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martes, abril 23, 2024

El problema de la identidad en “Por tu padre”. Luppi y Navarro en Salta

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La dramaturgia de la obra “Por tu padre” propone una intrincada sensación de angustia que muestra la arqueología de un pasado traumático para el joven protagonista que se pregunta “¿Por quién lloro?”

La obra se instala en una misa por el padre muerto al tiempo que el joven se bate a insultos contra el ex socio del fallecido. Navarro, protagoniza a un ex esposo y padre de un niño de 12 años, quien reprocha a este “viejo amigo” de la familia, encarnado por Luppi, el haberle arruinado la vida tras su oculto romance con la madre. Un ambiente oscuro tiñe la atmósfera extraña, afuera hay tormenta y adentro, también. Adrián Navarro, el galán de las maduras en “Secretos de amor”, maneja un registro de actuación que no varía durante una hora quince. Llora desde el principio al final, invadido por una angustia que nunca cesa.

En la segunda aparición de Luppi, actor representante de la generación del 60′ y de impecable trayectoria escénica, este encarna al padre y el muerto es el socio. Pero allí se revela una verdad para el joven treintón, cosa que vuelve a incomodarlo porque ya no sabe quién es. Sí sabe que le han mentido, que le han armado la familia perfecta y ahora encuentra que su verdadero padre, el socio, ha muerto.

La actuación de Federico Luppi es ajustada, sin desequilibrios, sin baches, si bien hasta aquí hace dos papeles componiendo a dos personajes, lo que lo modifica es el cambio de vestuario y la actitud que impone la reacción frente a lo que sucede. El texto propone una especie de desencanto frente al amor y a una necesidad de aceptar un tercero en la pareja. El discurso se vuelve monótono y denso por momentos, el ritmo decae y se pierde el interés frente a un tema de insostenible voltaje. Los consejos del padre suenan hasta humillantes e indignantes casi patéticos como que el joven vuelva con su mujer a cualquier precio – como lo hizo él- aunque esta se haya acostado con otro y él lo sepa con lujo de detalles. Porque lo importante es que uno es el deseo y otro el amor. “Era yo quien dormía con tu madre por las noches”- le espeta al desconsolado joven. Me parece que tiene que ver con mantener las apariencias, cosa inaceptable para alguien en busca de la verdad.

hi_6-52.jpgAparecen alusiones a “amigos desaparecidos” de la madre años atrás – dictadura- y a cierto silencio como si fuese en paralelo con las cosas que la familia también calló. Como que algo del no decir y no tratar se mantuvo en la familia para ocultar la verdadera identidad del joven. Es un tema que no queda claro y que no se desarrolla, como esbozos de un pasado oscuro, entre otras oscuridades, similares a la poca claridad que se halla en el presente. Lo interesante de la puesta es justamente esa especie de ensoñación, esa confusión de tiempos en un mismo espacio, en donde el sentido de la vida se pierde totalmente y quizás, este joven de treinta, asiste a una misa de sí mismo. En mi opinión hay un final abierto y el espacio físico dado por un sitial de iglesia, termina siendo la excusa para una revelación que no acontece en el plano de lo real.

En una última aparición, Luppi interpreta al cura de la misa en una breve composición que precipita el desenlace de la obra. Ya no tiene sentido el reencuentro del joven con su padre sino el reencuentro consigo mismo.

Buena.

Por tu padre, de Dib Carneiro Neto. Título original: Adivina quién viene a rezar. Intérpretes: Federico Luppi y Adrián Navarro. Diseño de escenografía y vestuario: Marcelo Pont Verges. Diseño de luces: Gabriel Cavia. Diseño de sonido: Toni Rodríguez. Asistente de dirección: Federico Lama. Dirección: Miguel Cavia. Duración: 72 minutos.

– Nota relacionada:

“Por tu padre” llega a Salta

https://www.salta21.com/Por-tu-padre-llega-a-Salta.html

1 COMENTARIO

  1. El problema de la identidad en Por tu padre. Luppi y Navarro en Salta
    Vi la obra mas de una vez… y la verdad es que la actuacion de Navarro lejos esta de ser monocorde a lo largo de la hora y cuarto que dura la pieza. Y mucho menos que lo unico que hace es llorar…. llora, si, y mucho, pero tambien grita, se enoja, intenta crecer, se vuelve aquel chico de 12 años al que la obra refiere, cuestiona y se reprime….. pasa por mil estados de animo en esa hora y cuarto y los refleja de maravillas. Creo que decir que simplemente llora todo el tiempo es quedarse en la superficie, analizar solo lo que esta a la vista y no ir un poco mas alla….

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