Migración masiva de afiliados de OSPRERA a otras obras sociales

De un total aproximado de unos 25 mil beneficiarios ya se fueron de OSPRERA unos 15 mil

La migración de afiliados de OSPRERA hacia otras obras sociales alcanza ya cifras importantes, a una semana de que se cumplan cuatro meses sin servicios médicos-sanatoriales ni bioquímicos para los peones rurales debido al conflicto que enfrenta a la gerenciadora Güemes Salud con las asociaciones de clínicas y laboratorios del interior de la provincia de Salta.

En Anta este fenómeno es tan pronunciado que -de acuerdo a datos proporcionados por ACIDSAL- la mayoría de los afiliados ya abandonó la Obra Social para los Peones Rurales y Estibadores de la República Argentina. De un total aproximado de unos 25 mil beneficiarios ya se fueron de OSPRERA unos 15 mil. La mayoría de estos optó por SALMED, una obra social que tiene como base de su actividad a los trabajadores del fósforo.

Esta situación modificó el esquema de la importancia de las obras sociales en Anta, puesto que SALMED pasó de un puesto menor a tener un volumen de afiliados comparable al IPS en ese departamento, que -con una superficie equivalente a la que tiene la provincia de Tucumán- es una verdadera potencia agrícola y ganadera que concentra a un tercio de los trabajadores rurales de la provincia de Salta.

OSPRERA, en cambio, ya ha perdido allí a más de la mitad de sus afiliados.

El fenómeno se repite en otros puntos de la provincia. Por ejemplo en el Norte se registra una migración que se está orientando sobre todo a la obra social de los trabajadores petroleros.

El ingeniero César Ramón Villagra, delegado de OSPRERA en Salta advirtió en una solicitada que la sangría que sufre la obra social es producto de maniobras desleales y anunció que impulsará acciones penales para detenerla o revertirla. Quienes apoyan la migración señalan que es totalmente legal pues está contemplada dentro del actual marco jurídico. Aunque es cierto que hay casos en los que la posibilidad de optar está restringida o vedada. El empleado público de la provincia de Salta no puede tener otra obra social que no sea el IPS y tampoco el jubilado puede abandonar el PAMI.

En el caso de los peones rurales el cambio de obra social se debe a la prolongación de la crisis en los servicios de salud de OSPRERA, que continúa sin solución. La Asociación de Clínicas del Interior (ACIDSAL) y BioQuin -que nuclea a los profesionales bioquímicos del interior de la provincia- no firmaron contrato con la gerenciadora Güemes Salud porque exigen un convenio directo y rechazan la intermediación.

A raíz de ello los peones rurales son derivados a los hospitales o trasladados para su atención a otras localidades alejadas de su lugar de residencia. Tampoco tienen modo de conseguir los análisis y estudios de laboratorios que necesitan, salvo que los paguen o logren realizarlos en los hospitales.

El viernes 30 de marzo los directivos de ACIDSAL informaron en J.V. González su posición en el conflicto al tiempo que la prensa departamental denunció que pacientes de OSPRERA estaban siendo atendidos en forma irregular en los hospitales. El martes 3 de abril 200 trabajadores manifestaron frente a la sede de Uatre-OSPRERA, en 25 de Mayo 555 de la ciudad de Salta, para exigir la inmediata restitución de los servicios de salud en clínicas y laboratorios en Orán, Anta, Güemes, San Martín y Metán y la mejora de la atención en el valle de Lerma y en los valles Calchaquíes.

El delegado de OSPRERA, César Villagra, y el gerente de Güemes Salud, Leonel Virga, convocaron al representante de los trabajadores, Víctor Barboza, a una nueva reunión que se realizará el próximo sábado en Rosario de Lerma, para seguir tratando el tema. Pero hasta el momento la situación no ha variado.