La influencia del matrimonio Kirchner no solo se hace sentir en su provincia, a la que han manejado como su propio feudo, sino también en provincias vecinas. El matrimonio Kirchner no ahorra epítetos cuando hay que cargar contra la “oligarquía” argentina.
El autor de la nota https://www.salta21.com/A-200-anos-de-la-Creacion-de-Los.html dice que los homenajes al héroe gaucho que se realizan en esta oportunidad serán “todas manifestaciones simuladas, formales e hipócritas de la oligarquía gobernante”. Una expresión durísima para definir a un gobierno que, como el de Juan Manuel Urtubey, se ha definido de entrada como “nacional y popular” y como parte indisoluble del proyecto que encarna Cristina Kirchner; una expresión, además, que ya hemos oído en boca de la militancia del kirchnerismo duro de la provincia.
Desde el comienzo de su gestión en la Casa Rosada, pero particularmente desde la crisis del campo en el año 2008, el Kirchnerismo ha acusado de oligarca a cualquier productor agropecuario, grande, mediano o chico, que se opusiera a sus políticas. Así, una familia de finqueros o ganaderos con 40 héctáreas, que trabaja desde que amanece hasta que se hace la noche secundado por algunos peones, sería una familia de oligarcas. Parece una broma que la mayoría de las veces esas descalificaciones provengan de funcionarios del gobierno que tienen muchísimo más dinero y menos preocupaciones que los productores a los que atacan. Cualquiera puede elaborar una lista a mano alzada de esos funcionarios para comprender de qué estamos hablando.
El caso de la familia que gobierna Salta es elocuente; tienen jugosos intereses en muchos sectores de la economía tanto provincial como nacional. Lo mismo podríamos decir de la familia Romero o la familia Olmedo.
La cuestión aquí es que eso no solo lo vemos en Salta. Si hacemos una recorrida por el resto del país podremos encontrarnos con casos casi idénticos, y van algunos pocos ejemplos.
José Luis Gioja, gobernador de San Juan desde el año 2003. Con el apoyo de Néstor y Cristina fue el gran impulsor de la minería a cielo abierto en su provincia, con un actor excluyente: la minera canadiense Barrick Gold Corporation. El poder despótico que la familia Gioja ejerce en la provincia y el apoyo que el Ejecutivo Nacional le ha prodigado le ha permitido esquivar la Ley de protección de glaciares y lanzarse a la producción de oro sin límites. En estos días el derrame de cianuro en la cuenca del río Jáchal, cercana a los yacimientos auríferos, ha puesto en peligro de muerte (sí, de muerte) a miles de habitantes de la zona; y como ocurre siempre, ni la prensa crítica ni la oficial o para-oficial de Cristina le han dedicado mucho espacio. El negocio ha sido altamente rentable para los Gioja, al punto que se han convertido en millonarios cuya fortuna personal haría palidecer de envidia a muchos de los oligarcas tradicionales del país.
Gildo Insfrán, el amo y señor de Formosa desde 1995. Maneja las arcas de su provincia como si fueran las de su estancia propia. Mientras la provincia se vuelve cada vez más pobre, el Gildo y su entorno se enriquecen desmedidamente. Las regalías petroleras que producen el yacimiento El Palmar Largo y otros están afectadas desde hace años y por mucho tiempo aún a garantizar la enorme cantidad de préstamos que Insfrán ha contraído con la banca internacional para quién sabe qué fines, porque sino no se explicaría que la población aborigen se siga muriendo en la pobreza y los niños criollos carezcan de la asistencia sanitaria más elemental. Otro señor más que acusa de oligarcas a todos los productores del campo por igual.
La familia Menem en La Rioja. No vamos a explayarnos demasiado en ellos porque conocemos su historia de sobra. Lo que nadie dice es que hoy Carlos Saúl cuenta con el apoyo y la bendición de Cristina Kirchner para que no pierda su banca de Senador y conserve los fueros que obstaculicen la acción de la Justicia para toda la sarta de acusaciones que hay en su contra.
Néstor y Cristina Kirchner en Santa Cruz. Gobiernan esa provincia, directa o indirectamente, desde el año 1991. Recibieron de Menem y Cavallo, como contrapartida por su apoyo decidido a la venta de YPF, el pago de las regalías petroleras que adeudaba el Estado Nacional, que se estimaban, en 1994, en 700 millones de dólares. Ese dinero, dicen los santacruceños, se esfumó y nadie se hizo cargo jamás. La influencia del matrimonio Kirchner no solo se hace sentir en su provincia, a la que han manejado como su propio feudo, sino también en provincias vecinas. Por ejemplo en al año 2007 intervino en Chubut para que esta provincia le prorrogara la concesión del riquísimo yacimiento de crudo y gas llamado Cerro Dragón a Pan American Energy por 20 años, con opción a 20 años más. El matrimonio Kirchner no ahorra epítetos cuando hay que cargar contra la “oligarquía” argentina; pienso cuántas mujeres de los finqueros que conozco querrían tener las carteras Louis Vuitton y los relojes Rolex que usa Cristina, pero bueno, una cosa es el Relato y otra la realidad.
Desde luego que para que en las provincias que señalamos cada gobernante pueda hacer lo que hace se necesita una Justicia adicta, una Justicia que sea solo un apéndice del Ejecutivo Provincial. Los salteños recuerdan todavía aquellos casettes que circulaban en los ochenta con la voz de Emilio Cantarero, el responsable mayor del holding Horizontes, reprimiendo al Presidente de la Suprema Corte Provincial de entonces porque no había sido lo suficientemente inteligente y eficiente al defender los intereses de la familia Romero frente a un planteo judicial de un competidor comercial. Lo peor no era eso, sino la actitud servil del ministro de la Corte tratando de disculparse por su error.
El Consejo de las Américas, denostado furiosamente por la izquierda argentina y latinoamericana, tiene entre sus miembros a la Barrick Gold, a Pan American y a Chevron, con la que Cristina selló –a través de YPF- un acuerdo para la explotación de Vaca Muerta. Si Urtubey asiste a sus reuniones es porque ha sido comisionado para ello por Scioli y por la plana mayor del Kirchnerismo; nadie piensa que el hombre se va a largar sólo. En este país donde todos dicen ser puros y limpios, nadie lo es.
Pero, si la alternativa al American Council son los millonarios rusos, que se apropiaron del patrimonio acumulado por el pueblo de la Unión Soviética durante 70 años de socialismo, o los chinos que desplegaron el capitalismo más salvaje en su país con la bendición del Partido Comunista Chino, o el chavismo residual con Nicolás Maduro como líder; digo si esas son las alternativas a los yanquis, pues tendremos que pensar muy bien en el futuro con quién negociar.
– Por El Tala (lector y comentarista crítico de Salta 21)
