sabían de lesa humanidad, denuncio la guerra de Vietnam, y a los militares genocidas de América latina.
No es casual que hoy se esté llevando a cabo la integración latinoamericana. Por primera vez en la historia que la memoria se puede recuperar para nuestros países. Existen gobiernos y movimientos sociales desde México hasta la Patagonia con clara conciencia de la unidad regional económica y sobre todo política como forma de soberanía popular y desarrollo cultural e integral para las mayorías.
Es así que hoy enfrentamos un nuevo desafío histórico, en donde el rol de los creadores juega un papel principal ya sean escritores, docentes, periodistas, trabajadores sociales etc. que empleen el lenguaje desde un lugar de “poder” como medio para significar la realidad, es menester saber que allí se da la mayor disputa en el análisis y reconstrucción de nuevos espacios de representación de lo real. Del sentido que se le da a las cosas y la vida en general. ¿Que sentido tiene volver a pensar en el sentido?
En lo que respecta a nuestra tradición oral y escrita nos sobran los ejemplos en cuanto a la resistencia cultural y política. Hay muchas maneras de continuar una tradición, una de ellas -la más eficaz-, consiste en contradecirla y/o reinterpretarla, introducir la reflexión y la crítica reconstructiva a nuestra vida, es devolverle fertilidad a nuestra tradición, revisarla es vivificarla.
El pensamiento crítico no es enemigo sino protector de la imaginación. Nada le hace más falta a nuestros pueblos que el examen de conciencia ya que es el arte más difícil y el más urgente. Aprender a dudar es aprender a pensar. Y como decía Julio Cortázar: nada es más revolucionario que enriquecer por todos los medios posibles la noción de realidad.
“Para los sueños hay llaves.
La realidad se abre sola y no se deja cerrar.
La realidad no tiene que temerle al olvido.
Es hueso duro de roer
Nos trae de cabeza,
Nos pesa en el alma, se nos enreda en los pies.
No hay escapatoria,
la realidad nos acompaña en cada huida.”
Recopilación Teresa Kuki Herrán
Julio Cesar Haro
Juceharo@yaoo.com.ar
comentario
Desde Barcelona
Gracias por esta buena reflexión. Esperamos otra tan buena sobre Rodolfo Walsh. Un saludo.
Rafael Pagano
Barcelona
Los creadores y su compromiso con la época
Gracias por esta buena reflexión. Esperamos otra tan buena sobre Rodolfo Walsh. Un saludo.