Abogados de Derechos Humanos denuncian que en el desalojo de “Divino Niño Jesús de Praga” hubo abuso policial, violencia injustificada, y detenidos secuestrados varias horas antes de ser ingresados en la Alcaidía. El gobierno acusa a la oposición.
El desalojo se llevó a cabo en la tarde del viernes 21 de septiembre. Previamente la zona había sido rodeada por fuerzas policiales. En el predio conocido como “Divino Niño Jesús de Praga” -ubicado en la zona oeste de la ciudad, cerca de las canchas donde se juega el torneo de los profesionales- se habían venido asentando desde días antes grupos de familias sin viviendas.
El juez Héctor Martínez libró una orden de desalojo y entraron en acción unos 700 policías, fuerzas de choque apoyadas por la infantería policial en lo que pareció una acción desproporcionada en vistas de la cantidad de personas que ocupaban el lugar no era tan importante.
Durante la acción de desalojo hubo violencia. La policía arrastró y golpeó a algunos de los ocupantes y resultaron agredidas muchas mujeres, incluso embarazadas. Un grupo se encadenó y resistía en un arco. Una mujer amenazaba con cortarse, presa de una crisis de nervios. Finalmente el sitio fue totalmente despejado.
Como resultado de la acción policial hubo 15 detenidos y varias personas resultaron lesionadas. El abogado de la Red de Derechos Humanos Pedro García Castiella denunció que hubo abuso por parte de la fuerza policial que desplegó una violencia inusitada e injustificada dado el número reducido de personas que ocupaban el predio, en su mayoría mujeres.
También denuncian desde la Red de Derechos Humanos que las personas heridas no lograron obtener en el hospital una certificación médica que documente sus lesiones, y que a los detenidos los tuvieron varias horas paseándolos por distintos puntos de la ciudad para recién ingresarlos oficialmente en la Alcaidía pasada la medianoche.
El abogado Castiella comparó la acción desplegada por el juez Héctor Martínez quien dio la orden de desalojo en Divino Niño y no se hizo presente en el lugar con la del magistrado Félix Costas quien durante la huelga docente impidió que la policía golpee a los huelguistas.
El letrado indicó que quien se dice cristiano debería tener consideración -más allá de la acción objetiva que pudiera encuadrarse legalmente en la usurpación- por tratarse de gente humilde que está en una situación de necesidad extrema. “Este juez está contra la libre opinión y contra los pobres”, opinó el periodista Sergio Poma, quien fue condenado por el juez Martínez por “injuria al gobernador”.
Desde el gobierno acusan a la oposición de estimular acciones de “usurpación” y “ocupación de terrenos públicos y privados” como parte de la campaña política. El titular de Familia Propietaria ingeniero Alexandrowicz afirma que “no existe una crisis habitacional en Salta”, y que no hay asentamientos en la provincia ya que todo se reduce a la necesidad de un “reordenamiento urbano”.
El violento desalojo en Divino Niño Jesús de Praga recuerda otras escenas dramáticas registradas con anterioridad en la acción policial con la que desalojó a personas que se habían asentado en San Expedito. Un mes atrás un grupo integrado por unas 50 personas cortó la Avenida Tavella para reclamar por servicios en otro asentamiento conocido como Primera Junta. “Tenemos chicos, no podemos vivir sin luz y sin agua” reclamó una joven mujer ante un cronista de FM Noticias.
