Por ejemplo y vaya usted anotando los temas, seguramente el abogado gobernador hablará del equilibrio de las cuentas fiscales y del aumento de la recaudación.
El próximo domingo 1 de abril del corriente año 2012, siguiendo un rito impuesto por la Constitución de la Provincia, el joven gobernador Juan URTUBEY dará su discurso inaugural del tan breve como insulso periodo anual de sesiones de la legislatura, en el cual abundará en cifras y estadísticas del tan pregonado cambio con esperanza, al final del cual seguramente nos recordará que queda mucho por hacer, pero que él está dispuesto a seguir adelante con el apoyo de todos los salteños. Es muy particular que nunca aluda en sus exposiciones públicas a las salteñas. Toda una cualidad, o la falta de ella según se mire.
Durante muchos minutos que transmitirán todos los medios locales, se reiterará en cada uno de los hogares que tengan el atrevimiento heroico de escucharlo, la situación inevitable de sentir que la Provincia de la que habla el joven mandatario no es la que transitan todos los días los oyentes. Y no por reiterado lo tenemos que dejar de mencionar esta vez, tal situación dual se produce porque la elite gobernante que representa a la clase económica y social dominante vive en un mundo, y el resto lo hacemos en otro. Y entre ambos existen enormes diferencias.
Por ejemplo y vaya usted anotando los temas, seguramente el abogado gobernador hablará del equilibrio de las cuentas fiscales y del aumento de la recaudación. No hablará del decreto que en pleno periodo de sesiones de la misma anodina legislatura que lo escuchará y aplaudirá en cada pausa programada para eso, dictó bajo la pretensión de necesidad y urgencia prorrogando la emergencia económica de Salta que rige desde el año 1991. Personalmente estoy convencido que el uso de esa herramienta –decretos de necesidad y urgencia- se fundamentan en la necesidad de suplir la inactividad e incompetencia de los diputados y senadores y en la urgencia de tener que asumir que esas dos falencias no tienen remedio.
Luego detallará los progresos de la obra pública que se reactivará con el fondo de reparación histórica, y cómo los departamentos del norte de la Provincia saldrán del atraso y la marginación. No aclarará por supuesto que el adelanto teórico de esa zona –cuestión que habrá que seguir con detalle en los próximos meses- será a cambio de la entrega nuevamente de las regalías hidro carburíferas por otros diez años, en una copia literal del negocio de su antecesor y supuesto enemigo político, el anterior regente de la comarca el Dr. Juan ROMERO. Este si tiene título de doctor. En realidad no tan igual, porque esta colocación de bonos es con mayor tasa de interés que la anterior. En este tema tampoco aclarará que no por casualidad su hermano fue designado por él mismo como administrador de estos fondos, quien ha manifestado públicamente que esos dineros serán un gran atractivo para la inversión privada. Como usted lo puede comprobar, ni siquiera ocultan que el fondo de reparación famoso es para los negocios del entorno. Y ellos tienen la llave de ese negocio. ¡Cómo se sacrifican estos muchachos¡
Seguramente también hará mención en reiteradas ocasiones a la inclusión social, reiterando el lenguaje que de la Nación le bajan a los gobernadores sumisos que siguen la línea del tan pregonado crecimiento de la burgesía nacional, como si ese crecimiento de los grupos económicos concentrados de la economía fuera la panacea de la justicia social, cuando en realidad es exactamente una relación inversa. No hablará por supuesto que la inclusión social que difunde no comprende a las comunidades originarias marginadas de la Puna Salteña, que esta semana debieron concurrir solos a la audiencia ante la Corte de Justicia de la Nación para reclamar por los perjuicios que la explotación de litio en la zona le está provocando. No dirá tampoco que él en realidad está del lado de las empresas mineras en la Provincia, del lado del llamado progreso con inclusión que finalmente no incluye a nadie, y que su papel de lobista de las multinacionales saqueadoras con alfiles de la supuesta oposición –el diputado Ricardo ALONSO por caso- se la pasan creando juntas consultivas de la minería para hacernos creer que las empresas que se dedican a dinamitar cerros y consumir los escasos caudales de agua potable son más buenos que la Madre Teresa de Calcuta, quien al lado de ellos que son tan serviciales y sensibles con la pobreza del lugar la famosa monja aparece como una vil especuladora.
Cuando le toque hablar del tema educación, por supuesto que afirmará que los maestros están chochos con los aumentos dados el año anterior, que por eso no hay paro, y que va todo viento en popa. No hablará nada de que las cartillas sobre educación sexual en esas mismas escuelas siguen sin distribuirse porque la moralina religiosa sacrosanta no se lo permite, aunque con ello tenga que incumplir con la ley nacional vigente y sigan los y las adolescentes de la Provincia en la más supina ignorancia del tema, lo que acarrea las conocidas consecuencias no deseadas. Consecuencias bien merecidas por andar en los revolcaderos, pensará algún ex ministro de educación y funcionario becado por las famosas asesorías a dedo que el joven gobernador reparte a diestra y siniestra mediante decretos firmados sólo por el.
Y así luego de un sobrecargado exceso de minutos de auto elogio seguido de oportunos aplausos que siguen a los énfasis de la oratoria estudiada, se retirará del recinto junto a su esposa que todos sabemos que no es más su esposa, poniendo la frutilla del postre que prueba una vez más que todo es ficción, que todo se actúa para sostener un sistema que sirve a unos pocos, mientras el resto la mira pasar. Es el sistema de las elites de clase dominante, que deciden a su antojo los planes de gobierno –negocios- para responder a una premisa de la misma clase económica que representan, por la que gestionan y por la que son elegidos. El sistema representativo es real, ellos representan a sus mentores. Si usted no tiene absolutamente nada mejor que hacer el domingo, y decide escuchar al joven mandatario en su ya harto conocido discurso, comprobará que al final y en medio de los aplausos de despedida, tendrá la sensación inevitable de volver a vivir, como dice el conocido relato de humor, la misma huevada del año pasado.
31 de marzo de 2012