Lo adelantó Juan José Aranguren, el futuro ministro de Energía de Mauricio Macri. También consideró que «hay una discriminación en un país que se dice federal».
Pese a que todavía faltan conocer los detalles y obtener mayores certezas sobre los alcances, el presidente electo Mauricio Macri y sus futuros colaboradores del gabinete empiezan a mostrar algunas de las medidas económicas que tomarán a partir del 10 de diciembre próximo. Ayer le tocó el turno a Juan José Aranguren, quien tendrá bajo el ala de su ministerio dos áreas claves: el control del negocio energético y el del minero. En declaraciones a Radio Mitre, el futuro ministro de Energía reconoció que Cambiemos hará una «corrección» del actual cuadro tarifario del sector de distribución eléctrica en la zona metropolitana y dejó entrever la posibilidad de dolarizar el precio de la energía. Además, Aranguren, un ingeniero químico que trabajó en la multinacional Shell entre 1977 y 2015 y fue presidente de la Cámara de la Industria del Petróleo, puntualizó que no está en sus planes privatizar la petrolera YPF.
Con respecto al tema tarifario opinó que existe «una discriminación, en un país que se dice federal», porque en el actual cuadro tarifario del sector de distribución eléctrica, que en la zona metropolitana «es siete veces más bajo que lo que puede ser en las provincias de Río Negro, La Pampa o Córdoba».
Además, consideró que «las distorsiones van en contra de un desarrollo sustentable de nuestra economía, y el mandato que he recibido de Mauricio Macri es poder contribuir en la resolución de estos problemas».
«Normalmente en los países que son exportadores se subsidia la energía; el nuestro es tal vez el único caso que somos un país importador y se subsidia la energía«, dijo el futuro ministro.
Aranguren afirmó que «necesitamos recuperar la racionalidad«, ya que «hemos vivido años en los que las políticas que se implementaron fueron parche tras parche, tratando de administrar el presente sin planificar el futuro».
«Es muy difícil poder conducir los intereses tanto privados como estatales si uno no tiene un horizonte adonde poder dirigirse, a los efectos de decidir políticas públicas para alcanzar los objetivos», sostuvo.
Añadió que la tarea de los próximos años será «recuperar los marcos regulatorios, que siguen existiendo y están vigentes por ley, pero que fueron modificados en sede administrativa».
En igual sentido, remarcó que «tenemos que salir de la esquizofrenia que hemos vivido en el sector energético en los últimos 12 años».
«El principal problema que veo para adelante –definió Aranguren– es que un país como el nuestro, rico en recursos, no solo fósiles y no renovables, sino en renovables, hidroelectricidad y nuclear, esté importando el 15% de la energía que necesita. Esto es un crimen», acotó el funcionario macrista.
Respecto del futuro de YPF, Aranguren señaló que «en ningún momento se cuestionó mantener la composición accionaria de la compañía: YPF sigue como está, sigue siendo la empresa líder y se buscará que sea más eficiente», adelantó.
El futuro ministro no se refirió en ningún momento a la continuidad de Miguel Galuccio como CEO de la recuperada YPF. Pero sí mencionó sus planes sobre el megayacimiento de gas y petróleo no convencional que en la jerga se conoce como Vaca Muerta. «Es un proyecto muy significativo. Se trata de una roca formadora y tenemos otra como Los Molles (en Neuquén), particularmente rica en gas, que van a seguir siendo una fuente de energía para el país», aclaró Aranguren. Siguiendo este mismo razonamiento, consideró luego que hay que establecer las «condiciones macro, de productividad y de forma explotación del recurso en forma eficiente».
Asimismo, indicó que «el proyecto (de Vaca Muerta) ha llegado para quedarse y la actual coyuntura de precios en el mercado internacionales no va a ser obstáculo para que se desarrolle».
El ex empresario agregó que en materia de gas «tenemos que recuperar la inversión y despertar confianza en el inversor, para que volvamos a producir los recursos que el país tiene».
Otro dato revelador que ofreció Aranguren es que ya sondeó a los empresarios del sector eléctrico especto de la situación que atraviesan y no descartó que este verano se produzcan dificultades en el suministro de energía, problemas que le achacó a la falta de desembolsos por parte de las empresas.
«Las inversiones para mejorar el sistema eléctrico no se han hecho y no se pueden hacer en días a partir del 10 de diciembre, pero vamos a empezar un camino; sólo podemos tratar de atender cualquier tipo de emergencia que tengamos de la manera más eficiente», advirtió.
Aranguren también reconoció que «tenemos que mejorar la calidad del servicio eléctrico, el que paga la tarifa tiene que hacerlo sabiendo que va a tener un servicio que no se interrumpe».
En el sector se comenta que algunas de las políticas que llevaría adelante Cambiemos en materia energética a partir del 10 de diciembre se reflejarán en un paquete que Macri enviará al Congreso de la Nación y pondrán el acento en la creación de incentivos productivos que favorezcan la rentabilidad de las compañías y estimulen la producción de gas y, en menor medida, petróleo. El segundo objetivo evitar la salida de divisas por la compra de gas en el exterior.
En ese esquema, los técnicos de Cambiemos buscarían mantener –por lo menos en lo que al mediano plazo se refiere– el valor del barril criollo, para no generar alteraciones en el mercado laboral de las provincias hidrocarburíferas. Con respecto a las tarifas, Aranguren estudiaría profundizar la estrategia de concentrar los subsidios en la demanda y no en la oferta cómo ha ocurrido hasta ahora.
Una fuente del sector señaló a Tiempo que en la asamblea de accionistas de YPF que tendrá lugar en abril próximo se presentará los resultados de una auditoría de YPF y también se podría decidir la continuidad de Galuccio en la compañía, previa consulta a Macri. Además, el ex Shell prevé respetar los programas que ya ha puesto en marcha la conducción de Miguel Galuccio.
Mensaje de Sapag: «hay que fortalecer YPF»
El gobernador de la provincia de Neuquén, Jorge Sapag le envió una recomendación a las nuevas autoridades energéticas de la alianza Cambiemos, que preside Juan José Aranguren.
«YPF tiene que ser fortalecida, tiene que seguir teniendo esta presencia que se determinó a partir de la expropiación del 51% de las acciones y ser líder en materia de inversiones, como lo fue en Neuquén con Loma Campana trayendo las inversiones de Chevron», especificó el mandatario.
Durante una entrevista que le concedió a Radio Nacional, Sapag recordó que «Loma Campana ha traccionado la economía. Se generaron 25 mil puestos de trabajo en 33 meses, Neuquén tiene un índice de desocupación más bajo de su historia, del 2,9%, y además aumento de la producción de gas y petróleo».
En el mismo sentido, el mandatario neuquino señaló que «tenemos que defender la actividad de Neuquén, de la que dependen las inversiones, las fuentes de trabajo y los impuestos provinciales, nacionales y regalías».
Respecto del fallo de la Corte Suprema que obliga a publicar las cláusulas secretas del acuerdo YPF-Chevron, Sapag apunto en un sentido claro al afirmar que «una empresa como YPF, que es una Sociedad Anónima, debe ser respetada como Sociedad Anónima. El fallo viola el principio lógico de identidad. Si queremos lograr inversiones tenemos que dejar a YPF que pueda hacer aperturas de áreas como las que hizo con Chevron, sino que contrate el Estado».
– Tiempo Argentino