Los genocidas siguen sueltos y amenazan a los artistas

En Salta amenazaron a la directora de teatro Nena Córdoba, que adaptó mi obra «Los sapos de la memoria». A mí también me han amenazado varias veces. Qué suerte que ahora pueden decirme esas cosas y nadie los secuestrará, ni torturará, ni asesinará….

He decidido hacer pública esta carta que me envió una directora de teatro estudiantil de Salta, quien adaptó «Los sapos de la memoria» y la puso en escena hace pocas semanas. (Lo subrayado y con negrilla lo resalté yo) Creo que es casi mi obligación ética y cívica denunciar estos hechos, porque muchos genocidas siguen sueltos y a estos bravucones hay que pararlos de frente, con palabras y dignidad.

Gracias por lo que puedan hacer para evitar que nos sigan amedrentando.

Un abrazo

Graciela Bialet

La carta de Nena Córdoba

Querida Graciela:

Mil disculpas por no haberme comunicado antes, pero estuve muy ajetreada después del estreno de «Cuentos de la Memoria». Estrenamos el 26/10. Yo te conté que el objetivo era el estreno en la Fiesta Estudiantil de Teatro en Salta, pero no sólo hicimos esa función (29/10), porque decidí estrenar en mi pueblo (Joaquín V. González) para foguear a los chicos, teniendo en cuenta que muchos de ellos no conocían siquiera la ciudad, y estrenar en Salta Capital era para ellos una carga muy pesada. Bueno, eso me parecía a mí.

Pero como siempre, mis chicos me sorprendieron. El estreno fue todo un éxito. En mi pueblo hicimos dos funciones, que lamentablemente poca gente pudo disfrutar porque la sala tiene una capacidad de 80 personas. Había gente en la vereda y en la calle que no pudo entrar. Imaginate lo que fue la segunda función, pues gracias a Dios tuve excelentes comentarios de los que vieron el estreno y fue todo un acontecimiento que logró lo que jamás imaginé, desvió la atención del público del tema principal que estaba vigente por esos días: las elecciones (que fueron el 28).-

Todo el mundo quedó encantado. Obviamente, hubo gente que mostró su descontento, pero sirvieron las funciones para identificarlos, porque te cuento que previo al estreno hice un ensayo con público de algunas escenas para ir precalentando a los chicos, y trajo como consecuencia que me mandaran un mail que textualmente decía: «Cuando volvamos al poder serás el primer sapito que dejará de cantar y nadie se acordará de aplaudirte». Qué tal?. El remitente era: Qx4tírenlas. Hubo otros que me dijeron que yo era una lanzada y que por estos tiempos tenía que practicar un poco la prudencia que es una gran virtud, también tuve un par de espectadores el día del estreno que se levantaron indignados vociferando que todos esos zurdos no eran las blancas palomitas que parecen con esta obra ridícula…

En fin. Lo importante es que esos fueron los menos. El público, las radios, la televisión local, los candidatos políticos que se tomaron un respiro en sus campañas para ver la obra y politizar con ello pregonando que apoyaban la cultura y la libertad de expresión, por el motivo que fuera, pero todos, aplaudieron, alentaron y felicitaron a los chicos, su profe de teatro y a través de mí a la autora de «Los sapos de la memoria» que como dijo un periodista de una de las radios que obviamente leyó tu obra: «Tiene el corazón en la pluma, la precisión en la palabra, y un mensaje auténtico, sincero, comprometido, que hace que su verdad sea también la nuestra».-

En Salta capital, la función fue maravillosa, tuvimos la desgracia de que ese día cayó una tormenta con granizo veinte minutos antes de la función y que duró como una hora, eso nos restó público, pero no obviamente la gente de teatro y autoridades de la organización que quedaron encantados con la obra y los chicos.

Había allí uno de los organizadores del ciclo «Teatro por la Identidad», que se realizará en Abril del año que viene y para nuetro orgullo ¡Nos invitaron a participar con la obra!.Tuvimos excelentes críticas, pero ninguna de ellas dejó de achacarme el hecho de haber elegido una obra tan fuerte para ser interpretada por adolescentes.A todos respondí lo mismo: También es fuerte que una nena de 14 años por su gran desarrollo físico sea estimulada a los desnudos y la explotación comercial de sus cuerpos a cambio de fama o un lugar en Show Macht o en los teatros que disfrazan la pornografía con plumas y lentejuelas, y sin embargo nadie cuestiona a sus productores o directores. Esta obra es fuerte porque nos toca a todos en una realidad de la que muchos pretendieron por muchos años hacerse los tontos y callarla. Los chicos la vivieron como una verdad que no conocían y que ya nadie puede o debe olvidar.

Bueno te pinté un panorama intenso de lo que produjo tu gran obra. Yo me llevé muchos halagos por mi elección y estoy de acuerdo, me los merezco porque elegí una autora de primera línea para el debut de mis alumnos. Espero que me den rápido la devolución del jurado de la fiesta para poder compartirla con vos.

Un abrazo.

Nena Córdoba.

Esta fue mi respuesta a Nena

Querida Nena:

Qué alegría ha sido recibir estas noticias tuyas. Gracias. Mil gracias por compartir conmigo esta experiencia teatral. Te pido por favor que me avises cuando la pasen en abril en el marco de Teatro X la identidad porque iré hasta Salta a ver esa obra tuya y nuestra.

¿Cuántos actores intervienen en la puesta? ¿Grabaste alguna función? Ayyyyy…. me encantaría verlos.

A mí también me han amenazado varias veces, pero como lo padezco desde los 80 y ya aprendí a dejar de sentirme culpable, y los encaro y les digo que qué suerte tienen y tenemos, que ahora pueden decirme esas cosas, o levantarse e irse, u opinar incluso en contra de la Constitución y nadie los secuestrará, ni torturará ni asesinará, ni robará sus hijos y sus propiedades por eso.

Te abrazo fuerte y sigamos en contacto, por favor.

Graciela

Enlace:

Página web de Graciela Bialet:

www.gracielabialet.com.ar

Nota relacionada:

Matías Manzur, un artista de la música, recibió tres amenazas

http://www.salta21.com/spip.php?article248

Correo electrónico de las artistas:

Nena Córdoba: nenacordoba@hotmail.com

Graciela Bialet: gbialet@hotmail.com

Comentario

Los sapos de la memoria seguirán cantando….!

A Graciela Bialet y a todos los que creen en la democracia como forma de vida:

Yo nunca imaginé que iba a tener un apoyo como el que recibí de todos ustedes ante las amenazas que me llegaron, cobardes por cierto, porque esas personas nunca dan la cara, sus métodos son mafiosos y terroristas, pero cobardes con todas sus letras.

Nunca fui muy reservada que digamos y jamás callé lo que pienso y lo que siento. Yo viví mi primera infancia en plena dictadura, así que mucho de lo que sé al respecto me lo contaron o me lo enseñaron, a veces de una campana, a veces de otra, como muchos de mi generación que recibimos la democracia en plena adolescencia.

Cuando era niñita me contaron que los «guerrilleros», los «subversivos», eran unos monstruos asesinos y cada vez que a alguien le llamaban así, yo les tenía mucho miedo y los imaginaba con cara de sapos, cuerpo de monos y patas de cangrejo… como si esos bichitos fueran verdaderamente… monstruos.

No imaginé que algún día sería yo la señalada como subversiva, zurda, guerrillera, y me amenazaran por poner en escena una obra de teatro que contó la verdad de la otra campana.

¿Habrán sido de verdad unos monstruos esos a los que como a mi, los llamaban subversivos? Porque yo nunca maté, no robé, no amenacé, ni atenté contra los derechos de nadie. ¿Soy de verdad yo el monstruo?

Hoy, les tengo algo así como miedo mezclado con aborrecimiento, pena, y a veces asco, a los terroristas, a los militares, a los médicos, a los abogados, a los escribanos, a los políticos, en fin a cualquiera, sea cual fuera su oficio, empleo o profesión, sea cual fuera su raza, religión o nacionalidad, a cualquiera que sea capaz siquiera de atentar contra la vida, la libertad, el honor, la dignidad, la propiedad, o cualquier otro derecho humano, de los que todavía valoramos a los seres humanos y nos hacemos valer como personas humanas.

Nunca justifiqué ni jamás a quien se trata de imponer por la fuerza, la manipulación, la especulación, la cohersión, la injusticia y toda otra actitud antidemocrática, antihumana

Lo bueno es que nunca callemos y todos los sapos de la memoria sigan cantando hasta desgargantarse, así estaremos siempre protegidos por los que como Graciela, como todos ustedes y como yo, creemos en la democracia.

Porque la diferencia de cuando éramos niños, es que ahora no nos pueden mentir fácilmente. Hoy no nos tenemos que ocultar para leer un libro, para aplaudir a un artista o para expresar lo que pensamos.

Los que se ocultan son ellos, y no por su ideología política, religiosa o del tipo que sea, sino por su espíritu corrompido que a ellos mismos los avergüenza, carcomidos por su propia violencia, por la culpa que jamás asumirán porque les falta decencia para eso.

Que el miedo no nos atemorice. Yo no dejé de tener miedos por haber crecido, trato de superar mis miedos enfrentándolos, de modo que cuanto más pretenden atemorizarme, más me potencian, porque no quiero dejar de crecer.

Gracias a todos, y gracias por expresarse… así es como se ejerce aquello en lo que creemos: la libertad.

Nena Córdoba