El hallazgo entre la historia de la hija de Démeter, raptada por Hades, y la problemática social que enfrenta el mundo frente a la trata de personas, repercute seria y hondamente en los sentidos. Una poética enérgica con un conflicto actual.
Surgida de la tierra o de las entrañas, una mujer se instala en su trágico destino para soportar el peso inefable del cautiverio. Espectadores esclavos de un lirismo mítico, de un misticismo superlativo, nos volvemos viciosos del encanto estético.
Esta obra, “Perséfones del sur” , se encauza por los hilos de la sangre, por la delicada tibieza del cuerpo flagelado, por la extrañeza de la mujer “vendida”. Insoportablemente real y enigmáticamente literaria, la obra revela y devela el sufrimiento macabro de una mente perversa que anima las prácticas de lo aberrante.
Por momentos animalesco, de a ratos sensual, casi agresivo y en instantes de una delicadeza sublime, Grisel Nicolau trasciende el marco de lo meramente teatral. Se anima a romper el discurso dramático convencional con una poesía de corte narrativo con soliloquios intensos y diálogos tensos, en tanto se desdobla en la madre que ansía a su hija y esta que recuerda su infancia y juventud felices.
De las propuestas de Jorge Renoldi, se pueden subrayar tres últimas: Conversación nocturna , Líquido táctil y Medea . Creo que todas ellas, se caracterizan por la construcción de ambientes sórdidos y lúgubres, aunque Líquido táctil se disparara hacia el humor, conserva su aspecto de “negro” y de enigmático, configurador del universo renoldiano. Nada pasatista, nada sencillo, nada azaroso, nada luminoso.
Y en mi opinión, la obra “Perséfones del sur” , sintetiza esos aspectos por él trazados a lo largo de los años. Como director, logra sacar ese costado de puestista para vestir la escena con una intensidad dramática que recae en la atmósfera focalizada, a nivel del piso, desde donde parece resurgir una ninfa ataviada.
Nicolau se destaca como actriz no sólo porque logra tornear su inspiración por el lado interpretativo sino porque el discurso se ha hecho carne en el cuerpo.
Si bien es cierto que un primer momento cuesta comprender el nivel de la historia, los significantes nos atrapan y los símbolos corpóreos se vuelven los oídos y las palabras. No importa lo que dice Perséfones, sino lo que hace y cómo lo hace. Más tarde, nos envuelven los sonidos de las palabras y el texto fluye, a nivel significado y sentido; se cosen los hilos que han tapado los ojos a la víctima. Las telas del vestido son la escenografía por donde se mueve la actriz, es ella misma su propio paisaje. Y por momentos, acusados de dolor por esa mujer sometida, es arrojada al infierno de la angustia y la soledad infinita. Jamás podrá ser feliz después de haber perdido la libertad y de haberse convertido en una sombra oculta, perdida, no hallada, secuestrada; una mujer prostituida.
Antes, Grises Nicolau había presentado la obra “La culeada” , en donde el tono de su voz y el encanto femenino se conjugaban para recrear a la mujer sodomizada y poseída por atrás. En “Perséfones” , hay otra caracterización y Nicolau puede lucir aún más sus cualidades artísticas. Es una obra hecha a su medida. Gana en trabajo interpretativo.
Los cortes sucesivos con apagón nos desitúan y nos resitúan cíclica y constantemente, retorna a nosotros la pesadez del tema y nos descubrimos metidos en un ritmo interior que nos aleja del lirismo y nos encaja en lo dramático. El silencio se hace cruel y la palabra se torna vulnerable.
La obra penetra en lo sensible, en el padecimiento y agotamiento de lo idílico para volverse carnadura soporífera, donde el impero de la angustia es la ley.
El programa de mano entrega la siguiente inscripción: “aparición con vida de todas las desaparecidas para ser prostitutas”. Hay una consigna, una necesidad y un grito.
Data
“PERSEFONES DEL SUR” de Grisel Nicolau, Dirigido por Jorge Renoldi. 
Director, investigador y pedagogo teatral. Con más de cuarenta espectaculos dirigidos, numerosos premios y presentaciones en el exterior..
“Un hilo, un hilo que me retenga en la cordura, un hilo para no perderme en este laberinto de terror y dolor…”
3- 2009-04-09| . Estrenada el 2 de abril en el Teatro La Vuelta del Siglo de la ciudad de Jujuy . Crítica del espectáculo: “El escenario vacío, las luces de la sala se apagan y sonidos guturales nos invaden. Ha comenzado el espectáculo. Con una deliciosa maestría actoral Grisel Nicolau solo con su cuerpo y tomando al vestuario como un partener viviente creando una relación de mutaciones recíprocas entre actriz-cuerpo, actriz-vestuario y con un amplio registro vocal da vida a cuatro personajes que nos transportan a un mundo lejano y horrorosamente cercano a la vez. En hecho estético que nos llena de angustia y belleza”.
El espectáculo: Démeter, diosa de la fecundidad, representa los poderes de la naturaleza, su transformación y emergencia cíclica. Perséfone, su hija, es raptada por Hades que se la lleva al Mundo subterráneo. La historia cuenta cómo su madre, desesperada va en su busca y cae en la locura, lo que produce el primer invierno de la tierra, hambruna del alma. Alegoría de la muerte y representación de la fuerza necesaria para enfrentar las injusticias. Una alegoría a la transformación del dolor en acción. Usando como excusa el mito de Démeter, diosa de la Fecundidad, aparece una joven mujer llena de sueños y deseos, un hombre que solo se ve a sí mismo, una madre desarmada y vuelta a armar por el desgarro del dolor y un ser atemporal, que con un gesto burlón se reirá de cada uno de nosotros invitándonos a cambiar la historia, que no siempre fue esta.
El desafío está echado para la actriz que busca plasmar en la escena a través de distintos personajes lo que duele de este mundo y para el público, la invitación a dejar de ser cómplices de las barbaridades con las que convivimos y romper el silencio. Proporcionar un espacio sagrado para vivenciar nuevos estados de conciencia tomando la historia en las propias manos y así poder cambiarla. La puesta en escena atraviesa el doloroso tema de la trata de personas. Crear a partir de lo que más duele. Ponerle palabras a lo innombrable.
Aparte
Sobre la admisión a la prensa: En Salta, todavía muy pocos la tienen clara con respecto al periodismo cultural. En mis conversaciones con periodistas de todo el país y con críticos especializados, todos contaron sobre el libre ingreso a los espectáculos. No hay una política clara de admisión en las salas salteñas para quienes a diario asistimos a obras y espectáculos. Uno hace lo que puede con su bolsillo y como paga, también se va a donde se puede. En este sentido, Clasadonte y Ana María Parodi son unos adelantados: saben lo que es el trabajo de la prensa y de la crítica.
– Dato: última función, sábado 16 de mayo 21 hs. en la Fundación Salta.
– Notas relacionadas:
FRONTERA – miradas femeninas – espacio de encuentro
https://www.salta21.com/spip.php?article1630
La culeada
https://www.salta21.com/spip.php?article878
