El film se estrenará en Buens Aires como parte de un proyecto de Nación. ¿Quién piensa en Salta en alternativas culturales que nos «sumen»? Aplaudimos iniciativas con tamiz crítico y pedimos acceso a la cultura. No queremos masividad, queremos oportunidad.
Las contradicciones son moneda nacional, pero alguien tiene que contar nuestras verdades. Argentina latente dispara, como otras películas, el saldo positivo pese al neoliberalismo. En Salta hay fragmentación cultural. En búsqueda de cambios, alternativas y criterios, nos encaminamos hacia nuestra región, desde una óptica que trasvasa lo nacional hacia lo propio. ¿Qué es la argentinidad? Todos esperamos que surja la Salta latente.
A propósito del estreno de la película Argentina latente -que se realizará en Buenos Aires el 24 de mayo-, antes de verla, por el título sugerente y la lectura del contenido, se me dispararon varias reflexiones.
Argentina vista como un país de ficción, en el que la riqueza distribuida en forma desigual, filtra no sólo las capacidades y talentos sino también las alternativas. Hay niños, jóvenes y adultos que están fuera del acceso por ejemplo, al libro. Le preguntás a un chico que vive en una villa si conoce una biblioteca y tenés que explicarle que se trata de un espacio en el que están los libros. Pero no tiene un vuelo inspirador más que para reducir el concepto al objeto depositario. Algo tan simple como esto, no existe en la mentalidad de muchas de las zonas carentes de recursos en Salta. Mucho menos acceden al cine, “para qué pagar tanto dinero”, si con la venta de películas “truchas” llenan los espacios que debieran estar ocupados con la mente crítica. Lo mismo le pasa al común de la gente, si hace frío incluso, no es buen momento para ver nada. Desde la cama el zapping funciona bien, aunque la cabeza no responda para nada.
Argentina latente es un film de 100 minutos dirigido, escrito y relatado por Fernando Solanas con música original de Gerardo Gandini. La proyección del film está destinada a docentes, sugerida especialmente para ellos.
Y surge la pregunta, ¿quién se ocupa en Salta de brindar a los profesores y maestros una “alternativa cultural”? Las iniciativas siempre surgen en forma aislada y cada quien se las arregla para ir al cine en los tiempos que puede y si tiene dinero para hacerlo. Hay poco acceso a la cultura porque además de lo económico, entre los malos regímenes de calificación que exigen una sumatoria de “cartones” que reflejen la odiada palabra “capacitación” y la burocracia de “proyectos” que apuntan a la “calidad”, el magíster se desvela entre un mundo de papeles que no motivan a nadie.
¿Cuántos libros pueden leer, cuántas películas pueden ver, a cuántas sesiones culturales de la sinfónica pueden acceder, cuántas obras de teatro pueden comentar? .
Salta latente es el próximo film. Salta latente abordará la temática de cómo sobrevivir al desmonte en Salta; desde un helicóptero se filmará la huída de las comunidades indígenas perseguidas por policías de la zona o gente del gobierno; se registrará un paneo en la zona céntrica más exhibicionista de Salta por la cual circulan niños que piden limosna y madres conniños en brazos que estiran la mano por una moneda.
Recorrerá con una cámara con zoom las entradas a los colegios y escuelas públicas en las cuales el estudiante que llega primero tiene banco, se meterá por los sanitarios de mala muerte de algunas escuelas y sobre todo, paseará por el único sanitario que existe para los magíster luego de dar una vuelta completa por todo un colegio. El resto del paisaje puede ser, techos que se caen, bibliotecas sin funcionar por ser obsoletas, laboratorios sin materiales, ¿mapotecas? ¿videotecas?.
Tantas cosas se pueden mostrar en Salta latente. Esta película será un ensayo testimonial también, como la película de Solanas. Y la publicidad marketinera podría ser: De Luz de invierno a Salta latente, en búsqueda de respuestas.
Lo bueno del film de Solanas es que -aparentemente- tiene una hipótesis de cómo enfrentar la reconstrucción del país. Y recopila testimonios de técnicos, trabajadores y científicos, hacen memoria sobre lo que fueron capaces de hacer y señalan las contradicciones: un país muy rico con un avanzado desarrollo científico, que tiene manchones de pobreza y no logra detener la fuga de cerebros.
En Salta, no hay manchones de pobreza, hay agujeros negros, hay universos de pobreza. Por eso viene bien recordar la película Luz de invierno. La imagen del auto que gana una familia de escasos recursos termina siendo un elemento de conflicto porque no tienen ni para la nafta y ni qué decir cuando les roban una rueda. Si no podían comer, mucho menos comprar una nueva rueda.
Argentina latente parte desde la crisis del 2001, basada en la política neoliberal de los años noventa. Solanas tiene una serie de films independientes entre sí que van reconstruyendo una historia “Memoria del Saqueo” (2004) sobre las causas del desastre; “La Dignidad de los Nadies” (2005) que expresa la resistencia y solidaridad social de las víctimas; ahora “Argentina Latente”(2007) que descubre las capacidades creativas y técnicas del país para su relanzamiento. En rodaje y edición, está “Los Hombres que Están Solos y Esperan” (2007) film sobre lo público y privado, que analiza la fracasada privatización del tren y la gestión de los servicios públicos. Suena bastante interesante y motivador, esperamos en la otra parte de Argentina, la llegada de la última de Solanas.
En el país de la memoria frágil, el director del film la recupera con hechos destacados en el plano de la ciencia. Esto parece indicar que es optimista.
Nosotros sí creemos en la gente, en los intelectuales, en los comunicadores sociales, en los maestros, en los estudiosos, en los hacedores del presente, en los que miran con criterio el mundo, en los artistas, en los que salvan y cuidan la vida, en los que intentan hacer justicia, en los historiadores… y de alguna manera esto predispone a ver la película.
También expone Solanas estas contradicciones que surgen entre la falta de alimento y la riqueza de exportación, hecho a tener en cuenta sobre todo en una Salta donde los bolsones que algunos empresarios políticos venden al gobierno- cada producto cuesta centavos pero al por mayor son fortunas- compran los votos de los que nos gobiernan. La escasez del pan en la mesa compra el futuro del que lo tiene. En una Salta donde se desmonta para que otros cultiven y se lleven los “frutos” y capitales en forma dehonesta a costa del empleo temporario y la mano de obra barata de los que contemplan la destrucción, mientras te largan mensajes ecologistas y falsas preocupaciones por la humanidad.
“Cine y educación”, en realidad es un proyecto pedagógico organizado por el Ministerio de Educación, ciencia y tecnología de la Nación que organiza un circuito de exhibición alternativo para docentes y estudiantes. En este contexto está Argentina latente. Como iniciativa es muy buena, habría que ver quiénes y por qué motivo están dentro de este proyecto ya que el propio ministerio realiza una selección del material cinematográfico. La conexión entre el cine y la educación propone una alternativa didáctica y un material de análisis crítico.
¿Cuál habrá sido, por ejemplo, el destino final del documental “Sólo se escucha el viento” de Alejandro Mouján, que fue censurado en Salta? Este material traía una muestra de la actividad desarrollada en Chaco por las topadoras que convertían la zona boscosa del Gran Chaco Americano en una pradera de soja y que de alguna manera, serviría para polemizar sobre la venta de los lotes 32 y 33 de General Pizarro en Salta. Queremos ver esto y más.
Cine y Educación cuenta también con el Auspicio del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) y del Museo del Cine Pablo C. Ducrós Hicken de la Secretaría de Cultura del G.C.B.A.
Otra de las películas que fueron ampliamente recomendadas no sólo a nivel de proyecto educativo sino como un material de lujo con crítica de los medios más importantes de Bs. As. fue el documental “Bialet Massé, un siglo después”, de Sergio Iglesias. Ahora está dentro del paquete pedagógico porque toca temas éticos y relacionados a la historia argentina. La película se llevó el Oscar al mejor documental año 2006.
Se trata de un informe escrito en 1904 por Juan Bialet Masse -médico, abogado, ingeniero, agrónomo, empresario, investigador y aventurero español- que revela las condiciones de vida, el abuso y la injusticia que sufrían en esos tiempos los trabajadores y nativos de Argentina. Fue declarada de interés Educativo por el Ministerio de Educación de la Nación (Res Nº 501- 11 de mayo de 2006) y por la Secretaría de Educación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. RES. N°: 621/05.
Entre los films recomendados en este contexto, está “La marcha de los pingüinos” de Luc Jacques que narra la migración invernal del pingüino emperador y sus rituales de apareamiento y procreación en el medio ambiente natural más adverso del mundo.
En Salta latente también se mostrará que pese a todo en los últimos años hay gente que trabaja por la cultura, el arte, la educación, la ciencia, la prensa, la ecología, la libertad, la justicia, en fin, por el desarrollo del ser humano. Pero como metáfora de búsqueda estará el libro para el niño, el joven, el adulto porque es la punta del iceberg.
Sugerencia final: los salteños queremos ver todos los films recomendados y censurados para buscar criterios, valores y alternativas y no sólo como herramienta pedagógica.
Acceso a la cultura, ¿es mucho pedir?