Anoche en La Fundación Salta se presentó el libro “Días de viento” de Carlos Hugo Aparicio, “salteño” nacido en La Quiaca, en 1.935. Publicó cinco libros de poemas, dos de cuentos y una novela. Con aires de tango y olor a tierra, el libro de “cocina artesanal” dedicado a la memoria de Alcira (su madre) y a sus nietos José Nicolás Caballero y Camila Belén Martínez con 300 ejemplares, salió anoche a la luz de la literatura para congraciarse entre la Gran Literatura señalada por el poeta como la copla y el tango. Con el auspicio del Centro de Arte y Cultura de la Fundación se llevó a cabo la presentación de una obra que promete ser un “joya” norteña en materia artística. La palabra, anunciada en metáforas por Jesús Ramón Vera, ahora surca las polvaredas y canturrea en el alma, decidida a ser ese “ruido en el garash” o ese “río atronando, ancho y turbio” por entre las grietas de las manos ansiosas que se revelan pluma y canto.
Apertura
Javier López, joven poeta y periodista, realizó la apertura de esta celebración de la palabra junto a Verónica Ardanaz de Ediciones del agua, quien intervino en esta realización artesanal. El papel en que se hicieron los 300 ejemplares de la obra de Aparicio, está confeccionado a mano por el Molino Hilo de Agua, con tierra natal de La Quiaca, Yavi y Villazón. Un libro artístico en consonancia con la talla de este escritor.
El ejemplar, anunciado por estos jóvenes, tiene un costo de $35, y se vendió bastante bien en este primer contacto con la obra.
Presentación
La presentación del libro estuvo a cargo de Kuki Herrán, Roberto Acebo y Jesús Ramón Vera, quienes destacaron anteriores obras del poeta y lucieron su escritura sin olvidar el evento reciente del estreno de “Luz de invierno”, la película de Alejandro Arroz basada en tres cuentos del escritor C. H. Aparicio. (Ver en este sitio: “Luz de invierno, ese Macondo salteño”). Acebo destaca este volver después de una prolongada ausencia, Herrán lo afirma entre los consagrados de la literatura y Vera busca la metáfora que nos devuelve al autor, en este “tren” de la palabra.
Para evocar la memoria paisajística se exhibió un documental con voz del autor, sobre La Quiaca: “soy un salteño con el alma en La Quiaca”-dice. Y no faltó el bandoneón de Juan Carlos Marín para homenajear a Aparicio y música andina como alegoría del momento, de la mano del grupo Acullico.
Obra del autor
Es miembro de la Academia Argentina de Letras (1996) y Ciudadano Ilustre de La Quiaca (1997). Sus libros de poemas son: “Pedro Orillas” (1965), “El grillo ciudadano” (1968), “Andamios” (1980), “Coplas al vino” (1986) y “El silbo de la esquina” (2000); y dos libro de cuentos son: “Los Bultos” (1977) con el Primer premio regional de literatura y “Sombra del fondo” (1982). “Trenes del sur” (1989), recibió el segundo premio Nacional de Novela.
Días de viento
“fondo vació de la calle”…”desierto de la calle”…”¿habrá sucedido algo?”…”los bares de la estación” (¿ por allí andará?).
Ese hueco en el alma, sensaciones de soledad en esa eterna siesta que “levanta tierra seca”.
Imágenes, metáforas, silencio, polvo, olor a tierra. Y nunca ha de volver, quizá se haya perdido en la espesura de la tarde. Amarilleo que flota en la mirada del lector atrapado por el vuelo del escritor. Soledad que trepida y arranca las sombras de un humano perdido en un bar, escondido, latente, acaso para perderse en la letra que dispara un recuerdo. Así lo viví.
Y más
Los sucuchos, el laburo, la guita que no alcanza, las esposas olvidadas, los gritos silenciosos de la madre…Matecocido con retazos de pan pero con afecto. Personajes que cruzan pensamientos entre las líneas de la acción que no transcurre; imágenes de circunstancias, imágenes-objeto de charlas sin respuesta que esperan la calma.
Chapas de techo, vinito, el jarro del padre… los ladrillos y la arpillera. Una atmósosfera apariciana donde nos encontramos, donde reconocemos su puño y volvemos a desprender aroma a rancho, a siesta, a luz del sol, a lágrima cotidiana.
Narrativa poética que asombra de “Lo oscuro de todo”, de la zamba que espera al pobre galán de la esquina “y yo sin decir palabra la abrace y nos vamos en una sola ráfaga”.
…“desde el fondo de la calle oscura” un ser espera el abrazo; esto narran los cuentos, la estética de una palabra que acusa guitarra, pescas, siestas, changos y esquinas donde la sangre se fuga al viento de la añoranza silenciosa.
Comentario
“Días de viento”, la nueva obra de Carlos Hugo Aparicio
17 de julio de 2007
Respuesta al artículo “Días de viento”, la nueva obra de Carlos Hugo Aparicio.
Estuve esa noche especial de la presentación del nuevo libro de Aparicio. La animación fue poética, responsable, llena de emoción y voz con brisa y pájaros. El video que presentó la responsable de la editorial también conmovió, como ese cuento leído por una de las hijas del narrador jujeño. Emociones no faltaron. Pocas veces uno concurre a presentaciones de libros y se encuentra con una organización brillante y cálida. Gracias por el recuerdo. Atentamente.
Diego Vargas
“Días de viento”, la nueva obra de Carlos Hugo Aparicio
como quiaqueño me siento muy feliz por los escritos de carlos deseo poder ciomunicarme con el ya que poseo una libreria en la quiaca y poder vender sus libros
luis mendivil
“Días de viento”, la nueva obra de Carlos Hugo Aparicio
Estuve esa noche especial de la presentación del nuevo libro de Aparicio. La animación fue poética, responsable, llena de emoción y voz con brisa y pájaros. El video que presentó la responsable de la editorial también conmovió, como ese cuento leído por una de las hijas del narrador jujeño. Emociones no faltaron.
Pocas veces uno concurre a presentaciones de libros y se encuentra con una organización brillante y cálida. Gracias por el recuerdo.
Atentamente.
Diego Vargas